Editorial, Junio/Julio 2008

El presente boletín aborda el análisis crítico de dos fenómenos interrelacionados y que marcan de forma determinante el contexto de crisis socioeconómica que parece extenderse ya a escala global: el fin de la era del petróleo barato; y la emergencia alimentaria.

Los combustibles fósiles han sido la fuente fundamental de energía de la sociedad industrial, y en la actualidad se estima que representan en torno al 85% de toda la energía comercial utilizada en el mundo. En este sentido, existe un creciente consenso a la hora de resaltar la imposibilidad de mantener el metabolismo de las sociedades más avanzadas con estas fuentes de energía, debido a dos factores: la perspectiva del progresivo encarecimiento del petróleo, en un contexto en el que ya se ha rebasado su “pico máximo”(*); y la aceleración del cambio climático, que tiene una de sus causas determinantes en los gases emitidos a la atmósfera como consecuencia de la quema de combustibles fósiles.

Las respuestas planteadas ante este escenario han incidido fundamentalmente en el lado de la oferta, es decir: en la búsqueda de nuevas fuentes de energía sustitutivas a medio plazo del petróleo (sin plantearse soluciones del lado de la demanda, que pasarían por la construcción de un modelo de sociedad alternativo que fuera menos depredador de los recursos naturales del planeta).

Así, diversos gobiernos del primer mundo -e incluso algunos dirigentes sindicales- han reabierto el debate sobre la utilización de la energía nuclear. Otros han planteado, con menor vigor, la posibilidad de explorar el desarrollo de energías renovables. Todo ello combinado con la búsqueda desesperada de nuevos yacimientos que aseguren la disponibilidad de nuevas reservas hasta ahora no explotadas, como en el caso de las zonas -hasta ahora- protegidas de Alaska, o incluso en los golfos de Cuba…

Por otro lado, se han planteado alternativas diferentes entre las que destaca la utilización de los biocombustibles. Una alternativa de la que el gobierno de Lula se ha convertido en abanderado, y que incluso ha sido defendida por parte del movimiento ecologista como forma de transición hacia un modelo energético más sostenible.

La creciente demanda de biocombustibles ha generado, sin embargo, dos consecuencias sociales particularmente graves: la utilización de una parte progresivamente mayor de la superficie agrícola del tercer mundo para la plantación de cultivos energéticos, destinados al consumo de las sociedades más avanzadas (restando así suelo para la producción de alimentos); y el encarecimiento del precio de los alimentos. Todo ha ello ha contribuido a agudizar de forma acelerada la emergencia de una nueva crisis alimentaria a escala mundial, que ha explotado de forma dramática en diversos países del mundo. Los artículos de Ramón Fernández Durán y Oscar Carpintero incluidos en este boletín analizan con rigor las diferentes dimensiones relativas al debate sobre el modelo energético y sus consecuencias para la sociedad actual. Carlos Taibo, por su parte, aborda la crisis alimentaria; un tema que también es objeto del manifiesto de diversas organizaciones campesinas. Finalmente, incluimos el enlace al Encuentro Social Alternativo convocado por diferentes organizaciones sociales como protesta a la Cumbre de las grandes empresas petroleras celebrado en Madrid a finales del mes de junio.

Además de este tema, en el boletín se incluyen dos artículos en los que se abordan situaciones de conflicto que se están desarrollando en dos países latinoamericanos, concretamente: el paro impulsado por las grandes empresas agro-exportadoras en Argentina; y el enfrentamiento planteado por algunas regiones contra el gobierno de Bolivia presidido por Evo Morales. En el caso de Argentina incluimos el documento de la Unión Campesina del Chaco en torno al conflicto, porque además de claridad lleva en cada una de sus palabras la precisa idoneidad que pueden aportar los campesinos y los pueblos originarios. Pablo López Waisman realiza un cuadro de situación boliviano resultante de los diferentas consultas autonómicas y segregacionistas.

Evo Morales es precisamente el autor de la carta abierta que publicamos, y en la que realiza una firme denuncia contra la Directiva de la vergüenza adoptada por los gobiernos de la UE. Una norma que supone un notable endurecimiento de las políticas contra los inmigrantes y cuya aprobación ha contado con el apoyo, entre otros, del gobierno de Zapatero y los europarlamentarios del PSOE (con las excepciones de Josep Borrell y Ramon Obiols).

La inmigración vuelve a tener presencia en este nuevo número de Codo a Codo, y es abordada por Andrea Benites-Dumont como la situación creada por este Directiva, y los condicionantes sistémicos en que los seres humanos son tratados como objetos desechables según lo dicten los caprichos del capital y la soberbia de los poderosos.

El expolio llevado a cabo por las empresas españolas en América Latina, es desnudado por José Manuel Martín Medem, más allá de la hipocresía política que se sucede indefinidamente desde esta metrópoli monárquica.

Sobre el momento de conflictividad en Argentina, la declaración de los pueblos originarios nos descubre una perspectiva

El artículo de Fernando Rocha plantea otra muestra de la intensificación del proyecto neoliberal de la UE, como es la propuesta de nueva Directiva sobre tiempo de trabajo. Una norma cuya ratificación por el Parlamento europeo supondría un retroceso de varias décadas en las conquistas alcanzadas por las luchas del movimiento obrero.

En este nuevo número, saludamos el aporte que Rosa Salgado realiza sobre dos publicaciones de indudable actualidad, el primero de ellos : Escenarios de crisis: fracturas y pugnas en el sistema internacional, anuario del CEIPAZ-Fundación Cultura de Paz editado por Icaria, y selecciona algunas de las principales tendencias en el sistema internacional y ofrece análisis críticos y propuestas para una mejor comprensión de las dinámicas que afectan a la realidad mundial. El segundo es un libro de Enriqueta de la Cruz, “Nada es lo que parece” un trabajo periodístico en sí mismo, que utiliza la literatura para contarnos de forma directa y descarnada, las relaciones entre la política, las grandes empresas y los medios de comunicación con la complicidad en muchos casos de los sindicatos. (Ver: Imaginando alternativas)

Finalmente, incluimos dos textos sobre temas habituales en nuestro boletín, como son la defensa de los servicios públicos y la denuncia de las malditas agresiones fascistas.
......

Cuando volvamos a encontrarnos en septiembre, deseamos con una intensidad imposible ser medida ni cuantificada, se aventen otras noticias, otros hablares que nos cuenten que la empecinada decisión por la justicia avanza clara, que los desposeídos de todo comienzan a recuperar alguito, que la dignidad y la solidaridad son valores en alza imparable, y que la libertad es el aire que respiramos “trece veces por minuto”….

En Codo a Codo no renunciaremos jamás al derecho de soñar.

___________________________________________________________________________________________________

(*) Se denomina así el punto a partir del cuál ya no es posible incrementar más la producción de petróleo.