GALPÓN SUR, UN ESPACIO DE ENCUENTRO

   

Desde el primer día que la vimos, un 20 de julio de 1999, supimos que nuestra casa iba a tener las puertas abiertas. No sabíamos muy bien qué iba a pasar ahí adentro, quiénes la frecuentarían, qué actividades se desarrollarían... nada de eso estaba claro. Pero una idea sacudía nuestros corazones: no íbamos a estar solos, eso era seguro. A La Plata le andaba faltando un lugar donde encontrarse y nosotros teníamos enfrente la posibilidad de crearlo. Y así lo hicimos.
Apenas habíamos empezado a reconstruir el Galpón de la calle 16, y en medio de montañas de arena, latas de pintura, maderas y rollos de membrana, comenzaron a aparecer los primeros afiches verdes y amarillos: las agrupaciones estudiantiles -AULE y MUECE- necesitaban un lugar para pintar carteles y allí lo tuvieron. Lo mismo pasó con las Azucenas, el grupo La Grieta, el Teatro Verdad, los familiares de víctimas del gatillo fácil, los Hijos. No había pasado un año desde que el Galpón abrió las puertas, que ya se estaba llenando de gente, de grupos compañeros, de amigos, de vecinos del barrio. Ya no había dudas, ese espacio de encuentro era más que necesario y nosotros lo estábamos levantando y compartiendo.
Hoy, a casi siete años de ese día del amigo del '99 y luego de la mudanza a la nueva casa de la calle 57, ese objetivo sigue tan intacto como al principio; se siguen sumando grupos y poblando al Galpón: la Mesa de Escrache Popular, Indymedia La Plata, el Grupo Humanidad, Tiburones y Mojarritas, entre otros. No hay tardecita en la que no encontremos a alguno de ellos reunido en el Galpón, algún compañero imprimiendo, haciendo carteles, planeando alguna nueva actividad. Y ese ir y venir permanente de compañeros, ese cruzarse a cada rato, permiten que nos conozcamos, que nos quedemos charlando, que empiecen a surgir ideas para trabajar en conjunto, que circule el mate, las invitaciones, las propuestas, las palmadas en el hombro cuando hay un problema, los abrazos y alegrías cuando salen bien las cosas.
Las Ferias y las fiestas de fin de año reforzaron aún más la idea de casa con tranquera abierta, se sumaron artesanos, artistas plásticos, músicos, títeres, payasos, magos, fotógrafos, vecinos, curiosos, más compañeros.
El Galpón, la casa, Galpón Sur, la Biblioteca, la casa amarilla, la Oesterheld... todos ellos son nombres de nuestro espacio de encuentro.