Vía Democrática: ¿cuál partido?, ¿para cuál coalición?
Hicham
Chaara, miembro de Vía Democrática*, de Marruecos
(1
de Febrero de 2002. Traducción del árabe de Sonia Prieto)
La escena política marroquí ha conocido
durante los últimos años múltiples acontecimientos
que aquí recordaremos brevemente y que ayudarán a comprender
la necesidad de la elaboración de un programa para la convergencia
política de la izquierda, concretada en coaliciones y fusiones.
Estas evoluciones políticas se manifiestan particularmente
en:
1. Una nueva constitución impuesta, a la que las fuerzas de la
izquierda expresaron su boicot o la ausencia de participación en
su plebiscito.
2. Elecciones fraudulentas, que condujeron instituciones sin credibilidad/
valor alguno.
3. El gobierno "de consenso y de compromiso" es un ensamblaje
entre los partidos nacionalistas, la administración y los conocidos
como "ministerios de soberanía" (la soberanía
del majzén).
4. La transferencia del poder de rey a rey.
5. Se amplió el terreno de las fuerzas del islamismo político
y se constata la incapacidad de las fuerzas de la izquierda y democráticas
en general para crear un programa popular militante -en especial, dentro
de las universidades- que frene la línea creciente influencia ideológica
de las primeras en las instituciones universitarias.
Tras haber transcurrido el periodo de investidura del "gobierno
de alternancia" y la transferencia del poder a otro rey, parece que las tesis esenciales que multiplicaron las condiciones históricas para los surgimientos de organizaciones del movimiento radical marroquí están todavía presentes porque:
· en lo que
se refiere a la Kutla majzení, está inmersa en la búsqueda
de una solución conveniente a sus conflictos secundarios internos,
para garantizar sus intereses en un momento de transformaciones internacionales.
· en lo que respecta
al "gobierno de alternancia", la experiencia ha demostrado que
efectivamente es un gobierno de alternancia, pero de alternancia majzení,
que aplica la política económica dictada por las instituciones
económicas mundiales y pone en práctica las fórmulas
del liberalismo salvaje, velando por la ejecución del programa
de las mafias majzeníes en los sectores públicos, los servicios
sociales y sobre las cuestiones jurídicas y culturales.
· y existe un
tejido humano dispuesto para tejer una coalición de la izquierda
que posea un peso considerable en la lucha de las masas populares por
la democracia global. Asimismo hay sectores que tienen experiencia en
el ámbito de los pactos específicos o de un programa de
mínimos.
En este marco socio-político parte de las fuerzas de la izquierda
se mueve actualmente en la dirección de una unificación
total (Organización para la Acción Democrática y
Popular - Movimiento por la Democracia - Demócratas Independientes
- Grupo de Almaydán). Y por otro lado el Partido de la Vanguardia
Democrática y Socialista (PADS) y el movimiento Vía Democrática
(Annah Dimocrati) impulsan desde hace 6 años otros temas políticos
y sociales.
En este texto queremos analizar esos procesos de convergencia, entendiendo
que, además de las diferencias, en cada uno de ellos se encuentran
defensores de las libertades públicas y de los derechos humanos,
así como de las luchas populares en sus diferentes aspectos.
Escenarios
Nos encontramos ante tres escenarios posibles ante esos planteamientos
de convergencia. Podemos resumir el 1º y el 2º, mientras que
el tercer escenario es la propuesta de Vía Democrática para
el pacto de las fuerzas de la izquierda como punto de partida para rehabilitar/reconsiderar
y restaurar la memoria en lo que respecta a los puntos de vista aprobados
por las fuerzas de la izquierda para materializar una postura de boicot
a la constitución otorgada-impuesta en el año 1996.
Escenario 1:
Dejar la situación tal y como está a nivel constitucional
con la escusa del "riesgo islamista", con la propuesta de revocación
de la 2ª Cámara Parlamentaria, reforma de las leyes electorales,
reconsideración de la división en circunscripciones y la
organización de elecciones a su debido tiempo (fijadas para el
2002).
Escenario 2:
Ciertos polos de la nueva izquierda dirigen la acción para reunir
las condiciones de su iniciativa, y dicen ser el punto de partida de una
propuesta anhelada "fuera de la lucha de clases" para consolidar
la democracia. Pero en la escena política existe una ausencia de
alternativas para ejercer la negociación con el rey, velando para
que exista un dirigismo del Partido de la Unión Socialista (especialmente)
en la presidencia del gobierno.
