“Madres de la Plaza, el pueblo las abraza.”. Los pañuelos blancos
parecían brillar más que nunca ante un sol gris que buscaba asomarse en
Plaza de Mayo. Mañana se cumplirán 28 años desde que las Madres
decidieron allí romper el silencio y ayer, como todos los jueves, el cálido
abrazo caminó una nueva ronda. Luego, las dos agrupaciones que reúnen a
las Madres dieron su mensaje. Con la voz de Hebe de Bonafini, la Asociación
Madres de Plaza de Mayo reivindicó la lucha de los hijos desaparecidos.
Madres Línea Fundadora recordó a aquellas catorce mujeres que el 30 de
abril de 1977 decidieron unir su voz para pedir justicia. Desde entonces
la Plaza nunca dejó de escucharlas.
“Es un jueves más, uno de los tantos en que sentimos a nuestros hijos.
Ellos habitan esta plaza con sus sueños y esperanzas. Porque esta Plaza
no se hace sola. Esta Plaza tiene que ser de un recuerdo muy fuerte. Y
para que pueda seguir viviendo necesita de la fuerza de todos.” Un
sentido aplauso interrumpió el discurso que Bonafini improvisó frente a
Casa Rosada.
Inmediatamente, la titular de la Asociación Madres recuperó el aliento y
aprovechando la proximidad con el 1º de mayo extendió el mensaje a la
“lucha de todos los trabajadores”. Con esta intención las Madres,
además de rememorar su nuevo aniversario, rendirán mañana su propio
homenaje al Día del Trabajador con una charla en la sede de la
Universidad Popular que presiden. Bajo una consigna que busca reivindicar
el “trabajo, la lucha y la unidad latinoamericana”, cincuenta mujeres,
maestras, obreras, artistas, piqueteras, compartirán las experiencias que
vienen cosechando en sus distintos espacios. Para concluir, Hebe agradeció
una carta del presidente Kirchner en la que envió su saludo a las dos
agrupaciones.
Unos minutos más tarde, los recuerdos se hicieron presentes en un pequeño
escenario montado frente al Cabildo. “Es difícil pensar que 28 años
después venimos a dar la vuelta a la Plaza. Pero aquí estamos, como el
primer día. Para que el recuerdo siga siempre, para todas las madres que
hoy quisieran estar.” Marta Ocampo de Vásquez, de Línea Fundadora,
inauguró la gran cadena de mensajes que compartieron las Madres y
numerosos organismos de derechos humanos. Cada uno expresó su
agradecimiento, su comprensión, su aliento.
Como todos los años, se recordó el nombre de las catorce Madres que,
encabezadas por Azucena Villaflor, rompieron con la soledad de la Plaza un
sábado, que una semana más tarde para ser más escuchadas decidieron que
fuera un viernes. Con sus 83 años, Pepita Noia, una de las fundadoras, no
dejó pasar la ocasión para decir unas palabras y dar su agradecimiento a
todos los que decidieron acompañar las rondas. “A pesar del tiempo no
nos abandonan”, expresó emocionada. También se recordó el nombre de
las Madres desaparecidas, Azucena, Mari Ponce de Bianco, Esther Balestrini
de Careaga y de aquellas compañeras que se fueron luego. Esta vez un
dolor reciente se hizo presente con el fallecimiento durante el mes pasado
de Olga Aredez, reconocida por quebrar con su paso solitario el silencio
de Ledesma, aquel pueblo de Jujuy que en julio de 1977 perdió durante la
Noche del Apagón a 400 de sus habitantes, 40 de ellos aún desaparecidos.
Al homenaje se sumaron otras madres que también sufrieron la pérdida de
sus hijos. “Lamentablemente vemos a mamás con fotos de hijos que
murieron durante la democracia. Perdón por no estar hace 28 años.
Prometo acompañarlas por siempre”, expresó con la voz entrecortada y
abrazada a los pañuelos blancos la madre de Mariano Wittis, el joven músico
asesinado por la Policía Bonaerense. Como ella, algunos de los padres de
las víctimas de Cromañón también decidieron acercarse y apoyar una
lucha que promete sobrevivir el paso del tiempo. Así lo aseguró Carlos,
de H.I.J.O.S: “Hoy estamos acá para festejar las cosas que fueron
consiguiendo. Las Madres son un ejemplo de dignidad. Son un ejemplo de
madres. Nosotros vamos a seguir el camino que ustedes empezaron”.
Al avanzar la tarde, cuando el sol ya caía sobre el histórico edificio
de alas cortadas, las Madres de Línea Fundadora empezaron a marchar a su
casa de la calle Piedras para escuchar una charla que, bajo el nombre de
“Las Madres en el contexto histórico actual”, dio el periodista Oscar
Raúl Cardoso. La Plaza, sin embargo, no quedó sola. Algunos de los
globos azules y blancos que lanzaron para terminar el acto volaban entre
las palomas y el histórico “¡Presente!” para recordar a los treinta
mil desaparecidos seguía haciendo eco ante la dama de piedra que, desde
la cúspide de la Pirámide, continúa escuchándolo en silencio.
Informe: Carolina Keve.