Derechos para Tod@s 
Número 11 
noviembre - diciembre 2002




FORO SOCIAL EUROPEO EN FLORENCIA.
VENTANA "AMÉRICA LATINA: CRISIS GLOBAL Y RESISTENCIA SOCIAL"

Corresponsales en Florencia de Derechos para Tod@s


Se celebró el jueves 7 de noviembre, con la presencia de:

Miguel Urbano Rodrigues (Periodista. Portugal)
Estela Carlotto (Abuelas Plaza de Mayo-Argentina)
Lucho Garzón (CUT Colombia)
Txema Abaigar (Taller de multinacionales de Madrid. EE)
Pedro Jaime Mosquera (Asociación campesina de la Comunidad indígena Arauca. Colombia)
Representante de la Comunidad U'wa (Colombia)
Coordinó: Mario Lubetkin (Uruguay-IPS)

Presencia de aproximadamente unas 5.500 personas, jóvenes la mayoría, combativo el ánimo, emocionantisimo el acto.

En este marco transcurrió esa Ventana al Mundo que, por la intensidad con que se vivió, más bien pareció un enorme ventanal dónde además de visualizar los avances, pero también los peligros presentes y futuros que acometen a América Latina, desde dentro y desde fuera de este subcontinente (peligros llegados también y de nuevo desde el continente europeo), se vivió la idea de que, realmente, otra América Latina es posible.

Y así, deshojando las perspectivas positivas (y negativas, en caso de pérdida de rumbo) del Foro Social Europeo y del Mundial, en relación a América Latina intervino el periodista portugués Miguel Urbano Rodrigues.

Tras él continuó la argentina Estela Carlotto, de las Abuelas de la Plaza de Mayo. La aparición de Estela hizo temblar la carpa donde estabamos y probablemente toda Florencia. Estela, que pocas semanas antes había sufrido un atentado paramilitar en Argentina, empezó sus emotivas palabras recordando a aquell@s que fueron asesinad@s o que fueron desaparecid@s, por su lucha en pos de otro mundo alternativo al capitalismo (sistema que engendró las salvajes dictaduras que sufrió el Cono Sur y, antes y ahora, el desfalco corrupto de sus dirigentes sobre el pueblo y que ha dado lugar a un 70% de pobreza en la Argentina) y reclamando un paso adelante en la construcción de alternativas para ese otro mundo posible. El atronar de los aplausos con que fue recibida y la emoción de su alocución, hizo que la temperatura del lugar subiera tantos grados que hizo que, a más de un@, le atravesara un largo escalofrío y no se le pasara hasta tiempo después.

Lucho Garzón, colombiano, histórico dirigente sindical, actualmente miembro del Frente Social y Político y candidato a presidente por el Polo Democrático, vino a continuación. Con un verbo diáfano desgranó la perspectiva que se abre en el presente de América Latina, en general, y de Colombia en particular, haciendo especial hincapié en la necesidad de un empuje común de los pueblos del subcontinente, recogiendo la esperanza de que el papel de Chavez en Venezuela y la victoria reciente de Lula en Brasil, supongan un impulso determinante para ello. Finalmente hizo una prospección del papel hegemonizador en todos los terrenos que quiere reforzar Estados Unidos y su actual Administración, así como de la recolonización de la mano las multinacionales no sólo yankis, sino también y de modo decisivo de las europeas (básicamente españolas) en suelo colombiano y latinoamericano.

Y por donde había terminado Lucho comenzó José -Txema- Abaigar, miembro de Derechos para Tod@s y del Taller de Multinacionales de Madrid (Estado Español). Con un apasionado alegato sobre la necesidad de la implicación de las gentes solidarias de Europa en la lucha contra los nuevos conquistadores (transnacionales y multinacionales europeas y estadounidenses) que de nuevo siembran de violencia y latrocinio los suelos de América Latina, Txema Abaigar hizo vibrar y romperse las manos a la inmensidad de jóvenes (y algun@s no tanto..., en edad) que abarrotaban la carpa. No pidió sólo comprensión sino que incluso planteó como insuficiente la idea de solidaridad; abordando otra necesidad, otro compromiso: el de la responsabilidad. Hay que romper esa explotación salvaje y neocolonizadora desde uno de los centros donde se genera (Europa, a través de sus multi y transnacionales, pero también mediante sus instituciones) esa cadena infernal de represión militar y paramilitar, connivencia estados-mafias económicas-multinacionales, explotación laboral y cotidiana, etc.

En definitiva hay que movilizarse, y ya, porque los problemas actuales de Latinoamérica no nos son ajenos, sino primigenios en nuestra evolución social, política y económica: es nuestra responsabilidad, la responsabilidad de l@s ciudadan@s europe@s (al igual, que debe serla la de l@s norteamerican@s) que queremos otro mundo. La explosión final con la frase con que terminó Txema, y que fue recogida en medios de comunicación ("atreverse a luchar es empezar a vencer"), hizo subir los decibelios del sonido y la emoción hasta el máximo.

Ya, en el marco de esa intensa relación asamblearia entre ponentes y participantes y en torno a un calor militante absolutamente apasionado y reconfortante, Pedro Jaime Mosquera, de la Asociación campesina de la Comunidad indígena Arauca, primero y posteriormente un representante de la Comunidad Uwa (pido disculpas, pues perdí la nota con el nombre del compañero), ambos de Colombia, desgranaron la terribilidad de la situación que las comunidades campesinas y afro colombianas viven en distintas áreas de Colombia. En estas dos alocuciones se desgranaron aspectos que, desgraciadamente, suelen ser comunes en las intervenciones de tod@s l@s miembros o representantes de movimientos sociales colombianos: la explotación, la violencia militar, policial y/o paramilitar, la dependencia de las multinacionales, de los organismos internacionales y de los Estados Unidos..., la ausencia de democracia, en definitiva, que viven l@s ciudadan@s colombian@s.

En ese ambiente de compromiso con la transformación social en Latinoamérica... y, claro está, igualmente en Europa, terminó esta hermosa ventana que abriría en posteriores debates, asambleas y talleres celebrados en el Foro Social de Florencia, alcanzables horizontes y, sobre todo, luminosos andares y caminos para alcanzarlo. Porque ¡otro horizonte es posible!, ¡otro mundo es necesario!.