La meta es la elaboración de un documento constitucional, llamado
transitorio, que presente el pacto de las fuerzas de la izquierda y los
islamistas conocidos como moderados, quienes han dado su opinión
positiva sobre el régimen y la cuestión del Sahara.
Escenario 3:
El programa que propone Vía Democrática en esta etapa, por
un pacto con las fuerzas de la izquierda y aquellos que se basen fundamentalmente
en una vía dinámica militante y participativa, unida a las
preocupaciones de amplias multitudes y que tenga como meta el cumplimiento
de las condiciones razonables que se puedan realizar. Puede identificarse
con el lema "acuñar una constitución democrática
que se inspire en la voluntad popular como única fuente de soberanía
y poder". Y este lema no es posible que se realice con una negociación
en ausencia del pueblo o partiendo de procedimientos selectivos e hipótesis
incompatibles para entender los deseos del pueblo.
La generalización de la nueva dinámica, con la que será
posible cubrir pactos objetivos a nivel político, tiene que priorzar
la gran importancia del proletariado, en particular, y de la opinión
pública, en general, siendo de la mayor importancia que se verifiquen
las prioridades y etapas siguientes:
1. Defensa de las libertades públicas y de su ejercicio.
2. Liberación de quienes han sufrido secuestros políticos
y que aún perduran y entrega de los restos mortales de los difuntos,
con persecución judicial de todos los implicados en la perpetración
de crímenes políticos y económicos, que ha dado pie
a una ideología que se resume en "la falta de escape ante
los obstáculos".
3. Seguimiento de los informes sobre la disipación del patrimonio
de todas las instituciones públicas y recuperación de los
bienes del pueblo, junto con el castigo a los responsables.
4. Apoyo a las luchas laborales contra el cierre ilegal de las instituciones
productivas y los despidos masivos, que contradicen la legislación
laboral en vigor.
5. Impulso de los derechos de la mujer, desde una visión progresista,
de acuerdo a los documentos internacionales sobre derechos humanos.
6. Implicación real en la lucha y en la creación de cuadros
sindicales dentro de la universidad y de la juventud estudiantil, situando
a la enseñanza como una de las herramientas fundamentales para
el desarrollo sostenible.
7. Hacer frente a la enajenación de las tierras del estado por
propietarios particulares, así como al control de los recursos
hidráulicos por los colonos y a las agresiones del medio ambiente.
8. Supresión del control oficial de la información y lucha
por su apertura.
9. Hacer frente al liberalismo salvaje y limitar la subordinación
del país a los círculos del capitalismo mundial y, especialmente,
en lo relativo al retroceso de los sectores estratégicos.
10. Limitar las prerrogativas del Ministerio de Interior. Creación
de un ministerio específico para las instituciones y colectividades
locales y rechazo del despotismo y de la tutela sobre los trabajadores
y a la población en general.
11. Establecer una garantía real para un sistema de descentralización
del poder, que tome como fuente de respeto a las especificidades culturales,
personales e históricas diferenciadas, dejando el máximo
margen posible para la puesta en marcha autónoma.
12. Establecimiento de una reforma agraria que reintegre a los agricultores
todas las tierras y recursos hidráulicos de los que despojaron
a sus antepasados.
13. Poner límite a la deuda externa.
14. Exigencia de la disolución de los dispositivos secretos implicados
en secuestros y detenciones políticas.
Esta dinámica contribuirá a la creación de una corriente popular democrática que genere un cambio en el programa de las fuerzas de la izquierda, como también ayudará de
forma fundamental a la evolución de las fuerzas vivas dentro de
los partidos nacionalistas y, por consiguiente, contribuirá a la
creación de un eje democrático, dinámico y activo
fuera de la Kutla -que ya cumplió su papel- con la participación equilibrada de los sectores y sensibilidades democráticas.
Este eje democrático y dinámico trabajará para lanzar el debate constitucional sin censura, ni tabúes para la
discusión popular, pues el tema constitucional actúa a modo
de piedra angular en cualquier transición democrática por
medio de elecciones libres y ecuánimes.
*Nota de Redacción: Vía Democrática es la
principal organización política de la izquierda alternativa
marroquí, caracterizada por su posición crítica en
relación a la monarquía y al papel del Majzen (estructura
mafiosa, clientelar y de corrupción alrededor del poder constituído).
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