LLAMAMIENTO A TODAS LAS FUERZAS POPULARES, DEMOCRÁTICAS Y PROGRESISTAS DEL
MUNDO A DEFENDER LA REVOLUCIÓN BOLIVARIANA DE VENEZUELA ATACADA POR LA
CONSPIRACIÓN OLIGÁRQUICA E IMPERIALISTA
A medianoche "Proyecto Emancipación" (de Argentina) y "Resumen
Latinoamericano" se unen en este llamamiento:

Urgente. Miraflores. Maximilian Averlaiz, realizó un llamado a Correos para
la Emancipación desde el edificio de gobierno, a últimas horas de la noche
del día jueves, para que transmita a los medios comunicación alternativos, a
las organizaciones populares y a los amigos de la revolución bolivariana la
verdad sobre el golpe de estado oligárquico e imperialista en Venezuela.
La conspiración comenzó con el llamado a la huelga general por parte de la
corrupta y antiobrera Central de Trabajadores de Venezuela y el empresariado
agrupado en Fedecámaras, en una asociación perversa. Desde el inicio del
paro los medios alimentaron el clima de tensión y hostigaron a la población
en contra de las instituciones democráticas.
El paro fracasó ostensiblemente en todo el país. Sólo los lugares en los
cuales los empresarios cerraban sus puertas impidiendo a los trabajadores
realizar sus tareas permanecieron inactivos.
Luego de la primera jornada, la CTV y Fedecámaras convocaron a una huelga
indefinida y a una concentración para el día jueves 11, como parte del plan
insurreccional, en el cual los medios han cumplido un papel definitorio.
Mientras tanto, el pueblo de Caracas comenzó a concentrarse en Miraflores en
defensa de la Revolución, los sectores más pobres comenzaron a bajar desde
los cerros hacia la Casa de Gobierno.
Chávez en todo momento garantizó el derecho a manifestarse de la oposición,
llamando al pueblo a evitar caer en las provocaciones y denunciando la
ofensiva y manipuladora campaña mediática.
Mientras el presidente Hugo Chávez dirigía su discurso a la población en
horas de la tarde, los conspiradores -envalentonados por el éxito de la
marcha opositora- en una actitud criminal comenzaron a dirigirse hacia
Miraflores adonde estaban concentradas las fuerzas revolucionarias, con el
único objetivo de provocar un inevitable hecho de violencia.


Ante esta situación, el Gobierno ordenó a la Guardia Nacional que generara
un colchón de seguridad entre ambas manifestaciones para evitar los
disturbios. Fue en ese momento en que comenzaron a disparar sobre los
manifestantes bolivarianos un grupo de francotiradores que estaban apostados
en edificios a 200 metros del Palacio de Miraflores. Allí cayeron los
primeros dos muertos. Maximilien Averlaiz -miembro de la dirección de los
Círculos Bolivarianos- fue testigo presencial de estos sucesos.
Inmediatamente después, la fuerza ultraizquierdista, cómplice de la derecha
reaccionaria venezolana, Bandera Roja, que apoyó desde el primer momento el
plan desestabilizador, comenzó a hostigar a la Guardia Nacional. Entonces se
generalizó la violencia. También comenzó a disparar hacia la masiva
manifestación de apoyo a Chávez la policía de la Alcaldía Mayor de Caracas,
bajo las órdenes del traidor y fascista alcalde Alfredo Peña. La violencia
fue desencadenada por las fuerzas contrarrevolucionarias. La mayoría de los
muertos de la jornada fueron del lado del pueblo que defendía la revolución.
Avanzada la noche se sublevó un grupo de la Guardia Nacional y algunos altos
mandos de las Fuerzas Armadas. Estos sectores habían tomado el Canal
Estatal.
El poder de los medios de comunicación nacionales e internacionales ha sido
el instrumento principal del golpe, orquestado por las minorías
privilegiadas y respaldados por el poder hegemónico y fascista de los
Estados Unidos.
En esta noche reina una enorme confusión, ante la falta de medios
comunicación que transmitan con objetividad la situación.

Unos informes transmiten que el gobierno ha caído pero hay otras noticias de
último momento que indican que habría una nueva situación bajo control del
gobierno legítimo y constitucional del presidente Chávez.

William Lara, presidente de la Asamblea Nacional declaró esta noche que no
ha existido en la historia Venezuela un presidente que haya respetado más
los derechos constitucionales, que haya sido más tolerante con la oposición
y más democrático que Hugo Chávez.
Llamamos a todas las fuerzas democráticas y populares del mundo a mantenerse
en contacto, conformando una red para dar una batalla a la desinformación y
a la conspiración mediática en Venezuela