Las promesas vacías del Ministerio de Medio Ambiente no frenarán la desertificación
17 de junio de 2002. 8º Día Mundial de Lucha contra la Desertificación | |||
(Ecologistas
en Acción, 17 de Junio de 2.002) El 17 de junio de
2002 se celebra el 8º Día Mundial de Lucha contra la
Desertificación, con el lema "Degradación de la
tierra". La desertificación afecta a más de 110
países y cada año se pierden 6millones de hectáreas de
tierra productiva. Según Ecologistas en Acción en
nuestro país el 40% del suelo esta amenazado por los
procesos de desertificación, pero a pesar de ello, el
Ministerio de Medio Ambiente ha sido incapaz de
desarrollar el tan prometido Programa de Acción de Lucha
contra la Desertificación, principal obligación
contraída por el Gobierno español tras firmar, en 1996,
el Convenio de Lucha contra la Desertificación. Aunque, tanto, el
Presidente del Gobierno como los dos Ministros de Medio
Ambiente de los sucesivos gobiernos del PP han recalcado
que la protección de los suelos es una de las
prioridades del Estado, la realidad es que este aparente
interés se desvanece entre promesas y retóricas
vacías. Seis años prometiendo un Plan que no llega a
término y unas actuaciones que no se ejecutan. En
opinión de Ecologistas en Acción, la ausencia de un
Plan de Acción Nacional contra la Desertificación
responde a una falta de voluntad política por frenar las
principales causas que desencadenan los procesos de
pérdida de suelo. El Estado español, se
encuentra a la cabeza entre los países desarrollados
afectados por la desertificación. Uno de los principales
factores desencadenantes de esta situación es la
erosión o pérdida de suelo fértil. El 42% del
territorio español, 21 millones de hectáreas, está
sometido a procesos de erosión que superan los límites
tolerables, (pérdidas de suelo de 12 toneladas por
hectárea y año) y el 12%, 6 millones de hectáreas,
está sometido a erosión muy severa, con pérdidas de
suelo superiores a 50 toneladas por hectárea y año.
Para el conjunto del Estado se calcula una pérdida total
anual de suelo de 1.156 millones de toneladas. Si se
tiene en cuenta que la tasa de formación de suelo varía
entre 2 y 12 toneladas por hectárea y año, se reparará
en la magnitud del problema. Las zonas más afectadas se
encuentran en Andalucía, Castilla-La Mancha, Levante y
Murcia. Entre los principales
factores que desencadenan esta situación se encuentran
la explotación insostenible de los recursos hídricos,
que es causa de graves daños ambientales, incluidos la
contaminación química, la salinización y el
agotamiento de los acuíferos. Pérdidas de la cubierta
vegetal a causa de repetidos incendios forestales.
Concentración de la actividad económica en las zonas
costeras como resultado del crecimiento urbano, las
actividades industriales, el turismo de masas y la
agricultura de regadío. Según Ecologistas en
Acción, las actuaciones en materia de protección de
suelos deben tener como principal objetivo el desarrollo
de una gestión sostenible de las tierras agrícolas, de
los recursos hídricos y de la ordenación del
territorio. Sin embargo, las políticas que lleva a cabo
el Gobierno en materia agrícola, urbanística e
hidrológica se alejan cada vez más de un modelo de
desarrollo sostenible que pudiera prevenir la
degradación de nuestras tierras. Claro exponente de ello
es el Plan Hidrológico Nacional que consolida la
agricultura intensiva y fomenta el desaforado crecimiento
urbanístico en la costa mediterránea. |