AMENAZADA en COLOMBIA
por José Manuel Martin Medem
Para Codo a Codo


Anoten su nombre: NATALIA SPRINGER. Es la investigadora judicial amenazada de muerte por la mafia de Colombia. Una mafia tan poderosa como invisible que utiliza al gobierno, el Parlamento, la policía, las Fuerzas Armadas y los paramilitares para imponer su impunidad política y económica en alianza con el gobierno de Estados Unidos. Si algo le pasa, no se olviden de que los más poderosos de la economía colombiana le han ofrecido lo que quiera a cambio de que se calle.

Mi amiga NATALIA SPRINGER ha conseguido por primera vez las pruebas para llevar a los tribunales a las compañías bananeras de Colombia y de Estados Unidos. Y no sólo por financiar a los grupos paramilitares sino por utilizar esa complicidad en una política corporativa que aumenta sus beneficios mediante el control del territorio, la persecución de los sindicatos, la reducción de los salarios y el blanqueo de las peores ganancias.

"Todas las compañías bananeras nos pagaban, los bancos participaban en el lavado del dinero del narcotráfico y todos los sectores estratégicos estuvieron comprometidos", ha reconocido el comandante de los paramilitares, Salvatore Mancuso, en una conversación de seis horas con Natalia Springer. Lo que Mancuso le ha contado a la investigadora demuestra que los paramilitares aplicaban el terrorismo de Estado que les encargaron los poderes políticos y económicos de la mafia de Colombia.

Natalia tuvo que protegerse con un chaleco antibalas y aceptar el siempre inquietante amparo de una guarnición militar cuando un confidente advirtió que un sicario tiene el encargo de matarla. Tuvo que salir temporalmente de Colombia pero regresa para reanudar sus investigaciones.

Si algo le pasa, también serán responsables, además del presidente Uribe, los gobiernos que como el de Zapatero aceptan la impunidad en Colombia a cambio de los buenos negocios de las empresas españolas.

Al finalizar de escribir estas líneas, me llegó el mensaje siguiente :

Queridos Amigos,

Esta mañana, el periodico El Tiempo reveló una lista de personas cuyas comunicaciones estaban siendo interceptadas por la Policia de manera ilegal. Junto a otros funcionarios y periodistas, mi nombre aparecio en esa lista. La noticia ampliada la pueden encontrar en www.eltiempo.com ; a la lista se puede acceder directamente en el link: http://www.eltiempo.com/justicia/2007-05-31/ARTICULO-WEB-NOTA_INTERIOR-3577014.html

Les escribo porque ustedes son algunas de las personas que mas admiro y cuyo criterio y ejemplo ha sido de gran auxilio para mi en tiempos de dificultad. La cuestion que quiero consultarles es su opinion sobre este asunto. No estoy buscando rasgar vestiduras. Estos son gajes del oficio y la realidad de los conflictos nos demuestra que se trata de una practica persistente aun si ilegal. Tampoco es la primera vez que me pasa.

Evidentemente que, tratandose de una admision oficial y dada la gravedad del asunto, las opciones legales son mas o menos claras. Pero yo me hago otras preguntas. Estoy pensando en los mismos terminos que describia en la columna pasada: el ejercicio de la verdad guarda mas relacion con el futuro que con la exploracion de los hechos del pasado. Frente a toda la barbarie que 'descubrimos' la gran pregunta es, Y ahora, que hacemos?. Seguir matandonos?. Las conclusiones que saque de la entrevista de Mancuso siguen rondando mi cabeza. El problema de Colombia no se reduce a la pregunta de qué hacer con los gatilleros. Tenemos un pais fragmentado, plagado de mafias, institucionalmente arruinado, exageradamente irritado y empobrecido por decadas de una guerra inutil y terriblemente costosa.

Esta mañana he recibido multiples comunicaciones. Esas comunicaciones revelan el estado del país, radicalizado y envenenado por la rabia. La gestion de este episodio, por supuesto, es muy importante. Quiero saber, Que piensan?

Escucho sus opiniones.

Un saludo muy pero muy especial,
NS