Monumentos a los caidos de la Republica

Fotos de la restauración de la lápida de John Cookson enviadas por Angel Archilla.

21/11/2001

Lpida1 copia.jpg (17814 bytes) Lpida2 copia.jpg (90520 bytes) Lpida3 copia.jpg (52974 bytes)

Diario llevado por Angel Archilla con motivo de la restauracion del Monolito a las Brigadas en Pandolls, 2ª actuacion.

Sábado, 24 de marzo de 2001

monolitobrigadas1 copia.jpg (22017 bytes) monolitobrigadas2 copia.jpg (14074 bytes)

Después de dormir poco y mal, como el niño que va de excursión con el colegio, me levanté a las seis de la mañana (quien madruga.......) la noche había sido pesada y no había tenía muchas ganas de café por lo que abandoné la idea y tras despedirme con un beso a mi hijo, cogí la bolsa, la mochila y marché de casa para ir hacia el parking donde "embarcaría" en mi coche hacia Segur de Calafell. Esta vez no tendría compañero de viaje, Ernesto tenía que cumplir con la celebración aplazada del santo de su señora, me faltaría mi "brazo derecho", también el "izquierdo", José Manuel tenía compromisos laborales y no podría asistir. Manel Sanrromá me avisó de su "deserción" el día anterior, la Plana Mayor hacía agua por todos los lados...... en fin en peores nos las habíamos visto.

Al llegar a Segur, Jesús nuestro "maestro Zapador" ya estaba esperando, trasladamos los "trastos" de un vehículo al otro y marchamos rumbo hacia el Ebro, viaje repetido durante más de nueve años pero con sorpresas nuevas. ¿Como podía ser que a las siete de la mañana de un sábado, la autopista pareciera una senda de hormigas 16 válvulas?.  La respuesta al poco tiempo....... nos adelanta como "alma que lleva al diablo" un Citroën Saxo y un Subaru.....

- ¡¡Joder!! el Rally Costa Brava, que va hacia los tramos de Tarragona y nos sigue los "tifosis" de la gasolina y los corredores.

Llegamos al peaje de Hospitalet del Infant colapsado y tenemos que hacer cola....

- .¡¡¡¡¡¡¡¡ Cagüen la leche !!!!!!!!!!. Lo que faltaba, hacer caravana para salir de la autopista

Esta colapsada por los aficionados, con matrículas de toda España y Francia, que quieren salir por la única salida.

Veinte minutos para hacer los escasos dos kilómetros, entre GTI, 16 válvulas, "tubarros" y llantas de aleación. Ya hubiera cambiado alguna "nena-copiloto" por el piloto que llevaba. En fin........

Al llegar a Gandesa decidimos acercarnos a la entrada de la senda y descargar el material, cerca de 300 kg. que habría que subir para poder llevar a buen puerto nuestro proyecto y de regreso hacia el "Pique" donde teníamos la primera base de partida.

Llegamos y había cierto "ambientillo" de gente, reconocí a mi amigo José Mª que como buen montañero ya nos esperaba con un amigo suyo. En esto apareció Pol Galito, "el hombre de la cámara", aunque hacía pocos días que nos habíamos visto, nos saludamos efusivamente. Acto seguido entraron Francesc Franch, Angels, Ramón y Ricard, venidos de la "Terra Ferma" y el grupo se hizo más grande y ya que la hora acompañaba, pedimos para almorzar.... y que si no, lo que tanto he pregonado durante estos días.... huevos fritos , beicon y vino "tintorro" de la tierra que íbamos a pisar para devolverle la historia perdida durante más de media década.

Así fue como durante el desayuno fueron llegando más miembros de la " II ª Brigada de la restauración", Santiago, Domingo, Etc..... . Otros ya estaba en una mesa pareja poniendo el cuerpo a tono. Legaba la hora de marchar y después de los cafés que para Pol se le convirtió por arte de magia en un "pedazo" de carajillo, enfilamos la salida de Gandesa dirección hacia nuestro destino, pasando por la "cota de la muerte" hoy silenciosa y expectante ante los deseos herejes de su profanación por los molinos. Llegamos al punto de encuentro donde había otro grupo de "voluntarios" esperando, entre los que reconocí desde el coche a Pere Joan y Josep de la disuelta "I ª Brigada" Junto con Núria y Manel que habían decidido reengancharse nuevamente. Tras los saludos de rigor empezaba de verdad la nueva aventura, no sería tan fácil como la primera. Una vez descartado el agua, que sabíamos en el lugar de 38 litros, había que subir el hormigón, picos, palas y demás útiles. Las bolsas del hormigón pesaban cerca de 15 kilos cada una y no es fácil subir por el sendero con semejante peso descompensando a cada paso. La senda se convirtió muy pronto en una larga serpiente de 25 personas a diferente ritmo, unos avanzados, otro pelotón por el medió, los rezagados y el "coche escoba" por si alguien fallaba. La vista era digna de ver, como avanzaba la columna entre el desorden . Poco tiempo después llegamos a nuestro destino, donde la explanada se hizo pequeña para los que subimos. Bolsa, mochilas, herramientas...... permanecían escampadas alrededor de "nuestro amigo" el monolito. Las piezas separadas de la lápida, seguían en el mismo lugar donde las habíamos dejados meses atrás,  poco tiempo les quedabas para refundirse nuevamente en una sola y volver a formar parte de la mortaja del capitán Egan de la compañía de zapadores. Los que no habían almorzado rápidamente le "hincaron el diente al asunto" y los que habían subido servidos, se pusieron manos a la obra. Unos a podar los pinos que no habían sido tocados desde que se plantaron, otros a limpiar los trozos de la lápida y los que quedábamos a planificar y preparar el agujero para la colocación del punto de información del monolito y la lápida.

