Info DpT
Timor Este
 

La crisis en Timor Este

Declaración de Acción en Solidaridad con Indonesia y Timor Este- ASIET; www.asiet.org.au (9 de septiembre de 2000. Traducción de Derechos para Tod@s)
 

¡Libertad para los refugiados de Timor Oriental!
¡Fin a las relaciones con el ejército indonesio!

 

ASIET se une a los grupos de defensa de Derechos Humanos y solidaridad internacionales en la condena del brutal asesinato de miembros del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados en Atambua, Timor Oriental, cometidos por la milicia pro-Jakarta el pasado 6 de septiembre. El violento ataque por parte de la milicia a las dependencias de UNHCR fue premeditado y tuvo lugar gracias a la complicidad de quienes apoyan al ejército indonesio y fuerzas policiales.

Era sólo una cuestión de tiempo que semejante incidente tuviera lugar. Desde octubre del pasado año, UNHCR y la Administración Transitoria de Naciones Unidas en Timor Oriental han exigido repetidamente al gobierno indonesio que llevara a cabo acciones firmes contra las milicias que operan en la zona, orientadas a la confiscación de armas y la expulsión de éstas de los campamentos donde se encuentran los refugiados de Timor Oriental. Con la evacuación forzada del UNHCR y demás organizaciones de ayuda, se estima que 120.000 refugiados se han visto desplazados para ir a languidecer a los campamentos sin ninguna ayuda internacional y a merced de las bandas de la milicia.

Durante los últimos 12 meses, los refugiados de Timor Oriental han sobrevivido, contra todo pronóstico, de las acciones de los grupos de la milicia y fuerzas de seguridad indonesias. Las potencias occidentales que alardean de estar haciendo tantos esfuerzos para ayudar a Timor Oriental permiten que esta situación se perpetúe en el tiempo, ante la mayor hipocresía y negligencia por parte del gobierno indonesio. Las bandas de la milicia operan en Timor Oriental con total impunidad y bajo el absoluto patrocinio del ejército indonesio allí estacionado. Permanentemente atormentan e intimidan a los refugiados de Timor Oriental así como al personal de organizaciones que trabajan en la ayuda de estos refugiados. La milicia día a día da caza al personal local asesinando tanto a ellos como a sus familias, mientras que la decisión del gobierno indonesio de enviar más tropas no parece que vaya a solucionar la situación. La continua campaña de terror por parte de la milicia abre la puerta a serios interrogantes sobre la habilidad del presidente Abdurrahman Wahid para controlar al ejército. También levanta graves dudas acerca de si tanto los líderes de la milicia como importantes funcionarios indonesios, y que son los responsables de las atrocidades cometidas el año pasado en Timor Oriental, se sentarán frente a la justicia indonesia.

ASIET apela al gobierno australiano y a otros -como el de Estados Unidos y el de Reino Unido- para que den fin a las relaciones con el ejército indonesio y procedan a un inmediato embargo de armas a Indonesia. ASIET llama en el gobierno australiano y demás potencias occidentales para que proporcionen los fondos y recursos necesarios para empezar la rápida repatriación de aquellos refugiados de de Timor Oriental que deseen volver a Timor Este.

Para llevar a cabo esta repatriación, ha de permitirse la vuelta inmediata de la ayuda internacional a Timor Oriental y ha de darse un compromiso de protección sobre todas aquellas organizaciones que lo soliciten –incluyendo las fuerzas armadas de la ONU– para el logro de su trabajo.

ASIET se une a las organizaciones de derechos humanos, solidaridad y de ayuda legal en Indonesia, Timor Oriental y en cualquier zona, en la exigencia de la creación de un Tribunal de Crímenes de Guerra Internacional que juzgue a los funcionarios indonesios y líderes de la milicia responsables de la destrucción, masacre y violencia que tuvieron lugar en Timor Oriental el año pasado.

¡Alto a la violencia de la milicia en Timor Oriental!
¡Libertad a los refugiados de Timor Oriental!
¡Fin a las relaciones con el ejército indonesio! 
¡Búsqueda de los criminales de guerra!