La organización Ecologistas en Acción ha dirigido una queja a la Dirección General de Medio Ambiente de la Comisión Europea porque el cementerio nuclear de Trillo (Guadalajara) se ha iniciado sin la preceptiva declaración de Impacto Ambiental. En la queja piden la paralización de las obras hasta tanto no se produzca dicha declaración.

Para el grupo ecologista, el apartado 3.b del Anexo de la Directiva 97/11/CE, relativa a la evaluación de Impacto Ambiental, establece la obligación de una declaración de Impacto para las instalaciones destinadas al almacenamiento de combustibles nucleares irradiados o de residuos radiactivos proyectados para un periodo de tiempo superior a 10 años. La licencia solicitada para dicho almacenamiento es por 60 años.

En una nota de prensa, Ecologistas en Acción recuerda que el Consejo de Ministros acordó el 31 de julio de 1999 la ejecución de estas obras «obligando» al Ayuntamiento de Trillo a modificar las normas subsidiarias de la localidad, que prohibían la construcción de cementerios nucleares. Según dicen, el Consejo de Ministros podía haber excluido este proyecto de la evaluación de Impacto Ambiental de acuerdo con la legislación española mediante resolución motivada, pero este trámite nunca se ha hecho.

El 24 de abril de este año, Ecologistas en Acción se dirigió al Ministerio de Medio Ambiente para que parara las obras de instalación aduciendo la ausencia de esta declaración de Impacto, sin obtener ninguna respuesta hasta la fecha. Por ello, esta organización se dirige ahora a la Comisión Europea pidiendo la paralización de las obras.

Según los ecologistas, el cementerio nuclear de Trillo es el primer almacén «en seco» que se va a construir en España de residuos radiactivos de alta actividad y en él, los residuos se colocarán dentro de contenedores metálicos que también son aptos para el transporte.