BOLIVIA En Bolivia se libró la primera gran batalla victoriosa contra el ALCA Carlos Aznárez (director de Resumen Latinoamericano) *************************************** La unidad y coraje del pueblo significó la caída del Gringo y una advertencia para sus titiriteros. Jallalla Bolivia, gritaba la anciana campesina con su rostro color de tierra y sufrimiento, mientras la coca, su única compañera ³en las buenas y en las malas², la ayudaba a olvidar los kilómetros recorridos desde su natal Cochabamba hasta esa ruidosa Plaza San Francisco, de La Paz. Jallalla Bolivia, repetía el minero de Huanuni, sobreviviente del ametrallamiento masivo de Patacamaya, cuando con miles de compañeros marchaba pidiendo la renuncia del Gringo. Los jallalla y los vivas se entremezclan con los muera y los abajo. Hay olor a gas, a plomo y a pólvora en cada uno de los rincones de esta Bolivia insurrecta. Estallan los ³cachorros² de dinamita y el cielo paceño se ilumina aún más. Su azul de todos los días se convierte en arco iris de wilpalas y gritos de guerra ³por todo los que nos hicieron durante más de 500 años² . Pero también de prevención por todo lo que intentarán seguir haciéndoles en el futuro. Son decenas de miles que se dan fuerza unos con otros, los de Oruro sonríen y saludan a los del Beni, los combatientes vecinos de El Alto, que durante noches enteras aguantaron la vigilia para que el ejército asesino no pudiera repetir la violencia que repartía en las mañanas de bronca y fuego, de piedra y bala. Son inmensamente fuertes estos sitiadores de La Paz que finalmente lograron vencer al imperio mejor armado del mundo y a su presidente títere. Porque si hay algo que queda bien en claro en esta ³batalla de Bolivia² es que aquí se le clavó una poderosa punta de madera en el pecho del ALCA. No sólo cayó el Goni, sino que el trompazo en plena jeta del imperialismo le sirvió de mensaje recordatorio al propio Bush. ³Con nuestro pueblo no se juega, gringo prepotente², decía el cartel colgado por un estudiante de Oruro, y precisamente de eso trataba el dibujo que lo acompañaba, donde una mujer campesina le encajaba una soberana patada en el culo al Tío Sam. Disciplinado pueblo este de Bolivia, que por encima de las diferencias lógicas de sus carismáticos líderes, supieron levantarse durante un mes entero y ganar las calles. Cumplieron, casi religiosamente, un cronograma de operaciones de acción directa, teniendo en cuenta que el objetivo final era el que beneficiaría a todos los sectores sin excepción, al pueblo en su conjunto y también a Latinoamérica. Primero fueron los combativos campesinos de la Central Unica del Mallku Felipe Quispe. Ellos aguantaron las balas en Warista, pusieron los primeros muertos y clamaron al cielo contra los milicos criminales de color tierra como sus hermanos pero con el cerebro conectado al amo colonizador que tanto mal le ha hecho a nuestros pueblos originarios- y a partir de allí, ese rugido se oyó en todo el territorio ancestral. Luego se sumó la histórica Central Obrera Boliviana, la COB resurgida de las cenizas de años de idas y vueltas, donde muchas veces la burocracia llegó a tumbar las ansias de lucha de sus afiliados. Y entonces, Jaime Solares proclamó la huelga general que hombres y mujeres empezaron a cumplir con gradualidad y firmeza. Desde Cochabamba y el Trópico los campesinos de Evo Morales empezaron a apretar aún más la contienda y allí también se vio la fuerza organizada del Movimiento al Socialismo. El MAS que lidera Evo, el gran partido de izquierda que, con implantación territorial, desarrolló levantamientos y marchas, inclusive en el feudo de la derecha colonial y elitista de Santa Cruz. Qué duda cabe que fue un mes de ³Patria o Muerte². Treinta días de protestas y duros enfrentamientos contra un mandatario tan psicópata como obediente a lo que le marcaban desde Washington y Madrid, donde la Repsol insistía en que, a pesar de los 140 muertos que regaban las carreteras bolivianas, el gas debía ser exportado. Vale abrir aquí un paréntesis: es necesario para que la memoria no nos traicione en el futuro, recordar siempre el nombre de los caídos, pero también el del gringo y los gringos que lo protegieron y el de esta empresa española ambiciosa de ganancias petrolíferas a costa del hambre de los países que le facilitan la entrada. Por salud mental, al menos, es importante no olvidar a los sicarios empresariales que alimentan los genocidios, ya sea en Bolivia como en Iraq. Son hijos dilectos de los conquistadores que hace más de 500 años masacraron a 90 millones de hombres, mujeres y niños de la tierra originaria. Ahora, el pueblo festeja su victoria pero desconfía. No es para menos, muchas veces lo ganado en las calles se negoció y bastardeó en los despachos de los políticos. Sin embargo, la fuerza conquistada en estas gloriosas jornadas ayudan a pensar que aquí se trata de un viaje sin retorno. Se salió a pelear por el gas y algo más. Se salió a pelear por la tierra y algo más. Se pedía la cabeza de Sánchez de Lozada y algo más. En realidad, se quería y se quiere cambiar este sistema que tantas masacres ha provocado, unas veces como dictadura militar y otras, como democracia vigilada. En eso están claros Quispe, Evo y los dirigentes de la COB, pero de ello también