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Colombia sin Gaitán
La CIA estuvo detrás del crimen contra el carismático líder de multitudes
Antonio / Agencia de los Pueblos En Pie - Revista Mariátegui
20/04/07
"Yo no soy un hombre, soy un pueblo." Era una entre las muchas frases celebres que el carismático líder liberal de multitudes, coreaba en plazas y calles de Colombia, algunos años antes de la Revolución Cubana, sin duda el hecho político que produjo una alta simpatía desde todos los rincones de Nuestra América y el Mundo.
Abril para los colombianos ha sido a lo largo de la historia, un mes cargado de muchos recuerdos, reflexiones pero sobre todo el de la perdida en manos de los criminales del norte, que son los mismos de hoy, vestidos con otros "atuendos", como si estos sirvieran para sepultar la memoria siempre viva del pueblo.
Jorge Eliécer Gaitan, fue un destacado politico, abogado, alcalde, ministro, congresista y popular candidato del partido liberal a la Presidencia de la República con muchísimas probabilidades de ser elegido presidente en los comicios de 1949 debido a su apabullante apoyo popular, en particular de la clase media y baja.
En 1933 fundó la Unión Izquierdista Revolucionaria (UNIR, y su órgano periodístico El Unirismo), que poco tiempo después disolvió para vincularse al Partido Liberal, y desde donde planteó la necesidad de una reforma agraria.
Este querido y aclamado dirigente de multitudes con claro sentimiento y acción Antiimperialista, en aquel año de 1948, guardaba sigilosamente, unos documentos que producto de una investigación sobre la intervención Yanqui en la explotación de petróleo en Colombia con la participación del presidente Ospina y la colaboración de tres empresarios antioqueños.
La desaparición misteriosa de esos documentos de su oficina el día de su muerte, permitiría además acentuar las sospechas de que la CIA y la oligarquía Colombiana, en cabeza del mismo presidente conservador de ese entonces Mariano Ospina Pérez, estaban detrás del complot contra Gaitán.
Gaitán dice su hija en su testimonio "organizó una gran Convención Popular en la Plaza de Toros de Santamaría, donde el pueblo, democráticamente, votó directamente por su plataforma de lucha como preámbulo a las elecciones parlamentarias en las que Gaitán, como jefe popular, se enfrentó a la facción comandada por Eduardo Santos, que escogió sus candidatos y su programa a puerta cerrada. El triunfo del gaitanismo frente al oficialismo liberal fue aplastante. Congreso Nacional, asambleas y concejos resultaron con mayorías contundentes gaitanistas. Eduardo Santos, en un gesto democrático y de gallardía, envió entonces las llaves de la dirección liberal con "el chino de los mandados" --como entonces se le decía a los mensajeros-- a las oficinas de Jorge Eliécer Gaitán y se fue del país, como lo hicieron López Pumarejo y Lleras Camargo. Semanas más tarde Gaitán era proclamado jefe único del partido liberal, un partido que ya no era el mismo. Conservaba el nombre, pero su esencia era diferente. Como lo anotará el historiador Cordell Robinson "...El resultado final fue algo semejante a un nuevo partido que se denominó entonces Liberal-Gaitanista [...] el Partido Liberal se tornó, para todo fin práctico, en un brazo del movimiento gaitanista"..
En 1931 fue representante a la Cámara, escenario que le sirvió para denunciar la masacre de los trabajadores de la fincas bananeras en el departamento del Magdalena, hecho que fue inmortalizado por Gabriel García Márquez en su obra 'Cien años de Soledad'. En 1924, después de graduarse en la Facultad de Derecho y Ciencias Políticas de la Universidad Nacional de Colombia con la tesis "Las ideas socialistas en Colombia", Gaitán empezó su célebre carrera política que lo llevó a ser uno de los inmortales líderes de la vida nacional. Defendió hasta el día de su muerte su postura contra el monopolio de la tierra y la causa de los más necesitados.
Ese mismo día Gaitán y Fidel Castro tenían una cita, pues en ese entonces Fidel se desempeñaba como líder de la federación de estudiantes cubanos, y les llamaba mucho la atención Gaitán era en aquel momento la figura política de más prestigio, de más apoyo popular, se le consideraba sin duda de ninguna clase el hombre que iba a obtener el triunfo en las próximas elecciones de Colombia.
Gracias al documental hecho por el ICAIC, se logra establecer, Luego de indagatoria que la policía cubana le hiciera al agente norteamericano John Mepples Espirito, detenido en Cuba cuando adelantaba operaciones de inteligencia para la CIA con miras a derrocar el régimen de la Revolución Cubana en los años sesenta. Como desde la CIA se planeo el magnicidio de Gaitán.
Desde la muerte de Gaitán Colombia y su pueblo han estado bajo mira Imperialista, como sucedió en la Operación "Pantomima", operación que, según las declaraciones de uno de los agentes norteamericanos involucrados en el asesinato de Jorge Eliécer Gaitán, le dio el Departamento de Estado a la participación yanky en el complot organizado para asesinar al líder colombiano el 9 de abril de 1948.
Luego de este hecho que marco la vida de los colombianos, surgen a lo largo y ancho del país, grupos revolucionarios, que luchan por muchos de los postulados que Gaitán encarnaba en aquella época. De ninguna manera la muerte de Gaitán fue en vano, su pueblo lucha en las calles y plazas como aquel 9 de abril en el desarrollo del Bigotazo, como respuesta y expresión de la ira popular por tener que despedir a la fuerza a quien fuera su esperanza.
La Colombia de hoy sin Gaitán vive y lucha por su Dignidad y la paz
Mariátegui.
La revista de las ideas.
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