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Ecologistas recurre la licencia de Panibérica de Levadura por su elevado impacto ambiental

La nueva fábrica contaminará el río como 200.000 personas, aguas arriba de la ciudad. El Ayuntamiento vuelve a saltarse la evaluación de impacto ambiental de una industria.

Jueves 21 de febrero de 2008

Ecologistas en Acción ha presentado ante el Alcalde de Valladolid un recurso contra el Acuerdo de la Comisión de Gobierno del Ayuntamiento de 2 de febrero de 2008 por el que se concede a «Panibérica de Levadura, S.A.» licencias ambiental y de obras para la construcción de su nueva fábrica de levadura en los antiguos terrenos de NICAS, en la carretera de Cabezón, sobre una superficie de 45.000 metros cuadrados.

Panibérica de Levadura posee una fábrica en el Callejón de la Alcoholera que funciona desde hace 50 años. Fruto de un convenio firmado en noviembre de 2006 con el Ayuntamiento de Valladolid, la empresa ha decidido trasladar sus instalaciones a los terrenos de la antigua NICAS, en la zona norte de la ciudad, a cambio de la recalificación de sus parcelas en la zona sur como suelo residencial.

La operación urbanística se fundamenta en el Programa de Reubicación de Empresas en el marco del Plan Municipal de Vivienda y Suelo 2004-2007, al que de momento se han acogido Panibérica de Levadura y Metales Extruidos. La justificación de este Programa es la “la necesidad de que la Administración Municipal facilite el traslado de empresas a otras zonas dentro de nuestro término municipal desde su ubicación actual, en espacios industriales y productivos insertados en la trama urbana y que presentan una difícil articulación con el entorno, generalmente de uso residencial”.

No obstante, en el caso de Panibérica de Levadura este traslado, supuestamente motivado por causas ambientales, puede conllevar un aumento sustancial de la contaminación originada por la empresa, toda vez que sus nuevas instalaciones verterán al río Pisuerga aguas arriba de la ciudad, hacia la que los vientos dominantes en el valle del Pisuerga llevarán los malos olores originados por la fábrica y su depuradora. Baste señalar a este respecto que el potencial contaminante de la fábrica sobre el río equivale al de entre 150.000 y 200.000 personas, según los datos aportados por la empresa.

Ello no es óbice para que el Ayuntamiento de Valladolid, con el informe favorable de la Comisión de Prevención Ambiental de la Junta, haya autorizado la nueva fábrica a través de una licencia ambiental., el mismo tipo de permiso requerido por ejemplo para una peluquería o un bar musical, mientras por el tamaño y el potencial contaminante de la empresa el procedimiento adecuado habría sido el de autorización ambiental, previo sometimiento a la preceptiva evaluación de impacto ambiental, al menos de la depuradora de aguas residuales de la fábrica. Estas omisiones recuerdan el caso de la fundición Lingotes Especiales, sobre la que pesa una orden judicial de cierre por una mala actuación administrativa.

Estos argumentos, expuestos por el representante de las organizaciones ecologistas y vecinales en la reunión de la Comisión de Prevención Ambiental de la Junta del pasado 23 de enero de 2008, dieron lugar a una apretada votación en la que se informó favorablemente la licencia ambiental por 7 votos contra 5, incluyendo entre los votos favorables a consultar la aplicabilidad de la evaluación de impacto ambiental de la depuradora los de la Confederación Hidrográfica del Duero y el propio Jefe de Servicio Territorial de Medio Ambiente.

Ante situación, Ecologistas en Acción demanda que se corrijan los errores en la tramitación del permiso de Panibérica de Levadura, evaluando el impacto ambiental de la nueva fábrica, suspendiendo entre tanto la recalificación de los terrenos de la empresa en el Callejón de la Alcoholera, para evitar como en el caso de Enertec el sacrificio de una actividad industrial consolidado por intereses inmobiliarios especulativos.

Ecologistas en Acción de Valladolid