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Comunicado. 05-VI-03

Ecologistas en Acción concede los Premios Atila 2003 en el Día Mundial del Medio Ambiente

Jueves 5 de junio de 2003

Premio Atila a la peor conducta ambiental: «ex aequo» a Francisco Javier León de la Riva, alcalde de Valladolid, y a Federico Sumillera, concejal de urbanismo, por promover un Plan General de Ordenación Urbana que reclasifica como urbanizables las vegas de los ríos Esgueva, Pisuerga y Duero, de gran valor agrícola, paisajístico y cultural, proyectando un modelo de ciudad extensa que hará de Valladolid una lugar más insostenible, económica, social y medioambientalmente hablando. Premio Caballo de Atila: Asociación de Promotores Inmobiliarios de Valladolid por ser, junto a las grandes promotoras estatales, los autores en la sombra de esta contrarreforma urbanística.

Tal día como hoy es tan significativo para nosotros como los que anteceden y suceden. El estudio y defensa del medio ambiente son objetivos que se trabajan cada día. Cada 5 de Junio Ecologistas en Acción, convoca los Premios Atila, con el objetivo de «distinguir y denunciar a aquellas personas, entidades o proyectos que más hayan destacado por su contribución a la destrucción del medio ambiente». Los premios, que se concedieron por primera vez en 1992, tienen dos categorías denominadas «Atila» y «Caballo de Atila».

En el caso de Valladolid, tras la deliberación el Jurado de Ecologistas en Acción acordó:

1. Conceder el Premio Atila a la peor conducta ambiental «ex aequo» a Francisco Javier León de la Riva, alcalde de Valladolid, y a Federico Sumillera, concejal de urbanismo, por promover un Plan General de Ordenación Urbana (actualmente en proceso de aprobación) que reclasifica como urbanizables las vegas de los ríos Esgueva, Pisuerga y Duero, de gran valor agrícola, paisajístico y cultural, proyectando un modelo de ciudad extensa que hará de Valladolid una lugar más insostenible, económica, social y medioambientalmente hablando.

2. Conceder el Premio Caballo de Atila a la Asociación de Promotores Inmobiliarios de Valladolid por ser, junto a las grandes promotoras estatales, los autores en la sombra de esta contrarreforma urbanística, animados por sus expectativas de beneficios económicos rápidos, y por protagonizar el retorno de la especulación más salvaje desde los años 70, que sufrimos en nuestra calidad de vida todos los habitantes de Valladolid.

En la concesión de estos premios se ha tenido especialmente en consideración el aumento del uso del automóvil privado que provocará el nuevo Plan General de Ordenación Urbana de Valladolid, al triplicarse el tamaño de la ciudad y disminuir la densidad. Los propios premiados ya han comprometido durante la pasada campaña electoral la construcción de miles de aparcamientos rotatorios en el centro para hacer frente a la avalancha de coches que se avecina con las nuevas urbanizaciones en la periferia urbana. La consecuencia más inmediata de esta ciudad extensa será el incremento del consumo energético, y en particular del consumo de petróleo, pieza fundamental de nuestro modelo energético.

Para nuestra sociedad parece ser que transporte quiere decir coche, el actual uso abusivo del transporte privado demanda una cantidad de combustible cada vez mayor, al ser un recurso limitado comienza la carrera en su obtención. En ella hay víctimas, y no sólo en la guerra por obtenerlo.

La contaminación producto de la combustión de combustibles fósiles, está arruinando la calidad del aire que respiramos, lo cual acarrea problemas de salud (bronquitis crónicas, alergias, problemas respiratorios…) que pueden llegar a ser mortales.

La violencia del tráfico cada día se cobra sus víctimas. Una de cada tres personas en España, a lo largo de su vida, tendrá un accidente de tráfico. Los que resultan mortales dejan un rastro desgarrador en las familias y personas cercanas. Los que no, pueden ir de un susto a una silla de ruedas.

El transporte de dicho recurso tan codiciado conlleva un riesgo, del cual parece ser que nos acordamos sólo cuando se contaminan más de 400 playas y vemos a un mariscador llorar frente a la costa cubierta de chapapote. Las victimas en este caso fueron la fauna y flora marina, y quienes viven de ellas.

Por tanto hoy día 5 de Junio amanecemos con la idea de que «El petróleo mata» (pancarta colocada esta mañana en el puente de la Ronda Interior Sur).

Desde Ecologistas en Acción-Valladolid proponemos desprendernos de la dependencia de dicho recurso, y apostar definitivamente por un modelo de ciudad concentrada que permita prescindir del uso del automóvil y el consumo de petróleo que éste lleva aparejado.