"La OEA, advirtió al gobierno sobre la inminencia de terribles masacres en el sur del país, este hizo caso omiso a las recomendaciones para proteger sus vidas." (Diario El espectador, Abril 19 de 2001).
"La Policía colombiana falsifica ordenes judiciales para espiar las comunicaciones de organizaciones defensoras de Derechos Humanos, miembros implicados en la desaparición de sus integrantes." (Diario El Espectador abril de 2001)
"Ante las campañas militares en el sur de Bolívar y la complicidad del Gobierno Nacional y los paramilitares el ELN, ha decidido suspender los diálogos de paz". (Diario El Espectador Abril 19 2001)
"La vacilación y debilidad política del Gobierno impide el canje de prisioneros de guerra con las FARC." (Diario El Espectador Abril 19 2001).

Cuando en una sociedad l@s grupos dirigentes son centenarios y estos ya dominan con todas sus funestas consecuencias la subjetividad de la enorme maza de trabajadores y trabajadoras reproducidos y reproductivos, que al desconocer el rapto de sus mentes ignoran su condición de esclavos, informatizados, globalizados, repugnantemente occidentales; cuando la cultura nacional se desmorona al haber aceptado la complicidad que significa permeabilizar el sufrimiento de los desterrad@s, de los exiliad@s, de los torturados, de las familias de los desaparecid@s y de los que mueren de hambre, para hecerse inmune a él; cuando el país entero observa inconmovible ese experimento fallido donde nunca hubo proyecto nacional y la civilización es remplazada por la barbarie.......entonces no se puede mas que traspasar ese limite que separa la cordura de la locura y empezar a confundir las lagrimas con las rizas..."donde la mentira se convierte en verdad y la verdad se convierte en mentira"....pero el sistema hace mucho dio muestras de no ser perfecto y muchos, como en los malos cuentos, tuvieron la certeza de que los gobernantes mentían y esa democracia era una asquerosa farsa....... algun@s de ell@s sobrevivieron a la guerra como ecos profundos al otro lado de la frontera o cruzando el océano y fueron desde entonces exiliad@s..... refugiad@s.

Los gobernantes continuaron y continuaran siendo los mismos y su teoría reencauchada en las universidades del norte industrializado...el gran logro de la teoría liberal clásica puede ser, en lugar del rechazo y el combate consciente de los trabajador@s, el deseo por parte de la maza desposeída de pertenecer a esa sociedad y escalar en ella y la aceptación de sus valores, sus códigos, etc como reglas de juego en un mundo cautivo del equilibrio inestable. Y esto es lo mismo que decir que la dominación es en realidad subjetiva, lo que es más sangriento y terrible que la peor de las dictaduras. El individualismo y el libre mercado reivindicado por el liberalismo no existe. La libertad y el libre desarrollo consagrado en las constituciones políticas no es mas que una arrogancia de los hijos de la postmodernidad.

La guerra y la violencia institucional es una realidad histórica en los países del sur con muchas y diversas causas, los mecanismos de dominación utilizados en el norte dejan de ser suficientes. Esta se extiende y agrava como una peste. Cuando las organizaciones politico-militares de carácter popular que actúan en esta guerra amenazan los fundamentos del orden, como un eslabón mas en el recrudecimiento de contradicciones en la misma base social, entre los núcleos oligargicos se extiende el miedo y reaccionan en forma de terrorismo estatal y grupos paramilitares. Los refugiad@s en todo el mundo son una de las muchas pruebas sociológicas de lo que ocurre o aparece cuando en los altos círculos del poder se extiende o se fermenta el miedo y este es retransmitido a esa enorme maza indiferente, entrenada para no tomar partido: El fascismo.

Colombia hoy aparece como la mayor masacre de todo el hemisferio sur. El ejemplo perfecto de la fermentación oligargica del miedo. Donde la violencia es socialmente aceptada, el silencio es una ley y la oposición un delito.

Pero aun estamos viv@s. Un país con exilia@s políticos, es un país cuya conciencia aun no ha sido destruida...nuestro exilio no es una derrota. Reivindicamos nuestro derecho a una nación y participar en la construcción de la misma. Pero esto no será posible mientras los destinos del país estén en manos de un régimen que inerme asiste al genocidio de campesinos, lideres democráticos, sindicalistas, defensores de derechos humanos a manos de los grupos paramilitares y los agentes del estado, que cínicamente les pide permiso para adelantar las políticas de paz, que de la forma más humillante le rinde cuentas. El futuro no será posible mientras esa extrema derecha en armas desconozca abiertamente toda normatividad, hasta la de la guerra.

El pueblo colombiano esta cautivo por el terror bárbaro impuesto por los paramilitares. Y los lideres democráticos están cautivos por el miedo impuesto por una justicia que pretende prohibir el derecho a discernir...., lo que equivale a prohibir el pensamiento.

Si es usted un ser humano que dice poseer una ética y unos principios tiene el deber moral, independientemente de su filiación política, de tomar partido frente al genocidio llevado a cabo contra el pueblo colombiano por el estado de este país y sus grupos paramilitares, frente a la persecución de lideres democráticos por sus aparatos de justicia.

Aún en el exilio nuestra lucha continúa...