La red actual de carriles bici está muy deteriorada y sin mantenimiento: carriles que desaparecen de repente sin previo aviso, la separación de los coches inexistente, cruces sin señalizar… Montar en bici en El Puerto se convierte, a veces, en una aventura de riesgo.
NOTA: el milagroso palé lleva así más de un mes para evitar una desgracia
¡Peligro, socavón!