Derechos para Tod@s 
Número 16
septiembre - octubre 2003



POR EL DERECHO DE LOS PUEBLOS A DEFINIR SU PROPIO DESARROLLO.
NO A LA ORGANIZACIÓN MUNDIAL DEL COMERCIO (OMC)

Caminamos de manera irrefrenable hacia la V Conferencia Ministerial de la OMC que a primeros de Septiembre tendrá lugar en Cancún, México

Manifiesto de Organizaciones sociales, sindicales y políticas madrileñas


Caminamos de manera irrefrenable hacia la V Conferencia Ministerial de la OMC que a primeros de Septiembre tendrá lugar en Cancún. Mexico. El eufemismo con el que los poderosos del mundo llamaron a esta Ronda de negociaciones como la “Ronda del Desarrollo”, no ha logrado ocultar las desastrosas consecuencias que para los pueblos tiene un programa político que impulsa el neoliberalismo económico más atroz.

El derecho de los pueblos a definir su propio modelo de desarrollo y a implementar aquellas políticas más acordes con sus realidad y con sus objetivos de desarrollo humano, se está viendo socavado por un modelo único que impulsa la privatización, liberalización y mercantilización de todos los bienes y recursos deposeyendo al ser humano de toda su posibilidad de vida. Los países desarrollados y en especial las grandes empresas multinacionales son los únicos y los grandes beneficiados de este modelo.

Hacernos creer que el comercio internacional será el motor para el desarrollo y decir que la liberalización que se pretende será fundamental en la lucha contra la pobreza es una gran falacia sin ninguna apoyatura en la realidad. Ningún país se desarrolla sin una política tendente a fortalecer su propia estructura económica y social interna. Ningún pueblo alcanza su desarrollo humano vendiendo sus riquezas y construyendo una economía dependiente del exterior.

Las organizaciones de agricultores, consumidores, ecologistas, organizaciones no gubernamentales para el desarrollo y sindicatos que firmamos este manifiesto queremos expresar de nuevo nuestro rechazo a esta nueva Conferencia Ministerial de la OMC y al proceso de fortalecimiento que esta organización está teniendo en el mundo. Es necesario situar a la OMC en su justo lugar. El comercio internacional guiado por la liberalización más absoluta de las reglas de intercambio no es la forma más adecuada de solucionar la pobreza y la exclusión que padecen el 70% de la humanidad. La OMC sólo comparte con otras instituciones internacionales la grave responsabilidad de dar una solución a este problema, por lo que es esencial que sus reglas sean consistentes y coherentes con los tratados y acuerdos internacionales suscritos en el marco de otras organizaciones internacionales y que vienen a garantizar la primacía de los derechos humanos, económicos, sociales y culturales, así como la necesidad de caminar hacia un desarrollo sostenible o la de la lucha contra el hambre. Por lo tanto, es necesario que las normas de la OMC estén sometidas a ese conjunto de reglas y normas que nos ponen en camino hacia un desarrollo humano sostenible y no al revés.

Las organizaciones firmantes de este manifiesto, con nuestra trayectoria y compromiso de años por un medio rural vivo tanto en el norte como en el sur, queremos destacar de nuevo el terrible impacto que la OMC está teniendo sobre los millones de agricultores y agricultoras, ganaderos/as, pescadores y pescadoras, indígenas, y trabajadores rurales sin tierra que hoy representan el 75% de los pobres y hambrientos del mundo. En lugar de luchar contra la pobreza, la OMC a través de sus acuerdos multiplica el hambre y la exclusión de millones de personas del acceso a bienes y recursos productivos tales como la tierra, el agua, los peces, las semillas, las tecnologías y el conocimiento impidiendo que el desarrollo de sus países se construya sobre su trabajo.

Frente a la V Ronda de negociaciones que comenzará en Cancún, las organizaciones abajo firmantes quieren expresar también su firme rechazo a la ampliación de las materias y cuestiones objeto de la agenda de la OMC que se quiere aprobar en Cancún.

Por todo lo anterior y de una manera clara consideramos que la OMC no es el marco internacional adecuado para tratar los temas relativos a la agricultura, ganadería, pesca y alimentación en el mundo si lo que pretendemos es la lucha contra el hambre y la pobreza. Consideramos que es necesario generar un nuevo espacio internacional bajo el sistema de Naciones Unidas y donde el comercio sea abordado en su justa medida y donde quede supeditado a la aplicación y desarrollo efectivo de todos los derechos humanos.

Por todo loa anterior las organizaciones firmantes:

1. Pedimos que la agricultura y la alimentación salgan definitivamente de la OMC, y que su tratamiento quede de nuevo supeditado en el marco de la FAO.

