Jubilación:
¿Quién se llevó el dinero de los trabajadores?
José
Ríos R./ "Deslinde" (4
de Enero de 2003 )
Anoche,
en un programa especializado en temas económicos de la TV local,
un gurú de la economía peruana, salió
declarando más o menos lo siguiente: los privilegiados
de la 20530 le cuestan al país mil millones de dólares
al año, vale decir, 26 millones de peruanos estamos pagando
salarios de privilegio a 290 mil "vivos de la cédula",
ya que por los pensionistas de la cédula viva sólo aportan
31 mil.
Haciendo
números, según esta información, resulta que
la pensión promedio de los llamados vivos de la cédula,
es de mil soles (S/. 1005.75, a un tipo de cambio de 3.5 nuevos soles
por u.s.$). Por supuesto que el gurú (profesor
de la Pontificia Universidad Católica del Perú y de
la Escuela Superior de Administración de Negocios para mayores
señas) ha preferido presentar su información de manera
agregada (una manera muy conveniente por cierto, con ayudas audiovisuales
televisivas, que dan a cualquier cosa seriedad técnico-científica)
y no a nivel unitario. ¡Ah los gurúes! Cuando de embrollar
la cosa se trata hablan de grandes cifras o de los famosos per-cápitas,
cualquier recurso vale cuando la distorsión es el negocio.
Y, de
esos mil soles per-cápita de pensión (de
acuerdo con las cifras del gurú de marras) hay
que descontar las supuestas pensiones astronómicas a las cuales
hizo referencia (algunas de ellas superiores al obsceno salario de
su majestad imperial, ajá, el de los 18 mil dólares
usa), con lo cual la pensión promedio que percibe la mayoría
de los vivos a los cuales acusó el susodicho declarante,
es de 600 nuevos soles (menos de 200 dólares usa). Si esto
es un privilegio en este país del 3er. mundo en
vías de bajar al 4to. ó 5to. de los mundos, pues entonces
la cosa está terriblemente grave, grave de toda gravedad.
El acusador
(muy bien rentado por cierto, y de las rancias canteras ideológicas
de esa madriguera neo-liberal que se llama ESAN) hizo referencia a
la deuda del Estado con los jubilados: 34 mil millones de dólares
usa, presentándola en su juego de cifras como la deuda que
tiene el Estado con los pensionistas de la 20530, lo que es falso.
El actual ministro de Economía y Finanzas ha precisado que:
la deuda, según el informe del propio titular del MEF
ante el Congreso de la República, habría crecido en
una década en ocho mil millones, ya que totaliza los US$ 40
mil millones (deuda con el Sistema Nacional de Pensiones, hoy
manejada por la Oficina de Normalización Previsional, ONP),
ver la edición de Expreso de hoy, sábado 04 de enero
de 2003. La deuda que mencionó el susodicho gurú
no es la de la 20530, exclusivamente, y él lo sabe, es la deuda
con todo el Sistema Nacional de Pensiones (que desde Fujimori, aplicador
inflexible del modelo neo-liberal, asumió todos los regímenes
administrados por el Estado, que es quien los ha desfalcado, desde
los tiempos del Arquitecto, por ejemplo, quien dispuso tomar el dinero
del Sistema Nacional de Pensiones para construir carreteras <lo
que debe haber dado pingües ganancias a los constructores involucrados>
y como es de imaginar el dinero nunca se devolvió).
Los trabajadores
han aportado, año a año, mes a mes, quincena tras quincena,
para la conformación de los respectivos fondos de pensiones.
Obreros, empleados, choferes, trabajadores independientes, servidores
públicos, miembros de las fuerzas armadas, todos, absolutamente
todos sido descontados puntualmente de sus haberes en % variables,
pero más o menos equivalentes. Los de la 19990 han aportado,
y aportan el 9% de sus remuneraciones (el empleador abona <por
cta. del trabajador> el íntegro del % desde la instauración
del bendito régimen de las AFP, que es lo que quiere favorecer
el gurú). Los de la 20530, esos que han sido motejados
de los vivos de la cédula por el sabihondo personaje,
aportaron el 8% de sus remuneraciones (cuando los sueldos de los trabajadores
tenían poder adquisitivo, no como ahora que se han visto reducidos
a miserables propinas). Y así, sucesivamente, los fondos de
jubilación y montepío no se formaron por obra y gracia
del espíritu santo, lo que pasa es que los sucesivos gobiernos
han dilapidado los fondos de la jubilación de los trabajadores.
