Casi mil manifestantes en Fuentelapeña en contra de la incineradora de Guarrate. Los alcaldes de las dos localidades junto con el Consejero de Agricultura, José Valín, fueron los más abucheados durante la protesta. Nuria Alvarez
Vecinos de La Guareña se manifestaron ayer en Fuentelapeña en contra del proyecto de la planta incineradora que se prevé construir en Guarrate. La manifestación, a la que asistieron entre 700 y 1000 personas, comenzó en la Plaza Mayor para continuar la protesta por todo el pueblo y terminar de nuevo en dicha plaza, donde se le pedía al alcalde de la localidad que diera la cara, algo a lo que el concejal de UC Miguel Pigazos decía, dirigiendose a los vecinos, «esta manifestación es pacífica y silenciosa, hemos venido para que tomen conciencia y tengamos tranquilidad».
Pigazos, uno de los que encabezaba la protesta, terminó diciendo que «la unión del pueblo hace más que la boca de una persona», refiriéndose al alcalde de Fuentelapeña. También tuvo palabras para el representante municipal de Guarrate, y le anunció «esperamos que recapacites, porque es una pena que tengamos que hacer esto, pero es así».
Entre los asistentes a la manifestación se encontraba Claudio Pérez, vicepresidente de la Cámara Agraria y vecino de Fuentelapeña, quien afirmó que «nuestros productos no los van a querer nadie y vivimos de la agricultura y la ganadería, no podemos permitir que nos pongan algo de eso para que nos estropee todo, sólo nos queda manifestarnos. Yo dirigiría la protesta al consejero José Valín y alcalde de Guarrate».
Teresa Martín, de Vadillo, cree que: «en Guarrate hay intereses creados porque la mitad del pueblo es familia del alcalde y a parte de los políticos también le presiona la familia, además parte de la zona que se cederá a la planta incineradora es particular y no del ayuntamiento coincidiendo ser de ellos».
Por otro lado, señoras de la localidad dirigían sus protestas al Consejero de Agricultura, afirmando que «si tan buena es la planta que la ponga en su pueblo, que aquí seguro que no trae nada bueno, que nos deje vivir tranquilos».
En el trascurso de toda la protesta se podían oir gritos que decían “El alcalde de Guarrate ha querido ser torero y nos quiere torear a la gente de los pueblos”, u otras como “Al alcalde de este pueblo le tenemos que decir que no queremos progreso si nos vamos a morir”. La manifestación terminó al son de un multitudinario griterío que afirmaba: «Queremos salud, no queremos dinero».
Miguel Pigazos, concejal del Ayuntamiento de Fuentelapeña se declara totalmente en contra del alcalde, y declara que «ahora mismo el 98% de Fuentelapeña está en contra del proyecto de la planta, y esto es mucho más importante que la opinión de una persona como es el alcalde. El concejal de UC quiere dejar claro que «esto no es un tema político, vamos a retirarla de por medio, yo me considero un ciudadano que no está a favor de esto, y punto. A mi lo que me preocupa principalmente es la salud pública por encima de cualquier puesto de trabajo».
«El pueblo ha pedido que se hiciera una manifestación porque según el alcalde, Cesar Polo y el Consejero de Agricultura, José Valín, las firmas no valen para nada, y esto es para que se sepa que los vecinos cuentan más que una palabra de ellos», concluye Pigazos.