CARTA DE ABANDONO DE APC POR PARTE DE XARXANETA

Con su participación en la creación de IPANEX como instrumento para la integración de diversos nodos del estado español en APC, (Asociación para las Comunicaciones Progresivas), en Xarxaneta apostamos en su día por potenciar la realización de tareas en el seno de una organización mundial, cuyos fines se orientaban al desarrollo de las Nuevas Tecnologías de la Información, como herramienta de Lucha por la Paz, los Derechos Humanos, la Libre Expresión de los Pueblos, la Justicia Social, la Defensa del Medio Ambiente..., etc.... (todos ellos objetivos que figuran en los estatutos de la propia APC).Los mismos fines que nos proponíamos alcanzar en el ámbito de nuestro trabajo, en la Asociación Xarxaneta, como miembro de la Federación IPANEX. Tanto entonces como hoy en día, en Xarxaneta seguimos tratando de trabajar para que las Tecnologías de la Información se conviertan en una herramienta que nos permita a nosotros y a nuestros usuarios alcanzar los fines que hemos mencionado y que nos identificaban plenamente con APC, desde nuestra membresía de pleno derecho en IPANEX.

Junto al trabajo desarrollado y no con menor importancia, siempre hemos creído que los usuarios de IPANEX y Xarxaneta encontraban en nuestra pertenencia a APC una plataforma telemática de trabajo que les ampliaba las posibilidades de colaboración y cooperación con usuarios y organizaciones en todo el planeta.

Durante los últimos cuatro años, Xarxaneta ha participado activamente en el debate interno de APC respecto a cuestiones que siempre nos han parecido esenciales y mínimas para la existencia de una organización como APC, poniendo especial énfasis en la necesidad de una estructura organizativa que facilitase el debate abierto y unas líneas de trabajo que primasen la consecución de los objetivos de APC (objetivos que Xarxaneta adoptaba como propios) sobre cualquier otra consideración. Siempre hemos pensado, y así lo hemos expresado en aquellos sitios donde se recibía nuestro mensaje, que APC podía y debía jugar un papel clave en el desarrollo de Internet que impidiese, en la medida de lo posible, que la Red de redes se convirtiese en un instrumento más de dominación y segregación, en un instrumento que ampliara aún más si cabe, la brecha entre un Norte privilegiado y un Sur desfavorecido. Esta percepción de APC nos ha llevado a creer que APC era algo más que un simple grupo de técnicos informáticos (tekies), o una simple plataforma tecnológica a disposición de las ongs y personas asociativas. En la reunión de Itala, Xarxaneta (Ipanex) apostó por dar mayor participación a los sujetos colectivos frente a lo que entendía como una excesiva dependencia de los personalismos y un exceso de "burocracia" en APC. En la reunión de Oaxaca, Xarxaneta (Ipanex) apostó fuerte por una profunda reestructuración de APC que se tradujese en una mayor exigencia de participación y de implicación en el desarrollo de APC a los propios nodos, a través de un debate abierto y transparente que primase para este periodo (hasta la nueva reunión de Hungría) el establecimiento de unos posicionamientos claros en relación a la consecución real de los fines que APC mantiene en sus estatutos y que hemos mencionado al principio de este texto.

APC ha derivado, a nuestro juicio, en una organización autista e incapaz de interpretar la realidad a la que cada día sus miembros deben hacer frente, en la que priman consideraciones economicistas revestidas de formalidad, y brilla por su ausencia cualquier consideración política que no sea la pura supervivencia a (casi) cualquier precio. Basta repasar para constatar lo anterior, cualquiera de las conferencias o listas internas de APC. (Por ejemplo la lista no abierta de nodeheads).

En consecuencia de todo lo anterior, Xarxaneta ha decidido no seguir participando y por tanto desvincularse de APC, y proponer a Ipanex la renuncia a la membresía de APC, manteniendo su compromiso por hacer válidos los objetivos y fines que en su día APC escogió como los elementos identificativos de su práctica diaria, elementos que Xarxaneta e Ipanex hicieron suyos, y que hoy entendemos que han sido gravemente olvidados por la propia APC. Para el caso de que IPANEX decida continuar en APC, Xarxaneta renuncia a su pertenencia a IPANEX.

Desde nuestro punto de vista, la necesidad de articular una organización internacional que asuma los fines fundacionales originales de APC con hechos prácticos, (lo que lleva implícita la adopción de actitudes políticamente adecuadas que permitan el cumplimiento de los objetivos y fines señalados), sigue plenamente vigente, y por ello nuestro compromiso de respaldar e impulsar desde Xarxaneta cualquier proyecto de organización actual o futura, que decida trabajar en esa línea.