El Puerto de Santa María

Se protege a los que fumigan con glifosato pero no a los fumigados

Personal de contratas municipales sigue fumigando con glifosato calles y zonas verdes de nuestra ciudad, con grave riesgo sanitario para los ciudadanos que transitan por esas zonas envenenadas. El ayuntamiento sigue haciendo oídos sordos a las advertencias de Ecologistas en Acción y de vecinos indignados con esta práctica, y sigue sin valorar las posibles consecuencias que puedan causarse a niños, mayores, embarazadas, enfermos…y población en general.

Esta semana han fumigado una ampia zona, de una longitud aproximada de 1.000 m. lineales, que incluye toda la Av. de Sanlúcar, Parque de la Angelita Alta, Entorno del Cementerio, Plaza de la Esperanza, Plaza de La Salle, Plaza del Molino, Parque del vino Fino y Parque de la Victoria, junto a equipamentos públicos como un Polideportivo, el Colegio La Salle, el IES Pedro Muñoz Seca e, incluso, una Residencia de Mayores.

La Aplicación de Productos Fitosanitarios está sometida a una compleja normativa y reviste notables peligros para el aplicador, para el consumidor, para el medio ambiente y para las personas y, por ello en lo concerniente a su manejo y aplicación viene expresamente recogido en la normativa.

Se protege a los que fumigan con glifosato pero no a los fumigados

Pero la empresa concesionaria, con la expresa autorización del ayuntamiento, se limita a colocar carteles en los que se avisa: ATENCIÓN. Tratamiento fitosanitario. Prohibido el paso, junto a triangulo con una calavera donde se indica “Peligro producto fitosanitario”. Los trabajadores que fumigan llevan obligatoriamente monos, guantes  y mascarillas para prevenir el contacto con un producto tan peligroso. Pero lo increíble es que nada más terminar la fumigación de la vía pública, se recogen los carteles, retiran los conos que marcan las zonas fumigadas, y se van sin indicación de tiempos de seguridad para que el efecto veneno merme. Poco después se puede ver a todo tipo de personas paseando por las aceras y zonas ajardinadas fumigadas, que se llevarán el glifosato a su casa en los zapatos, ruedas de bicicletas o carritos de niños, en los patas de los perros, en los juguetes de niños que se caen al suelo, o en las manos de aquellos que transitan en silla de ruedas.

Nada de esto parece preocupar al sr. Alcalde ni al concejal de Medio Ambiente. Siguen incumpliendo la normativa de Aplicación de Productos Fitosanitarios Reglamento (CE) Nº 1272/2008 del Parlamento Europeo y del Consejo y, y, RD 1311-2012 Uso fitosanitarios BOE 15-12-12, con la total complicidad del indocumentado Jefe de servicio del Área de Medio Ambiente.

Y no será por falta de información. Ecologistas en Acción ha planteado en numerosas ocasiones en el Consejo Municipal de Medio Ambiente las alternativas que existen para evitar la proliferación de las hierbas en nuestras calles sin necesidad de utilizar   herbicidas. También se lo hemos planteado directamente a todos los concejales y concejalas de Medio Ambiente. Pero parece que, por intereses que se nos escapan, el ayuntamiento está enganchado al glifosato.

El uso de glifosato es más inexplicable si se tiene en cuenta que existen alternativas para  la gestión de plantas espontáneas en espacios urbanos sin el uso de herbicidas, puede no ser tan fácil como envenenar las calles y plazas, pero esta “comodidad” está suponiendo un alto coste en términos de salud para la ciudadanía e impacto ambiental. Ecologistas en Acción dispone de una guía de medidas alternativas al uso del glifosato que incluye ejemplos de productos herbicidas más inocuos y aconseja la eliminación mecánica de las plantas invasoras en espacios reducidos, que se puede consultar en  https://www.ecologistasenaccion.org/10890/

Por todo ello exigimos de nuevo al Ayuntamiento que se adopten medidas para dejar de utilizar glifosato en los espacios públicos de nuestra ciudad. Caso contrario, nos plantearemos iniciar acciones legales contra los responsables de estas fumigaciones por atentado contra la salud pública.
[Sassy_Social_Share style=”background-color:#fff;”]

Se protege a los que fumigan con glifosato pero no a los fumigados
Scroll hacia arriba