DESDE 1984 IDENTIFICARON 233 CUERPOS
El trabajo del Equipo Argentino de
Antropología Forense (EAAF)
El Equipo Argentino de Antropología
Forense (EAAF) es una organización científica,
no gubernamental y sin fines de lucro que aplica
las ciencias forenses -principalmente la
antropología y arqueología forenses- a la
investigación de violaciones a los derechos
humanos en el mundo. El EAAF se formó en 1984
con el fin de investigar los casos de personas
desaparecidas en Argentina durante la última
dictadura cívico-militar (1976-1983).
Actualmente, el equipo trabaja en Latinoamérica,
África, Asia y Europa en cinco áreas
programáticas: investigación, entrenamiento y
asistencia, desarrollo científico,
fortalecimiento del sector, documentación y
difusión.
El Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF)
conduce investigaciones forenses en Argentina e
internacionalmente respondiendo a pedidos de
organizaciones de derechos humanos locales e
internacionales, sistemas judiciales nacionales
e internacionales, tribunales y comisiones
especiales de investigación, como Comisiones de
la Verdad. Dichas investigaciones están
centradas en establecer la identidad, la causa y
el modo de muerte de las víctimas e identificar
patrones de violaciones a los derechos humanos
aplicando las ciencias forenses; restituir los
restos de las víctimas a sus familiares y
comunidades; y presentar los hallazgos y
evidencia a las instancias judiciales y ámbitos
de investigación correspondientes.
El EAAF contribuye de forma privilegiada a
varias iniciativas para la promoción de patrones
internacionales de investigación forense sobre
derechos humanos. Documentar y proporcionar
pruebas científicas incuestionables sobre casos
y patrones de abusos -sostienen los científicos
de la institución- es fundamental para el avance
de cualquier proceso que se ocupe de pasadas
violaciones e intente prevenirlas en el futuro.
El objetivo del programa de información y
divulgación del EAAF es incrementar y diseminar
información sobre la aplicación de las ciencias
forenses en casos de violaciones de los derechos
humanos entre las comunidades y familias
directamente afectadas y el público interesado
en general. Desde la formación del EAAF en 1984,
el uso de la antropología forense en el trabajo
en derechos humanos ha pasado de ser un campo
desconocido a convertirse en una herramienta muy
importante y, en algunos casos indispensable,
para la documentación de violaciones a los
derechos humanos.
El EAAF refleja su actividad en un Informe
Anual, una de las pocas publicaciones dedicadas
a las ciencias forenses y derechos humanos; un
video de 37 minutos realizado en el 2002, "Tras
los Pasos de Antígona: Antropología Forense e
Investigaciones de Derechos Humanos,"; el libro
"Tumbas Anónimas", que describe la formación y
el trabajo del EAAF en la Argentina desde 1984
hasta 1991; y una exhibición fotográfica
itinerante del trabajo del EAAF en cinco países
del mundo. El Equipo Argentino de Antropología
Forense también realiza seminarios y cursos cada
año para organizaciones de los derechos humanos,
asociaciones de familiares de víctimas, jueces,
abogados, comisiones investigadoras y
estudiantes de antropología sobre la aplicación
del área forense en las investigaciones sobre
violaciones a los derechos humanos.
LA INICIATIVA LATINOAMERICANA DE
IDENTIFICACIÓN DE PERSONAS (ILID)
Esta campaña -la primera lanzada por el Equipo
Argentino de Antropología Forense junto con el
Estado argentino- tiene como objetivo aumentar
significativamente la identificación de los
restos de personas desaparecidas por razones
políticas en América Latina. Con ese fin se creó
en la Argentina el Banco de Sangre de Familiares
por convenio suscrito entre el Equipo Argentino
de Antropología Forense (EAAF), la Secretaría de
Derechos Humanos y el Ministerio de Salud de la
Nación. Este proyecto permite la
descentralización de la toma de muestras de
sangre que ahora se puede realizar gratis en
todo el país.
La Iniciativa incluye tres proyectos de equipos
forenses latinoamericanos que trabajan en el
área de derechos humanos: el Equipo Argentino de
Antropología Forense, la Fundación de
Antropología Forense de Guatemala, el Equipo
Peruano de Antropología Forense.
Considerando la existencia de una problemática
común en la región, se pensó en fundar una
iniciativa latinoamericana que permita compartir
experiencias, no repetir errores y optimizar los
recursos humanos y financieros.
La creación del Banco de Sangre de Familiares es
una iniciativa del EAAF, que se realiza en
coordinación con la Secretaría de Derechos
Humanos de la Nación y el Ministerio de Salud.
ENTREVISTA A LUIS FONDEBRIDER, PRESIDENTE DEL
EAAF
¿Cómo se da la articulación entre el Estado y el
EAAF, teniendo en cuenta, además, las
respectivas articulaciones con los diferentes
estados provinciales y municipales? / ¿En qué
medida esa articulación posibilita y/ o dinamiza
búsquedas y/ o resultados?
La articulación entre el EAAF y el Estado,
históricamente, se dio casi exclusivamente con
el Poder Judicial, a partir de la tarea pericial
que cumple el EAAF.
A partir del año 2003, con la administración del
presidente Kirchner, y su política de Derechos
Humanos, esta relación comienza a cambiar en
forma beneficiosa, aunque manteniendo nuestra
independencia de acción.
