Detenido por agresión sexual a una niña de cuatro años a la que cuidaba

El arrestado, de 22 años de edad y familia de la víctima, intentó negar los hechos y llegó a atribuir a la pequeña haberse bajado ella sola la ropa interior

teresa domínguez valència 15.04.2017 Levante.emv

La Policía Nacional ha detenido en València a un joven de 22 años de edad por agredir sexualmente a una niña de cuatro años a la que estaba cuidando mientras su madre trabajaba. El acusado, primo segundo de la menor, negó los hechos, pero admitió que estaba en la misma habitación que la pequeña «viendo películas en la tablet».

Los hechos sucedieron en València, en un barrio de la ciudad que Levante-EMV omite para preservar por completo el anonimato de la menor, cuando la madre de la niña le pidió a su primo carnal que se quedase con la pequeña mientras ella se iba a trabajar. De hecho, no era la primera vez que la niña se quedaba al cargo de su primo.

Fue la pequeña, a pesar de su corta edad, quien relató lo sucedido a su madre a la mañana siguiente, cuando el agresor sexual ya se había ido de casa. La niña detalló los abusos a los que fue sometida, que se produjeron en la hora escasa en que la pequeña estuvo a solas con el sospechoso, e incluso le respondió a su progenitora que nunca antes había ocurrido nada similar.

La madre, para cerciorarse por completo, fue a pedir explicaciones a su primo, quien negó los hechos y acusó a la niña de haberse quitado ella sola la ropa interior. Al escuchar esa explicación, la mujer ya no tuvo dudas: llamó de inmediato a la Policía Nacional y denunció la agresión sexual sufrida por la pequeña, que fue trasladada por varios agentes a un hospital de València.

Los pediatras que la atendieron refrendaron por completo la acusación e informaron a los investigadores del Grupo de Menores (Grume) de la Policía Nacional de Valencia de que el relato de la pequeña y la forma en que lo explicaba hacía completamente creíble la agresión.

Además, la compañera de piso de la madre, que sí estaba en casa cuando ocurrieron los hechos, ratificó a la policía que escuchó los llantos de la menor, pero no intervino porque se calló al poco y atribuyó ese lamento a una pesadilla. Los agentes del Grume investigan ahora si se ha producido algún episodio de abuso anterior con la niña, con la que el acusado ha coincidido en alguna ocasión en casa de sus abuelos cuando la madre la ha dejado en ese domicilio por necesidades laborales.