Causas que inducen a la revolución superando históricamente a la simple reforma

01. Prólogo

Estimado señor Horacio:

          Interpretamos que Ud. nos ha remitido el importante trabajo de Pierre Rimbert —con el que coincidimos—, para que sea divulgado. Lo haremos pero si antes somos capaces de aportar a ese texto, una breve introducción que pueda permitir a nuestros lectores, acceder más fácilmente a la comprensión de lo dicho allí por el autor y esto es lo que intentaremos a continuación, sin antes también citar el brillante párrafo en la obra de Trotsky titulada: “Literatura y Revolución”:

<<Ninguna idea progresista ha surgido jamás de una “base de masa”. Si no, no sería progresista. Sólo a la larga va la idea al encuentro de las masas, siempre y cuando, desde luego, responda a las exigencias del desarrollo social. Todos los grandes movimientos han surgido como “escombros” de movimientos anteriores. Al principio el cristianismo fue un “escombro” del judaísmo. El protestantismo un “escombro” del catolicismo, es decir, de la cristiandad degenerada. El grupo Marx-Engels surgió como un “escombro” de la izquierda hegeliana. La Internacional Socialista fue preparada en plena guerra (mundial) por los escombros de la Socialdemocracia Internacional. Si esos iniciadores (como Marx, Engels y Lenin) fueron capaces de crearse una base de masa, fue sólo porque no temieron al aislamiento. Sabían de antemano que la calidad de sus ideas se transformaría en cantidad. Esos “escombros” no sufrían de anemia; al contrario, contenían en ellos la quintaesencia de los grandes movimientos históricos del mañana>>  (Op. Cit. Tomo II Ed. Ruedo Ibérico/1969 Pp. 192. El subrayado y lo entre paréntesis nuestros).  

 

          Ya lo hemos dicho: si a nosotros —incluido Ud. y ahora uno más conocido por nosotros llamado Pierre Rimbert—, se nos puede atribuir una virtud, es precisamente no temer al aislamiento. Este  nuevo compañero nuestro es un periodista francés que trabaja para el periódico “Le monde diplomatique”, del que pasó a ser subdirector desde 2010, así como también es miembro actualmente de la “Asociación de análisis y crítica de los medios de comunicación” (Acrimed) y del diario Le Plan B, heredero del periódico PLPL del cual fue uno de sus fundadores.

          Un saludo: GPM.