Poco a poco la zona fue tomando aspecto del campo de trabajo, unos aquí otros haya, iban acometiendo su labor.

Se preparo la base donde colocaríamos la lápida después de infinidad de años de estar perdida en más de una docena de trozos. Se niveló el terrenos y se colocó una capa de graba, los primeros temores de que el material era insuficiente empezaban a tomar cuerpo, no se podría acabar dependiendo de la forma que se hiciera, pero se debía que acabar ese día, algunos marcharían al medio día y otros durante el transcurso de la tarde, por lo que hacer una nueva expedición el domingo sería imposible. Después del cambio de impresiones se decidió hacer hasta donde se pudiera y no acontecer un final sin haber visto el principio.

Poco a poco las bolsas de material iban desapareciendo pero en contra partida la lápida iba tomando nuevamente su forma original, una pieza aquí otra haya y completando su forma original. Mientras tanto el punto de información se plantó y se lleno su base de hormigón. aunque de construcción artesanal y sin saber el tiempo que duraría, todos nos felicitamos por tenerlo y pensar que a partir de la fecha, aquellos que subiesen al lugar tendrían una mínima información de lo que aquellos dos monumentos representaban.

Las "barracas" existentes a escasos metros del monolito empezaron a ver el sol después de la limpieza de la vegetación que apenas las hacía visibles, una al lado de la otra, aparecieron ante nuestra mirada intentando decimos que allí en aquel minúscula superficie, encontraron descanso aquellas hombres que lucharon entre las rocas y el cielo de España.

Ya teníamos la lápida recompuesta en la mejor forma que conseguimos, había que llenar los huecos con hormigón para después pasar una capa de mortero y posteriormente otra más fina para conseguir la textura del resto de ella. Cada vez quedaba menos material pero se veía que lo que pudiera faltar, seria para los laterales y no para la base de ella.

Era ya la hora de recuperar fuerzas y descansar, el sol apretaba de justicia y el viento del medio día empezaba a soplar, resecándonos por fuera ya que por dentro buena tiento dimos de las botas y del agua.

Parte de la "II ª Brigada" ya había comenzado ha retirarse, el trabajo más duro ya se había realizado y necesitábamos tiempo para que el cemento fraguara, decidiendo tomarnos un descanso para comer. ¡Ojo! "que no solo de pan vive en hombre". La intendencia funciono a las mil maravillas, coca con arengadas, coca de manzana, pan de leña........... un trozo por aquí, otro por alla, la bota que viene y la bota que se va, pero lo más bueno estaba por llegar, café y copa, pero no de termo señores míos, sino recién hecho con cafetera italiana, con todo su aroma, así fue como aparece una cafetera y se empieza hacer café. Después de tanto sibaritismo la cosa cambio de aires muy pronto. La faena dura ya estaba hecha y solo quedaba limpiar, retocar y poner nuevamente los datos que habían desaparecido.

Hacia las cinco de la tarde, damos por concluido el trabajo. Es hora de comentar los pormenores y repasar la faena hecha.

Limpiamos tres "barracas" que ahora se pueden ver perfectamente. Podamos los pinos del acceso al monolito en una línea de 10 mtrs. aproximadamente. Se colocó un punto de información con una breve reseña del monolito y la lápida. Se cortó un pino que estaba reventando la base de la cisterna de agua y se limpio la base de recogida de esta. Colocamos el azulejo conmemorativa de la restauración del monolito donde habíamos puesto el cemento con la fecha y restauramos la lápida. Hay que comentar que al limpiar dos trozos de esta, descubrimos una estrella de cinco puntas encima del nombre y centrada en él, también se aprecian varias rayas profundas intentando desfigurarla.

No había quedado mal, ahora ya no se podrán perder más piezas. Seguidamente las consabidas fotografías de rigor y la limpieza de todos los desperdicios que habíamos diseminado durante el día. A las 17,30 horas emprendimos la marcha hacia el punto de partida, cansados pero satisfechos de haber obtenido otro triunfo contra el olvido.

Queda mucho trabajo por hacer en el área del monolito, pero lo más importante ya se ha hecho, después de un año de la excursión, se han realizado dos actuaciones con la participación de más de 50 personas y aunque no seamos profesionales, nos sentimos más que otros. como dice el tópico "hechos son amores" y lo hemos demostrado.

 

Saludos y gracias a todos por vuestra ayuda.

 

Angel Archilla