INCHIÑ TAIÑ DUGU


WEFTUN, a partir de esta edición, pasa a constituirse en la voz oficial de la Coordinadora Mapuche Arauco Malleco, y pretende ser la expresión de lo que está renaciendo, como es ahora el renacer de los kona y de la lucha frontal de los mapuche contra un sistema que nos sigue oprimiendo. Las distintas formas de opresión se expresan actualmente en el fuerte desarrollo del proceso de inversión nacional y transnacional en nuestro wall mapu, en donde el resurgir de la Lucha Mapuche tiene como objetivo evitar la desaparición de nuestro Pueblo y por ello su importancia.

WEFTUN surge en momentos en que nos encontramos con nuestra organización consolidada y con una proyección política e ideológica hacia nuestro Pueblo, en un contexto socio político que estará fuertemente influido por un desarrollo cualitativo mayor en la lucha mapuche y caracterizado por las contiendas electorales con su correlato de promesas en el marco de un Estado nación administrado por "seudo demócratas", que persisten en la mantención de las estructuras de poder de dominación hacia la sociedad chilena en general y hacia nuestro Pueblo Mapuche en particular.

Entonces, WEFTUN surge como una necesidad de dar a conocer más ampliamente nuestros planteamientos políticos y nuestra experiencia en los procesos de recuperación de tierras y de control territorial, desarrolladas en el marco de una propuesta más integral. Nuestros desafíos específicos serán dar a conocer nuestros planteamientos político - estratégico que han sido plasmados en algunos documentos internos en ciertos períodos de nuestra lucha, como también socializar nuestra experiencias en lo orgánico - político, estratégico, sobre la base de las recuperaciones de tierras y el ejercicio del control territorial mapuche, en donde hemos basado nuestro camino hacia el territorio y la autonomía. Dichos desafíos será sobre la base de artículos, entrevistas, seguimientos e información, basados en la entrega de contenido directa de los lonko, werken pu kona de la Coordinadora. Asimismo, iremos desarrollando algunos temas que sean necesarios abordar tanto por la coyuntura política que enfrentemos así como de las tendencias del proceso.

Lo anterior se desarrollará sobre la base de cuatro objetivos centrales que nos hemos planteado: en primer lugar, contrarrestar el bloqueo y campaña comunicacional de fuerte contenido ideológico que llevan a cabo las clases dominantes y la administración del Estado en contra nuestra, para lo cual cuentan con todos los medios de comunicación masivos a su alcance, como ocurre con la prensa oficialista que, en una suerte de combate ideológico, ha pretendido desvirtuar nuestros planteamientos, crimininalizar nuestras acciones o incluso silenciar a la CAM.

En segundo lugar, combatir el seguidismo de las organizaciones mapuche sistémicas que pretenden capitalizar el conflicto y que sólo se han dedicado a oficializar salidas en el marco de la dominación, a través de acuerdos, pactos o mesas de diálogo, logrando sólo provecho político y económico de las luchas de las comunidades mapuche movilizadas.

Y como tercer objetivo, desenmascarar a "aquellos" que han pretendido interpretar descaradamente nuestra lucha sin tener la más mínima participación en ella, atribuyéndose la representatividad de nuestros planteamientos, contenidos y experiencia, entre los cuales se encuentran algunas organizaciones mapuche como también algunos sectores de izquierda. Además estas organizaciones de izquierda ven en nuestra lucha la posibilidad de reconstruir sus proyectos de lucha frente al sistema, pero por su carácter en un esquema lógico occidental winka, no nos interpeta.

Por último, nos desafiamos en ser un instrumento - embrionario tal vez - que contribuya en la construcción de un planteamiento político, ideológico, filosófico y espiritual propio que nuestro Pueblo Nación requiere, para transitar en el gran proceso de Liberación Nacional Mapuche.

KUIFIKE DUGU

A continuación presentamos le historia de la Coordinadora Arauco Malleco, elaborado a partir de la memoria de sus principales actores:

Lonko, Werken y Kona, quienes en una amena conversación hablan de lo vivido, en una actitud similar a como nuestros antiguos lo hacían. Por la importancia del proceso que hoy día se está llevando adelante, es que utilizando las distintas posibilidades que ofrece la tecnología, WEFTUN entrega para ustedes algunos de los pasajes más importante de esta historia.