Y ahora, este sujeto, como primer paso en la desaparición de
las pensiones (a eso es a lo que apunta, para clavarnos las AFPs)
se quiere tirar la 20530, bajo el argumento, que sólo
31 mil cotizan, y 290 mil cobran, ¿cómo podría
ser de otra manera cuando se declaró régimen cerrado,
donde nadie más entraba. Después de un tiempo no muy
largo, esta situación tendría que llegar. Todo sistema
de pensiones es de naturaleza piramidal, los trabajadores activos
aportan y los extrabajadores ya aportaron, y conforme van saliendo
unos entran otros, y por tasa de crecimiento se forma una pirámide
(la que al llegar a niveles de desarrollo de la sociedad revierte,
deja de ensanchar la base, produciéndose un efecto similar,
análogo, lo que es compensado por la riqueza acumulada socialmente
<al llegarse a fases más altas del crecimiento económico>)
que sostiene por un período histórico el régimen
pensionario. En los países desarrollados se protege la vejez,
las personas que pasan los 60 años tienen automáticamente
pensión de vejez (independientemente de si han trabajado dependientemente
o no).
Pero,
¿qué ha pasado en el Perú?, ¿porqué
la deuda pensionaria del Estado es tan grande? (aparte de la deuda
pensionaria de los privados que debe estar por una suma equivalente).
Por lo que ya he dicho: el mal manejo de los Fondos de Pensiones.
El Estado ha, literalmente, desfalcado los fondos de jubilación,
y así lo ha denunciado el presidente de la Central Nacional
de Jubilados del Perú (Cenajupe), Hernán Espinosa.
Este es
el fondo de la cosa, por el lado de las pensiones administradas (y
desfalcadas) por el Estado, existe el Fondo Consolidado de Reservas
Previsionales, cuyo manejo se realiza en los marcos de la Ley N°
27617 (esta ley manda que haya 2 representantes de los jubilados,
y el Gobierno sólo acepta 1, por un lado, y por otro, ha sentado
en el Directorio del Fondo, ¡a un representante de las AFP!
¿qué hace un representante de los AFPs en ese directorio?).
Aquí el verdadero desfalco es ya de 40 mil millones de dólares
(Silva Ruete dixit). Y en cuanto al Sistema Privado de Pensiones,
la deuda de los empresario ya asciende a 500 millones de nuevos soles
(sumas descontadas a los trabajadores y no abonadas a las AFPs). Es
de suponer que la deuda de los empresarios con el Sistema Nacional
de Pensiones sea mayor o igual a los 40 mil millones de dólares
que debe el Estado.
La respuesta
es una sola, e inocultable: ¡se han tirado la plata!. Y lo que
quieren ahora es desaparecer todos los sistemas de seguridad social
para no pagar un solo centavo de las deudas. Esa es la verdad monda
y lironda, ¿y los jubilados?, ¡bien gracias!, ¡que
se las arreglen!. Esto, Sr. Gurú (A.I. son sus inciales), tiene
un solo nombre: se trata de un genocidio económico. Quieren
dejar a los jubilados, a los cesantes, a todos los extrabajadores
en la calle, condenados a la muerte por inanición (peor que
ahora, que languidecen con 200, 300 o 600 nuevos soles). Este gurú
ya habría sido denunciado si estuviéramos en un país
donde se respete la vida, aunque sea sólo un poco.
Aquí,
queridos lectores, lo que debería hacerse es enjuiciar al Estado,
demandarlo, embargar los bienes del Estado (los pocos que quedan)
primero, y luego enjuiciar a los responsables, a todos los funcionarios
que han permitido el desfalco, porque tiene que haber responsables,
y una vez que la justicia, una vez que algún magistrado probo
resuelva en justicia, deben pagar. Tiene que haber alguna solución.
¡Y si los dirigentes no funcionan, poniéndose a la cabeza
de la lucha, pues esta debe hacerse con nuevos dirigentes!.