El Colectivo CRISTIANOS POR EL SOCIALISMO se hace esta pregunta, porque una cosa es la versión oficial en esta quinta visita a España, y otra la que ofrecen los hechos. Según la primera, el objetivo era canonizar a 5 beatos españoles. Parece que esta protocolaria visita a Madrid ha estado cuidadosamente urdida por la Conferencia episcopal española, para “poner las cosas en su sitio”. Por ejemplo, Gescartera, las inversiones de algunas diócesis en paraísos fiscales, los reiterados despidos de profesores de religión, las clases de religión católica en un país constitucionalmente aconfesional, la negativa del gobierno a admitir el grito del Papa contra esta Guerra de Irak, etc.

Desde la última visita han ocurrido muchas cosas graves, entre ellas la Invasión de Irak por la coalición de EEUU Inglaterra y España. El papa ha manifestado su opinión contundente al mundo entero de rechazo a esta guerra. En su visita a este país no podría pasar desapercibida su postura antibelicista. Y la clara posición de Aznar y su gobierno a favor de esta invasión. Pero ha prevalecido el protocolo diplomático del Vaticano, que no quiere mostrar su desacuerdo con el presidente Aznar. ¿Dónde ha quedado el objetivo pastoral de su viaje?. No hemos oído ningún mensaje evangélico. Y sí hemos presenciado las recepciones privadas al Rey y al presidente del gobierno con toda su familia. El papa no quiere lios, aunque caiga en serias contradicciones que le quitan autoridad moral y real. Tampoco queda nada claro la separación Iglesia-Estado, sino lo contrario, la unión del Trono y el Altar, el Papa y el Rey juntos. El Papa actúa como si estuviera pisando un territorio de religión católica estatal. El Papa invita a custodiar y renovar con orgullo la identidad católica de España y a defender en Europa las raíces cristianas. ¿Se olvida que además tiene otras raíces como la musulmana, judía, renacentista, etc.? ¿Es un rechazo al ecumenismo que proclama en otros ámbitos? Al mismo tiempo, como cristianos deseamos se vayan superando los fundamentalismos islámicos, pero también el fundamentalismo cristiano que está apoyando al presidente Bush en su política imperial y de guerra permanente contra los Estados disidentes, con la finalidad de establecer un orden mundial injusto e
inmoral en donde los pueblos de la Tierra queden sujetos a los dictados e intereses de Washington. El mensaje bíblico siempre ha sido contrario a la
dominación imperial,

La organización de esta visita ha estado en manos de los movimientos cristianos más conservadores, como los Legionarios de Cristo, Comunión y Liberación, los Neocatecumenales, inclusive el Opus. Y se ha arrinconado a los cristianos de base que son los que han estado manteniendo constantemente el No a la Guerra. No podían estar juntas estas dos posiciones. Nos hemos quedado con las ganas de oir un mensaje de perdón que podría restañar las heridas aun sin cicatrizar de la Guerra Civil española. En ningún momento aludió a los mártires del bando perdedor y la represión posterior bajo el régimen franquista. Era el momento oportuno para que el Papa pidiera perdón en nombre de la Iglesia Jerárquica española. Se sigue con el rechazo vaticano y jerárquico a una de las “dos Españas” del pasado siglo.

Madrid, 11 de Mayo de 2003