2. Reclamamos la necesaria elaboración de un Convenio Internacional por la Soberanía Alimentaria como marco político orientador en el tratamiento de la agricultura y la alimentación a nivel global.

3. Consideramos que los estados tienen derecho a proteger, apoyar y promover sus sistemas nacionales de producción agropecuarios apoyados sobre un modelo de producción basado en la explotación familiar sostenible y solidaria con el resto de los pueblos.

4. Consideramos que los estados y los pueblos tienen derecho a implementar políticas y medidas dirigidas a favorecer una producción diversificada destinada a abastecer los mercados interiores y así a luchar contra el hambre frente a una producción destinada a la exportación.

5. A partir de las premisas anteriores, rechazamos que el acceso a los mercados tal como se está planteando en estos momentos se convierta el en tema central del debate agrario. Los grandes beneficiados de esta tesis no serán los campesinos y campesinas pobres de los países en vías de desarrollo, sino las grandes multinacionales de la alimentación que operan tanto en el norte como en el sur. Solo la promoción y el apoyo de una agricultura familiar diversificada dirigida a los mercados interiores servirá para avanzar hacia el desarrollo rural de estos pueblos y para ir dando una solución al tema del hambre de forma autónoma y no dependiente.

6. Reclamamos la necesidad de desarrollar un Plan de Rescate Internacional de los precios de los productos básicos agrarios y de las materias primas, que remuneren de manera justa el trabajo de millones de campesinos y campesinas, pastores y pescadoras del mundo. Reconocemos la necesidad de regular el mercado internacional de estos productos pero sobre otro tipo de premisas: control de oferta y demanda, cuotas de producción y precios mínimos.

7. Creemos que es necesaria una moratoria del Acuerdo General sobre Patentes de la OMC. Consideramos que las semillas, así como otro tipo de material y bienes genéticos deben ser considerados como patrimonio de la humanidad y su utilización y aprovechamiento debe estar sometido a control público. Rechazamos la producción y uso de plantas y alimentos transgénicos sobre el principio de precaución, la defensa de la biodiversidad, y el rechazo a la concentración de la propiedad de las patentes sobre los mismos.

8. Creemos que son los estados y los poderes públicos quienes deben garantizar la prestación de todos los servicios públicos con calidad y cercanía al ciudadano desde la perspectiva del desarrollo efectivo de los derechos económicos, sociales y culturales. En este sentido consideramos que los servicios públicos puesto que son reflejo del acceso a los derechos humanos como educación, sanidad, cultura, alimentación, agua etc ... deben estar por encima de cualquier tratamiento comercial o económico de los mismos y por lo tanto quedar fuera del marco de la OMC.

9. Las inversiones privadas en cualquier país deben estar sometidas a una legislación nacional que favorezca en primer lugar el desarrollo de la inversión y la industria local, que someta cualquier inversión a criterios y principios de respecto ambiental y de derechos laborales. Por lo tanto un acuerdo multilateral para favorecer las inversiones al margen de lo anterior no estaría sino haciendo más profunda la brecha entre norte y sur dentro de nuestro mundo.

10. Creemos por todo lo anterior que es necesario que los estados y sus gobiernos hagan una revisión seria y profunda de los efectos de la OMC y sus acuerdos en términos de desarrollo humano y de lucha contra la pobreza en el mundo, para a partir de este análisis reconsiderar el actual marco de las negociaciones acerca del comercio en el mundo.

Por todo lo anterior instamos a la ciudadanía y todas sus organizaciones a sumarnos a las movilizaciones que a nivel global tendrán lugar durante la semana del 10 al 14 de septiembre simultaneamente a la celebración de la V Conferencia Mundial de la OMC .


JORNADAS INTERNACIONALES DE LUCHA CONTRA LA OMC

Madrid, 10 y 11 de septiembre de 2003

CONCENTRACIÓN:
miércoles 10, a las 18 hs., en el Ministerio de Agricultura
(M/ Atocha).

ACTO PÚBLICO INFORMATIVO:
jueves 11, a las 19 hs., en el Instituto Cardenal Cisneros;
C/ Reyes, 4 (M/ Noviciado).

Convocan:
Veterinarios Sin Fronteras, Unión Cívica por la República, STES, Solidaridad Obrera, Sindicato Administ. Pública CGT, SETEM, Plataforma Defensa de los Servicios Públicos, Los Verdes, Juventudes Comunistas, I.U.-CAM, Espacio Horizontal contra la Guerra, Espacio Alternativo, Ecologistas en Acción, Derechos para Tod@s, Corriente Roja, CONGDE, Comité Solidario con África Negra, COAG, Casapueblos, Cáritas Española, BAH, ATTAC, Amigos de la Tierra.