2006-05-16 - AUTOVÍA CÁCERES-BADAJOZ: VA A SER QUE NO  VÍCTOR MANUEL Casco

Ahora que está tan de moda el transformismo ideológico y el mercadeo de principios, donde un Partido Popular puede justificar al mismo tiempo la energía nuclear y la energía renovable o mantener el sí, el no y la abstención a la refinería de petróleo y un partido socialista puede prometer defender el medio ambiente, negarse a convertir en autovía la EX-100 y ocho meses después proponer la Autovía en la EX-100, ahora que está en vigor de cara a las elecciones ofrecer en cada esquina lo que sea con tal de obtener votos, permitan a esta pequeña fuerza política mantener firmes sus principios y abogar por el cumplimiento de los programas: decir No a la Autovía Cáceres-Badajoz es una responsabilidad si se quiere preservar uno de los espacios de mayor biodiversidad ecológica de la Península Ibérica y gobernar con racionalidad y con equilibrio. Gastarse 400 millones de euros en una autovía que no va a seguir el trazado de la actual carretera entre las dos capitales de provincia, y ello a pesar de que el tráfico no es excesivo y las características económicas y administrativas de las dos ciudades no provocan desplazamientos masivos, gastarse ese dinero de todos los extremeños para satisfacer el cesarismo de Rodríguez Ibarra y dejar sin argumentos al Partido Popular (que en todo caso son argumentos más serios que el empleado de favorecer el desarrollo de los Corte Inglés en Cáceres y Badajoz), aprobar esa política, es una de las mayores muestras de irresponsabilidad del partido que nos gobierna.

LA AUTOVIA Cáceres-Badajoz es innecesaria y un despilfarro injustificable. Son opiniones de Julián Mora que compartimos. La propia Dirección General de Medio Ambiente establece las características ecológicas de esta sierra: bosques y matorral mediterráneos, dehesas, roquedo y zonas de cultivo, fauna compuesta de lobos, linces, gato montés, ciervos, jabalí, águila imperial, buitre negro o búhos reales. Sobre todo ello se pretende descargar el cemento y el hormigón, engañando a los ciudadanos para que crean que la única forma de potenciar el desarrollo es destruir nuestro ecosistema. El 15 de septiembre de 2005 el diputado socialista Olivenza Pozas rechazaba la propuesta del PP de construir la autovía Cáceres-Badajoz por considerar que debíamos preservar nuestros valores, que la responsabilidad de un gobierno estaba en decidir lo prioritario y lo secundario y que con la autovía Badajoz, Mérida y Cáceres las tres capitales estaban comunicadas. Parece ser que hoy el Gobierno socialista ya no quiere ser responsable y que lo que un día se dice no vale nada al otro.

Para mi formación política, el desdoblamiento de las entradas a Cáceres y Badajoz y el tercer carril en la EX-100 a su paso por la Sierra de San Pedro sigue siendo la alternativa más válida para conjugar desarrollo sostenible, protección medioambiental, austeridad en el gasto y favorecer los desplazamientos ciudadanos.

*Coordinador General de IU Extremadura