están convencidos los mineros, campesinos, estudiantes, obreros, y ese pueblo que conmovió al mundo. En Bolivia no hay no debe haber- vuelta atrás. Lo sabe el nuevo presidente Mesa y también la embajada norteamericana. La sangre derramada no admite más dilaciones. La Asamblea Constituyente y la derogación de todas las leyes entreguistas no admiten mucha espera, porque de lo contrario el pueblo volverá a ganar la calle. Además, esto certifica otro dato estratégico: que el contingente de la Revolución continental cuenta con otro aliado para batir al imperio y eso merece que dentro de tanto dolor y pesadumbre, se festeje el pasado 17 de octubre como otra gran victoria de los pueblos. Jallalla Bolivia, entonces, que es como decir: Jallalla hermanos de Latinoamérica. Jallalla Tupac Katari, Bartolina Sisa, Manuel Acencio Padilla, Pedro Murillo, Wilka Zárate, Inti y Coco Peredo y el mismísimo Che, que desde sus trincheras de lucha también abrazan a este maravilloso pueblo de Bolivia que nos ha llenado a todos de orgullo y ganas de seguir su camino. ++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++ BOLIVIA Los campesinos ofrecen al nuevo presidente una tregua de noventa días ******************************************* Carlos Mesa pidió tiempo para «poder trabajar» y dijo que «Bolivia no es un país justo». Bolivia vuelve a una relativa calma tras la «fuga» a EEUU del ex presidente Gonzalo Sánchez de Lozada tras un mes de una fuerte represión que dejó al menos 80 muertos. Ayer los sindicatos y organizaciones indígenas acordaron dar una tregua a la nueva Administración de Carlos Mesa, durante una multitudinaria concentración en La Paz para celebrar la renuncia del «Goni», que desde Miami dijo que EEUU pudo hacer «un poco más» para prevenir la crisis. Organizaciones estudiantiles, campesinas y sindicales se concentraron ayer en la Plaza de los Héroes, en La Paz, para celebrar «el triunfo» de las protestas de las últimas semanas que provocaron la renuncia del presidente Sánchez de Lozada. El nuevo presidente, Carlos Mesa, quien había asistido a una misa en honor a los caídos en la «guerra del gas» en la Iglesia de San Francisco, se hizo presente en el mitin, al que asistieron miles de personas que descendieron de la ciudad de El Alto, para concluir en un emotivo acto las movilizaciones en defensa del gas y otras reivindicaciones sociales. Durante esta concentración, los principales líderes sindicales e indígenas, Felipe Quispe, de la Confederación Sindical Unica de Trabajadores Campesinos (SUTCB), Jaime Solares, de la Central Obrera Boliviana (COB), así como varios representantes de federaciones campesinas departamentales y provinciales, anunciaron que otorgarán una tregua al nuevo Gobierno de Mesa para que diseñe los lineamientos de su Administración. Por su parte, el sindicato agrario de La Paz, la SUTCB, que controla de modo parcial las carreteras del altiplano boliviano, precisó, además, que levantará los bloqueos que mantenía sobre las mismas. Mesa escuchó la intervención de los dirigentes, quienes le pidieron el inicio de un juicio de responsabilidades contra el Sánchez de Lozada, al que calificaron de «carnicero», así como la indemnización a las personas que perdieron a sus familiares en la «guerra del gas». Tras escuchar sus demandas, el presidente Mesa reconoció «el cansancio» de los sectores sociales, que «no tienen oportunidad de gobernar», y enfatizó que «Bolivia no es un país justo y que no tiene a sus ciudadanos iguales ante la ley». «Quiero pedirles con toda humildad que me den tiempo, que me abran un espacio para poder trabajar», añadió. Dos temas concentran la atención del nuevo Gobierno de Mesa: el proyecto de exportación de gas a EEUU y México y la celebración de una Asamblea Constituyente, principales demandas de los sectores campesinos e indígenas del país andino. Con respecto a la exportación de este recurso natural, el Gobierno anunció ayer que no renunciará al proyecto, pero que cualquier decisión con respecto a este tema dependerá del resultado del referéndum vinculante, que aún no tiene fecha de celebración. El nuevo ministro de Exteriores, Juan Ignacio Siles, manifestó en un mensaje al pueblo boliviano, tras jurar a su cargo, que la consulta que propuso Mesa deberá determinar una política permanente de Estado sobre ese tema y deberá servir para mejorar «la calidad de vida de los sectores más excluidos de la población boliviana». «Como canciller no puedo dejar de señalar que cualquier futura negociación sobre el gas no debería ser ajena a nuestra justa y legítima reivindicación de un puerto libre y soberano en el océano Pacífico», añadió. Pese a que Mesa definió ayer a los miembros de su Gabinete, compuesto por personalidades independientes de los partidos políticos, aún no ha decidido quién será el ministro de Minas e Hidrocarburos. Mesa designó a 14 nuevos ministros, dos de ellos sin cartera, y también a una delegada presidencia,l que se encargará de la lucha anticorrupción. Tras tomar juramento, Mesa pidió a sus nuevos ministros «una entrega total, una responsabilidad y una acción directa, además de absoluta transparencia en el trabajo». fuente: GARA +++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++++
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