¿Cómo puede sentirse un periodista en la Argentina de hoy?
Como un patriota o como una mierda…
Yo me siento como una mierda, porque la impotencia es tan grande frente a la necedad y a la locura de los Medios. Por un lado los Multimedios, frenéticamente trabajando para el sistema que en el mundo entero comienza a caerse a pedazos, tan obvios son, que dan náuseas, asco… La desinformación y la deformación de la actualidad, manipulada con total desenfreno, hace de esta profesión el centro de la política social del gobierno de turno.
Ellos se sienten los patrióticos, claro, defienden la “Patria Financiera”, defienden sus privilegios, sus chanchadas, su status, su dinero, vendieron su reputación, sus proyectos, están “al servicio” de los servicios, y todavía queda el resabio de viejos dinosaurios que creen que la televisión es basura, mientras aportan su grano de malicia en canales de cable.
Triste, ¿puede un periodista estar triste?
Cualquiera es “comunicador”, con la anuencia del padrino, desde las pantallas pueden deshacer una noticia, pueden burlarse de los piqueteros, pueden revindicar la represión.
Ejemplo de esto. ¡Que los manifestantes se negaron a ser palpados de armas porque algún arma traerían! (González Oro, 10 de Oct., canal 9, sin palomita, se la comieron…)
Y para muestra sobra un botón. Mostrar cómo duermen en el Congreso, “la gorda Carrió” esa fue la exacta expresión del conductor, pero nada de cómo traicionan al pueblo desde la Casa Rosada y la Quinta de Olivos…desde anteriores gobiernos( la troup de Hadad en Aquelarre, sí de brujas, pues parecen un hato de viejas, 10 de Oct., en el canal de la bandera azul, roja y blanca…)
“las Muertes del Puente Pueyrredón…” ( Telenoche) ¿por qué no usan las palabras correctas, tanto cuesta salirse del libreto, Asesinatos.
Para dejar de sentirnos como una mierda, tendremos que generar otra cosa, si aún hay gente que no cree, gente que cree un poquito y gente que se cree todo, es porque no es suficiente con conducir un programa y “pegar fuerte”, somos profesionales, pero también somos gente, pueblo, raíz del drama que sufre todo el país, somos Latinoamérica, potencia humana, intolerancia y desamor…
No basta con sentirse honesto, el bombardeo es demasiado fuerte, ¡qué poco espacio se dedica a temas de política internacional! Al manejo de la comunicación que desde tiempo inmemorial se gesta en la Argentina.
Aparece el Periodismo Alternativo, como propuesta, todavía no se sabe el cómo, si está claro el “será”.
El objetivo es la difusión de la verdad, pero también el mensaje comprometido con esa verdad, la única, si existe “los asesinatos a luchadores populares que se manifiestan en paz y haciendo uso de su derecho constitucional”, tiene solo una arista de análisis, el asesino es el culpable, ¿se entiende?
Existen los medios alternativos, que intentan encausar la información hacia el contexto social, popular, y debido a ello, son perseguidos, desde leyes que comienzan a querer implementar el cierre, y hasta la cárcel a los propietarios de pequeños canales de información que desde lo comunitario “molestan”… son “clandestinos” “ilegales” “subversivos”, no pagan, seguramente, tampoco cobran por su silencio…
Por eso escribo en La Tapa, donde se pretende un periodismo para un nuevo ciudadano.