La radio libre bilbaína Irola
Irratia cumple 20 añitos desde que en 1987 les dio
por liberar de la lógica capitalista el 107.5 del FM bilbaíno,
y se montaron una celebración a la altura. Este Encuentro de radios
y concierto fue el punto culminante de otras actividades como cenas, edición
de material especial etc… y allí estuvimos la gente de Latido
de Libertad, junto a otros compañeros de nuestra emisora, radio
ELO.
El viernes era la recepción en el impresionante Gaztetxe
de Kukutza, una enorme nave en pleno centro del barrio de Errekalde
pero con el espacio perfectamente aprovechado, y no hablemos ya de la
decoración y la infraestructura, especialmente la de la sala de
conciertos, que haría palidecer de envidia a más de un recinto
comercial. Como pequeña fiesta de bienvenida, la actuación
gratuita y “en familia” de Manolo Kabezabolo,
que repasó del tirón y en solitario, que es como más
mola, todos su grandes éxitos. Después, deliciosas pizzas
vegetarianas regadas con algunos caros botellines.
El sábado desayuno, y asamblea de radios libres y comunitarias
llegadas de diversos puntos del Estado: lógicamente muchas de Euskal
Herria pero también Madrid, Barcelona, proyectos en Cantabria o
Burgos… con la principal intención de conocernos entre nosotros
para atajar el problema de falta de comunicación existente entre
proyectos más o menos similares, e intercambiar opiniones e ideas
sobre cómo funcionar. Quedó patente nuevamente la diferencia
que existe entre radios libres y radios comunitarias pero también
la necesidad y coherencia que supone la colaboración en temas comunes.
Después de todo un día de asambleas y convivencia, con el
puntazo del increíble comedor vegano del gaztetxe, llegaba el concierto,
que abrieron los locales y grupo emblema de la Irola Undécimo
Mandamiento, que como era previsible tuvieron como megahit con
la colaboración a las voces de compas de la emisora el tema que
sirve de sintonía a Irola Irratia. “No es una radio cualquiera,
es una radio libre”… Continuaron Lendakaris Muertos.
Nos picaba y muchísimo la curiosidad, morbo o como quieras llamarlo
de ver a este grupo tan provocador y de coña tocando en su tierra
y más aun en un recinto político como es un Gaztetxe. Y
se ve que eso del morbo nos mola a todos, que las canciones más
coreadas y bailadas eran precisamente las que más coña se
traen con el mal llamado “problema vasco” (y no hablo de no
follar) aunque hubiera algún que otro silbido. Como comentó
un compañero de la Irola: “las coñas viniendo de gente
como esta que llevan años en el rollo no es como si las hace un
niñato que no sabe de qué va la vaina”. Pues eso.
Entre concierto y concierto, se leyó el comunicado de los organizadores
mientras se pegaba fuego a los logotipos de las dos grandes radios burguesas
del estado, la COPE y la SER, y llegó el plato fuerte de la noche
y el que realmente llenó Rekalde: los ingleses GBH.
Sinceramente, sigo muy poco el punk inglés, no me termina de llamar
la atención, y el calor dentro del recinto era agobiante, así
que apenas ví un par de temas para ver como se lo hacían
y me salí a la puerta.
Y nada, noche de jarana por Bilbao con compañeros de radios varias,
visita el domingo por la mañana a las instalaciones de la Irola
Irratia y vuelta de cada mochuelo a su olivo. Según lo acordado
no serán los últimos encuentros que se realicen ya que hay
intención de reunirse de cuando en cuando para ir avanzando todos
juntos. Gora Irola Irratia. Gora irrati libreak! ¡Vivan las radios
libres!
Santi
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