Abortos Airlines

Viaje al pasado… o al futuro

24-01-2014 Público

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Medio centenar de mujeres escenificaron ayer, en el aeropuerto de Sevilla, lo que podría ser perfectamente un capítulo de Cuéntame cómo pasó, si no fuera porque puede volver a ser la realidad que vivan las mujeres españolas que no quieran ser madres.

Una azafata dirige una fila india de mujeres en dirección al mostrador de Abortos Airlines, la compañía aérea encargada de que las jóvenes lleguen a una clínica londinense para poner fin a un embarazo no decidido que en España será ilegal si prospera el anteproyecto de ley aprobado semanas atrás en el Consejo de Ministros.

Al lado de la azafata, una intérprete para ayudar a las mujeres que lo necesiten a defenderse con el inglés a su llegada a la capital británica. Y detrás de la intérprete, jóvenes veinteañeras embarazadas y cargadas con sus maletas en las que se leen alegatos a favor del derecho a decidir de las mujeres sobre su propio cuerpo: “Nosotras parimos, nosotras decidimos”, “Derecho al aborto: volvemos al pasado” o “Embarque a Londres para mujeres de primera clase”.

Las mujeres, unas jóvenes y otras no tanto, consiguieron arrebatar el protagonismo a las pantallas de salidas y llegadas del aeropuerto hispalense y ganarse el guiño cómplice de los viajeros y personal aeroportuario. La performance no pretendía nada más que de “denunciar que España está volviendo a los años 60”, según Teresa García, la portavoz del colectivo Ágora Feminista, una plataforma de organizaciones de mujeres que tiene como objetivo “parar esta ley sea como sea”.

Al viaje al pasado -o al futuro, según se mire- también asistieron mujeres de PSOE e IU para mostrar todo su apoyo al colectivo Ágora Feminista y rechazo a la Ley Gallardón que, de no evitarse, convertirá a España en una reserva espiritual del catolicismo más integrista. De pasar a estar en el entorno de países tan progresistas como Suecia o Dinamarca, Gallardón situará la libertad de las mujeres a la altura de Estados ultracatólicos como Irlanda o Malta, donde abortar es casi imposible.

Ana Isabel Jiménez, secretaria de Igualdad del PSOE de Sevilla, exigió la retirada “inminente” de la Ley Gallardón y manifestó que su partido ya trabaja para presentar mociones en contra de las intenciones del PP en todos los ayuntamientos, diputaciones y parlamentos autonómicos del Estado.

Lucía Márquez, portavoz de Izquierda Abierta y miembro de la dirección andaluza de IU, dejó claro que, si el anteproyecto legislativo es finalmente aprobado, el Ejecutivo andaluz “recurrirá ante el Constitucional lo que supone un atropello a la libertad de las mujeres y a las arterias principales de la democracia”.

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El medio centenar de mujeres que ayer, de manera simulada, irreverente y original se fueron a Londres a poner fin a su embarazo, volverán a protagonizar más iniciativas de este tipo: “No vamos a tolerar que Gallardón use nuestro cuerpo para su política de derechas”, aseguró la portavoz de Ágora Feminista, megáfono en mano, a los pasajeros que esperaban la salida de su vuelo.

Al terminar la escenificación, las mujeres participantes se hicieron fotos y no pocos viajeros solicitaron inmortalizar el momento con el grupo: “No se preocupen ustedes por las fotos, a partir de noviembre esta imagen será habitual en todos los aeropuertos españoles”, le espetó una joven indignada que llevaba un cartel de la compañía Abortos Airlines que conduce directamente al siglo pasado. O al futuro, Gallardón mediante.