Por una parte, el EAAF comenzó a recibir apoyo
financiero del Estado para la realización de las
tareas en la Argentina. Por otra parte, a partir
del año 2007, se firma un convenio con la
Secretaría de DDHH de la Nación y el Ministerio
de Salud, para implementar el proyecto
Iniciativa Latinoamericana para la
Identificación de Personas Desaparecidas (ILID).
La implementación de este convenio, posibilitó
que se identificaran más de 200 cuerpos de
personas desaparecidas, a partir de la
conformación de un banco de muestras de sangre
de familiares de las víctimas, que hoy en día
cuenta con 8.500 muestras.
Por otra parte, a nivel internacional, un área
donde el EAAF trabaja desde sus comienzos, se
está implementando con el FOAR en diversos
proyectos de cooperación técnica en América
Latina, Asia y África. En tal sentido, se cuenta
con un apoyo importante de la Cancillería y las
representaciones diplomáticas en el exterior.
En conclusión, la tarea que el EAAF realiza con
el Estado, en diferentes áreas, es un buen
ejemplo de cooperación entre una ONG y el
Estado, manteniendo independencia de criterios
entre ambos.
Los patrones de búsqueda y/ o investigación
¿experimentaron modificaciones a partir de la
decisiva intervención del Estado en materia de
derechos humanos desde 2003 a la fecha? Cuál es
el grado de colaboración entre la Secretaría de
Derechos Humanos de la Nación y el EAAF?
Los patrones de investigación del EAAF fueron
profundizándose a lo largo de los años, al
conocer más y mejor cómo funcionaba el Estado en
los años 70s, y cómo operaba el sistema
represivo. En tal sentido, el trabajo conjunto
con la Secretaría de DDHH ha sido fundamental,
en especial en todo lo que hace a la
implementación de la ILID, y al contar con un
canal de diálogo abierto y constante con el Dr.
Duhalde.
¿Cómo es el trabajo con los familiares desde
el momento que entregan sus muestras de sangre?
/ En el caso de los restos identificados, ¿cómo
se trabajó con los familiares su entrega?
La relación con los familiares ha sido, y es,
una parte central del trabajo del EAAF. Siempre
se trabajó con ellos en forma transparente, por
una parte transmitiéndoles la información que el
EAAF obtiene y analiza, pero al mismo tiempo
siendo muy cuidadosos con las expectativas que
se generan. No hay garantía de que se van a
encontrar e identificar los cuerpos, y tratamos
de mantenerlos informados de los avances de las
investigaciones, atendiendo sus dudas e
inquietudes.
¿En qué sitios está trabajando actualmente el
EAAF?
En la Argentina, el EAAF está trabajando
intensamente en las provincias de Córdoba,
Tucumán, Santa Fe, Mendoza, Jujuy y Buenos
Aires.
¿En qué casos se entregan los restos a los
familiares?
Una vez que el EAAF finaliza su informe forense
sobre la identificación de un cuerpo, dicho
informe es entregado al Tribunal que solicitó la
investigación. Si el Tribunal lo aprueba, emite
una resolución donde da por identificados los
restos y nos ordena la restitución de los mismos
a la familia.
A partir de los datos existentes (si es que
los hay), y de los datos que otorga cada
familiar, ¿es factible una reconstrucción
aproximada del posible itinerario de detención
del desaparecido, aun si su cuerpo no es
hallado?
En muchos casos, es posible reconstruir qué
sucedió con la persona desde el momento del
secuestro hasta el entierro del cuerpo en un
lugar determinado. Esta reconstrucción se
realiza a partir del análisis de fuentes
escritas y orales.
¿Cuál es el horizonte posible de hallazgos,
teniendo en cuenta los sitios en donde el EAAF
está trabajando y los que quedarían por
explorar?
En realidad, desde su creación en 1984, el EAAF
identificó a 510 personas. A partir del proyecto
ILID, la posibilidad de la comparación masiva
permitió un incremento notable de las
identificaciones.
Es difícil estimar cuántos cuerpos más se van a
encontrar e identificar. Hay cementerios donde
ya no quedan cuerpos; muchos han pasado a
osarios o fueron destruidos en las exhumaciones
mal hechas de 1984, pero el EAAF aún tiene unos
700 cuerpos que están esperando ser
identificados, y dependemos que más familiares
se acerquen a dar su muestra de sangre para
tratar de identificarlos.
¿En qué medida los lugares de hallazgo de los
cuerpos/ restos evidencian el accionar del
terrorismo de Estado?
El entierro de cuerpos de personas
desaparecidas, los documentos oficiales que lo
prueban, y el hallazgo de los mismos, es un
ejemplo de cómo operaba el Estado durante la
dictadura militar.
Las fosas comunes como mecanismo de
desaparición, ¿fue el método más utilizado por
la dictadura para desaparecer cuerpos y borrar
pruebas?
No, los dos métodos más utilizados para disponer
de los cuerpos han sido el entierro en fosas
individuales y el arrojar cuerpos al mar.
El EAAF trascendió las fronteras del país y
se constituyó en referente ineludible en su
materia, participando en emblemáticos hallazgos,
como la localización de los restos del Che en
Bolivia. Esta ampliación de fronteras y el
trabajo conjunto con otros equipos forenses del
mundo, ¿produjeron cambios metodológicos en los
patrones de búsqueda u otros cambios y/ o
aportes que merezcan mención?
El trabajar en otros contextos de violencia
política y violaciones a los derechos humanos,
posibilitó desarrollar estrategias de
investigación más amplias y abarcativas.
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