ANTECEDENTES GENERALES

Para entender le formación de la Coordinadora Arauco Malleco (CAM), es necesario comprender un proceso de convergencia, de discusión, de práctica y de lucha de una porte del Pueblo Mapuche, cuyos primeros antecedentes se remontan a la década de los 90.

En este período reaparecen las luchas de tierras usurpadas, decimos "reaparecen", pues desde que el Estado nos usurpó las mejores tierras y nos arrinconó en los peores espacios o de más difícil sobrevivencia, los problemas siempre han estado.

Entre los principales sucesos, encontramos el proceso llevado adelante par la Comunidad Pascual Coña, ubicado en la VIII región del país, comuna de Cañete, ribera poniente del lago Lleu Lleu. El 12 de octubre de 1994 esta comunidad declara el conflicto en contra del empresario Osvaldo Carvajal, quien mantiene tierras usurpadas pertenecientes a la comunidad en la Hacienda Lleu Lleu. Posteriormente el 23 de diciembre de 1996, cuando todo giraba en torno a los "fiestas navideñas" winka de ese año, la comunidad Juana Millahual ubicada en la VIII región, del sector Rukañanco de la comuna de Contulmo, ribera oriente del lago Lleu Lleu, declara su conflicto por tierras usurpadas en contra de Forestal Mininco S.A. El 12 de octubre de 1997 los comunidades de Pichi Lonkoyan y Pilin Mapu, en la comuna de Purén, IX región, se unen para iniciar la recuperación del Fundo Pidenco, usurpado por Forestal Mininco S.A. En 1998 en el sector de Colcuma, en la comuna de Tirua y en Kuyinco, fundo usurpado por Forestal Arauco, ubicado en la comuna de Los Alamos, ambas pertenecientes a la VIII región, comienzan o ser recuperados por las comunidades afectadas.

En 1996, debido a la existencia de las luchas territoriales, rnapuche pertenecientes a distintas comunidades en la zona de Arauco, en especial los dirigentes que encabezaban los conflictos, deciden conformar lo Coordinadora Territorial Lafkenche, como una forma de apoyar lo que estaba sucediendo. En opinión de algunos de sus protagonistas, esta instancia tan solo fue un tránsito en el camino hacia las actuales condiciones, pues a la fecha no existía la claridad que hoy día se posee.

De la sucesión histórica mencionada, es necesario detenerse en el proceso desarrollado por las comunidades Pilin Mapu y Pichi Lonkoyan, por su gravitación en el desarrollo de los acontecimientos. En el transcurso de los sucesos se evidencian dos posiciones, una sostenida por un grupo reducido de personas de Purén y Lumaco, que planteaba contrastar al sistema y los daños provocados, a través de la ley Indígena y la administración que ellos pudieran hacer, de distintos proyectos dirigidos a estas u otras comunidades; la segunda impulsada por la gente que provenía de Arauco, poseedores de una experiencia acumulada en el transcurso de los conflictos Lafkenche, planteaba contrarrestar a la primera, que era similar a otras organizaciones y comunidades que se encontraban sometidas y supeditadas a los direcciones y lineamientos de la institucionalidad vigente. Era necesario entonces demostrar de una manera práctica y teórica una alternativa distinta.

En este marco, por primera vez se elaboró una demanda territorial, sobre la base de la memoria histórica de los peñi y lamgen más antiguos, quienes transmitían los límites ancestrales de las comunidades, con este acto se rompe con la demanda tradicional de tierras que a la fecha se hacía sobre la base de los Títulos de Merced, pues los recuerdos superaban con creces a lo establecido en dichos documentos. La importancia de este hecho radica, en que se toma conciencia de la derrota histórica de nuestro Pueblo a fines del siglo XIX, en la mal llamada "Pacificación de la Araucania", donde surgen los Títulos de Merced, después de realizado el gran despojo de tierras mapuche a sangre y fuego a manos del ejercito chileno. Para estas comunidades seguir insistiendo en dichos títulos implicaba hacer un reconocimiento a dicha derrota y olvidar la memoria de los abuelos. La elaboración de la demanda territorial y la lucha en torno a ello superará la legalidad existente, no sólo por la demanda que allí se hacía o por los contenidos políticos expresados, además implicará una movilización de mayor calidad y decisión, más confrontacional, que incluso derivó en la creación de un cuadro distinto en la lucha mapuche a partir de la quema de los camiones el primero de diciembre de 1997.

