El próximo sábado 10 celebraremos en El Dragón de La Elipa una fiesta en apoyo y por la supervivencia de la Asociación Cultural La Compañía del Krisol. http://www.krisol.org
La financiación de El Krisoles autónoma, gestionada con las cuotas de socios y socias, con las matrículas de los talleres y con la venta del material que se produce y distribuye en el local. Para que podamos seguir autogestionándonos, organizamos esta fiesta en la que solicitamos tu colaboración con un bono-apoyo de 3€
Y es que va a ser una gran noche, porque contamos con tres bandas auténticas krisoleras:
Abrirá la Escuela de Rock a las 22h, para arrancar con los clásicos básicos. San Blas Posse, a las23h, presenta nueva formación después del parón de unos meses. Y Faber Pugna llegarán a las 24h para poner la guinda con su punk-core libertario.
Entre grupos, habrá proyección de imágenes y contaremos con una gran selección de música para no parar de bailar tanto antes como después de los conciertos.
El ESOA El Dragón está junto a la puerta del cementerio de la Almudena, en la Avda de Daroca nº 90. El Metro más cercano es La Elipa [L2]
¿Qué intenciones tenemos?
La Asociación Cultural la Compañía del Krisoltiene desde sus inicios como fines principales el fomento y desarrollo de la cultura en cualquiera de sus expresiones y fomento de la participación e intervención social.
La cultura es un valor natural que no tiene precio. La cultura es nuestra, de la gente, la producimos nosotras desarrollándonos como personas, se hace más grande con la participación y se enriquece con el encuentro.
Una cultura con la que se da respuesta a problemáticas impuestas, como la desigualdad de género, la exclusión social y el individualismo consumista, una cultura que llega siempre más allá del momento en que se produce el hecho cultural demostrándonos que sigue siendo necesario, que cada día es más necesario que se abran brechas, que se rompan ciclos, que la verdadera cultura, la que emana de las gentes -de todas las gentes- trasciende, importa y suma fuerzas.
Hoy, como siempre y más que nunca, no podemos dejar de participar de su explosión, de su manifestación libre y solidaria que nos une y nos empuja en busca del mundo en el que queremos vivir, ese mundo que sabemos posible porque se muestra en nuestras acciones.