La experiencia adquirida, cala hondo en el movimiento mapuche, surgirán las primeras iniciativas para conformar una organización que este directamente ligada con los conflictos, esta energía dará paso al primer encuentro de Tranakepe, en febrero de 1998. La Coordinadora Territorial Lafkenche, en un gran esfuerzo unitario convoca a todas las organizaciones mapuche, la mayoría responde: -el Consejo de Caciques de Osorno, el Consejo de Todas las Tierras y la Coordinadora de Organizaciones e Instituciones Mapuche de Temuco, conformada entre otras por la sociedad Liwen, Xen Xen, Aukinco Domo, Nehuen Mapu, Asociación Ñancucheo de Lumaco. De Santiago participaron Meli Witran Mapu y la Coordinadora Mapuche. Además asistieron a título individual algunos estudiantes mapuche del hogar de Temuco y del Pegun Dugun de Concepción, Incluso se contó con la presencia de una delegación indígena de Punta Arenas.

Fue un trawun dirigido por los Lonko de Arauco de abundante oratoria en mapudungun, se encontraban entre ellos, Polo Millahual, Carilao, Santos Reinao, Ñeculñir, mas el Werken José Huenchunao. De la reunión surgen algunos principios de preacuerdos y la decisión de hacer mas adelante un segundo Tranakepe, para continuar con los temas en discusión.

El segundo encuentro se realizaría el mismo año, a la salida de invierno, fue una reunión que desde un comienzo estaría caracterizada por problemas. Los criterios unitarios de sus promotores se mantenían, sin embargo comienza a visualizarse en la zona dos visiones, una de carácter más autonómico encabezada por la Coordinadora Lafkenche y otra más oficial liderada por el alcalde de Tirua Adolfo Millabur. Esta diferencia produjo contratiempos, un ejemplo fue que el internado al cual se había convocado, el mismo utilizado en el primer encuentro, fue negado por el edil, debiendo trasladarse en último momento al pueblo de Tirúa, este traspié provocó que mucho de los asistentes se perdieran retardando el inicio de la reunión.

En esa oportunidad el Consejo de Todas las Tierras sé automarginó y participaron: la Asociación Ñancucheo de Lumaco encabezado por los hermanos Reiman, Galvarino y Alfonso, Xen Xen, Aukinco Domo, Coordinadora Mapuche de la Región Metropolitana y Meli Witran Mapu.

La reunión fue dura, se dieron claramente dos bloques, uno encabezado por el alcalde Millabur que incluía a la Asociación Ñancucheo, Xen Xen, Aukinco Domo y la otra liderada por la Coordinadora Territorial Lafkenche, con apoyo de las organizaciones santiáguinas. La evidencia más clara de esta diferencia se expresó al final del encuentro, cuando la Coordinadora Lafkenche, señala que había mucho discurso mientras que en el fundo Kuyinco se estaba luchando, por tanto era necesario el apoyo, a este llamado sólo respondieron las delegaciones de Santiago y los miembros de las comunidades en conflicto, que potenciaría fuertemente el proceso desarrollado en Kuyinco.

A esta altura se transitaba a una ruptura en el movimiento mapuche, entre la posición oficialista y una más autonómica, que seguiremos desarrollando en el segundo número de WEFTUN.

 

TAIÑ KIDU RAKIDUAM

A continuación presentamos un extracto del documento elaborado en marzo del año 2000, donde hemos plasmado el PLANTEAMIENTO POLITICO-ESTRATEGICO DE LA COORDINADORA DE COMUNIDADES MAPUCHE EN CONFLICTO ARAUCO-MALLECO (CAM). Luego de hacer una síntesis diagnóstica, un balance de las movilizaciones mapuche del período, se hace referencia al proyecto estratégico de la C.A.M, a1 programa de lucha de la C.A.M. y a la Propuesta de la C.A.M. en la Actual Coyuntura, siendo esta última temática la que incluimos en nuestra primera edición de WEFTUN.

PROPUESTA DE LA C.A.M. EN LA ACTUAL COYUNTURA

Análisis de las propuestas:

No existe una propuesta única del Pueblo Mapuche como un todo y que vaya hacia el Estado chileno. Varias han sido y son las propuestas que se han levantado principalmente por organizaciones que se dicen representativas del Pueblo Mapuche, muchas surgen en el marco de la integración forzada y lo único que buscan es acomodar a sus dirigencias y de paso asegurar algunas migajas a los sectores mapuche representados. Otras propuestas son sobre la base de tratados de autonomía territorial, pero que también se enmarcan en la línea intervencionista del Estado y de otras instancias chilenas o internacionales que operan dentro de una lógica que no cuestiona al sistema y su institucionalidad. La mayoría recoge experiencias de otros pueblos originarios sometidos del continente que aceptan concesiones de tierras y ejercicio político, pero que no cuestionan al Estado y menos a los intereses y privilegios de los poderosos. Dichas propuestos no cuentan con una base de acumulación de fuerzas necesarias para sustentarlas y defenderlas, por lo que se hacen prácticamente inviables.

Ambos tipos de propuestas tienen una característica común y es su dependencia de contenidos ideológicos y políticos de inspiración winka, y lo que es peor; muchos de ellos son elaborados directamente por partidos políticos. Así se entiende que algunas organizaciones mapuche seudo autónomas, han planteado con gran acierto el problema, pero han sido incapaces de construir un proceso en tal sentido y sus esfuerzos terminan siendo absorbidos y utilizados por el Estado y el sistema de dominación.

Dentro de lo que es el movimiento mapuche tampoco existe consenso acerca de la necesidad de levantar una propuesta única, son muchas las diferencias en el pensamiento político y en la práctica, lo que nos impide ese logro. Hay que recordar que ya va más de un centenar de años de sometimiento político-ideológico que ha obligado a las organizaciones a ser dependientes y a utilizar prácticas políticas ajenas que terminan sujetando nuestra realidad a la realidad nacional chilena. Es así como muchas organizaciones eligen el camino de la integración, buscando en la institucionalidad vigente su participación y otros que optan por un trabajo internacional, principalmente para buscar recursos que de la causa mapuche se puedan obtener y/o porque sus dirigentes quieren figuración con claros intereses caudillistas personales. Otras organizaciones, ligadas a partidos políticos u organizaciones winka sujetan nuestra lucha a una interpretación y análisis de corte occidental tratando de sumarla a proyectos políticos que nos consideran como un sujeto social más de los oprimidos. En este sentido, indicamos que valoramos la intención de conducir el proceso de lucha de los pobres y oprimidos, pero que nuestro Pueblo tiene el derecho y deber de levantar su propio proyecto político.

En el último tiempo hemos observado como muchas organizaciones mapuche han levantado propuestas, como ya señalamos, pero la mayoría no hará más que reforzar la dependencia y dominación del Estado chileno con nuestro Pueblo y, por qué no decirlo, algunas son lastimeras al pedir recursos, otras son inviables al no contar con una fuerza social que las sustente y otras de corte intervencionista que serán funcionales al sistema. Decimos intervencionistas porque están ideadas para bajarle el perfil a los conflictos, desnaturalizar nuestra lucha, impedir la unidad de sectores consecuentes y restar de base social de apoyo a la C.A.M. Es por ello que las organizaciones Consejo de Todos las Tierras, Asociación Ñancucheo e Identidad Lafkenche, se han dejado instrumentalizar por los partidos políticos chilenos principalmente por el Partido Socialista (PS) y el Partido Por la Democracia (PPD), partidos que tienen como misión manejar el conflicto y/o ajustarlos a su concepción de sociedad y Estado que, a nuestro juicio, no responden a los intereses de los oprimidos sino que mantienen acuerdos para administrar el poder de dominación. Así se entiende la visita de Camilo Escalona al Estado de Chiapas -año 2000-, para buscar recetas del conflicto indígena, reforzando también líneas de tipo represivas y de inteligencia para frenar el movimiento indígena tanto en el ámbito nacional como continental.

Nuestra Propuesta

Nuestra propuesta rompe el esquema de la elaboración de un documento -demanda a secas- sino que es el resultado de un proceso de mayor confrontación de ideas y experiencias de nuestra condición y del futuro que queremos.

Nunca fue la idea de construir una propuesta y bajarla a las comunidades, sino que ésta se ha ido diseñando al calar de las luchas de éstas y con la participación de nuestros propios hermanos, y ese es la razón por la que la C.A.M. se sostiene, porque son las comunidades en conflicto quienes le dan sustento y dirección. Así se entiende que la fortaleza ideológica, política y espiritual lo tienen nuestros Lonko, Werken y Kona, porque son ellos los que día a día junto a sus comunidades, van reconstruyendo el pensamiento y la línea a seguir.

Así va quedando atrás la idea de que una orgánica se posicione por encima de las comunidades y las represente, instrumentalizando muchas veces sus luchas; así muchas de estas organizaciones terminan desvinculándose al no tener presencia real en las comunidades.

Cuantas son las experiencias de organizaciones mapuche que han surgido en medios ajenos a las comunidades, por ejemplo en las universidades o en las ciudades, y que están dirigidos por profesionales o seudo intelectuales que conducen a nuestros hermanos en los campos. Esta concepción trae consigo el estigma winka de hacer política, ya que estas organizaciones cohiben, manipulan e instrumentalizan políticamente, y en el fondo por qué no decirlo, existe un desprecio hacia los propios mapuche de comunidades, al no darles la posibilidad de participar de los procesos de lucha de manera
más integral, en donde sean ellos, los que viven las contradicciones, los que sostengan la línea y la dirección de sus luchas. Así se entiende que la C.A.M. este dirigida y compuesta básicamente por gente de comunidades y por hermanos sin tierra que han planteado seriamente el retorno, sobre la base de la lucha por la recuperación del territorio.

Siempre hemos planteado que las propuestas las diseñaremos y sostendremos luchando, hasta conseguir la fuerza necesaria para defenderla. También, hemos planteado que la propuesta es en primer lugar para nuestro Pueblo, para autoafirmarnos como tal y para lograr nuestra liberación. En segundo lugar, en momentos socio-políticos específicos será necesario levantar una propuesta acorde que responda a los argumentos de ejercitar nuestros derechos políticos y territoriales; será entonces el momento en que evaluaremos nuestras fuerzas y la voluntad política del gobierno de turno para llegar a acuerdos, pero siempre y cuando estos logros nos permitan seguir acumulando fuerzas hacia un proyecto más integral.

 

 

NUTRAMKALIEIÑ

A través de este espacio queremos dar cuenta de la visión, información y opinión que tienen aquellos mapuche que son parte real y concreta del proceso de recuperación de tierras y, más aún, son parte responsable de las acciones por la dignificación de nuestro Pueblo.

En esta ocasión conversamos con el Lonko de la comunidad Juana Millahual, del sector Rukañanco, de la comuna de Contulmo.

Esta comunidad desde hace varios años viene reivindicando tierras antiguas que de acuerdo a la versión de sus dirigentes comprenderían un total de 10.000 hectáreas que habían sido de propiedad de Juana Millahual. El conflicto se ha desarrollado principalmente contra la empresa Forestal Mininco S.A. quien tiene ahí plantaciones de eucaliptos. Reivindican según el Titulo de Merced 180 hectáreas del Fundo La Posada, más 70 hectáreas del predio Puerto Alegre, ambos en posesión de Forestal Mininco S.A.

¿Cómo se originó el conflicto en Rukañanco?

Primero, recurrimos a los tribunales alguna cantidad de años, apegados a los tribunales, con la idea de que a través de esa vía podíamos recuperar nuestras tierras y pasaron los años paulatinamente, y nosotros los mapuche seguíamos creyendo en esa solución, viendo las leyes, porque había esperanza y pasaron los años con 12 años de trámites en los tribunales y luego se generó el conflicto más directo, con las manos por decirlo así, por otra vía distinta a los conflictos que se están dando permanentemente en la lucha social. De acuerdo a la lucha social se han logrado cosas de acuerdo a esa vía nosotros creernos que son productivas y que ya no debemos confiar en los tribunales. Otra que a la comunidad de nosotros lo único que le ha resultado ha sido de esta forma ha sido productiva; también ha habido algunas ganancias económicas, hemos mejorado en ese aspecto. Con todo eso políticamente se ha difundido a través de nuestro Wallmapu en las comunidades, ya no hay otra alternativa de luchar por nuestras tierras por la vía social. Hoy día nosotros como Coordinadora llevamos el proceso y creemos en lo que hacernos, en lo que se está haciendo porque en los distintos puntos de Wallmapu ha habido logros y hoy día sigue creciendo nuestra lucha, con nuestros propios recursos.

Hemos generado un gran movimiento y nuestra gente, nuestros Lonko, nuestros Werken han superado muchas cosas.

Nuestra comunidad comenzó con movilizaciones a fines del 96 a principios del 97, y después de la quema de los camiones.

¿Por qué decidieron cambiar su forma de lucha?

Porque sabemos que hoy día no hay ninguna otra alternativo para el Pueblo Mapuche, porque han pasado cantidad de procesos por los tribunales y nos hemos dado cuenta, como comunidad, de que los tribunales hoy día son operados por los ricos prácticamente, por los poderosos, por los políticos, por eso no hay ninguna alternativa más. Porque nuestros füchakeche lo hicieron a través de los tribunales y montones de años pasaron...

Ahora nuestra forma de lucha cambió y entre las principales acciones desarrolladas están las de sembrar, controlar el espacio, explotar los recursos que tenia la forestal y eso más que nada. El control territorial lo hacemos evitando la entrada de nuestros enemigos, que no entren más los políticos, la intervención de gobierno, las forestales; que no vuelvan a entrar más las forestales a plantar pinos, porque es una forma de cuidar nuestro entorno, el espacio que hemos recuperado.

¿Cómo se expresa la relación con otras comunidades?

Hay mucha relación con las comunidades, con las comunidades de Tranicura, Lleu Lleu, Traiguén, de distintos sectores de la octava y novena región, que han conocido nuestro proceso, nuestra lucha y todas las comunidades están haciendo lo mismo que hicimos nosotros como primera comunidad de la comuna de Contulmo. A nosotros lo único que como mapuche nos resta es seguir recuperando tierra, controlando, trabajando, haciendo actividades productivas.

Hemos realizado grandes trawun, nguillanmawun, palín, kamarikun, conversaciones, intercambio de ideas, conociéndonos mutuamente y eso lo hemos realizado con muchas comunidades.


¿En qué situación se encuentran actualmente como comunidad?

Actualmente está interviniendo el gobierno a través de organismos pertinentes como la CONADI, pero eso es para envolar, para desviarle la rutina al proceso; es una cosa que ha hecho siempre el gobierno de intervenir, tramitar a los mapuche, hacerlos caminar, mentirles prácticamente; pero al menos yo como dirigente no creo en esas prácticas.

Si hoy día el gobierno interviene ofreciendo tierras va a tener que darle más plata a las forestales, ya que nuestro predio de acuerdo a ese criterio está aún sin solución. Porque actualmente el gobierno está ofreciendo comprar tierras y si el gobierno entrega plata y a través de esa vía quiere terminar el conflicto está equivocado, porque con la compra de 200 hectáreas el conflicto no va a terminar, porque nosotros como comunidad poseíamos 10.000 hectáreas, entonces esa no es una solución.

¿Frente a la intervención del gobierno, qué respuesta han dado como comunidad?

Alguna gente se opone y otra gente dice que por esta vía hay que buscar una solución, falta de entendimiento de nuestra gente. Pero en concreto vemos que el gobierno ha intervenido porque ya no le queda otra alternativa, porque ya le hemos torcido la mano el enemigo.

Mientras seguimos con nuestras siembras, nuestro trabajo productivo, el control territorial.

¿Cuáles han sido los principales problemas que han enfrentado como comunidad?

La intervención de los políticos, la idea de desvirtuar la movilización, el querer apagar la movilización, la intervención de distintos sectores que se han interesado por bajar el conflicto, como lo ha hecho siempre el Estado, porque en estos momentos el principal problema, el problema más agudo lo tiene el
gobierno con los mapuche. Entonces una forma de intervención es tirándole proyectos, dándole trabajo temporal, comprándoles predios en otro lado y muchas formas más como sobornando a los mapuche, tratando de ganarse a la gente mostrándole una cara buena con los proyectos.

¿Qué factores han ayudado a la comunidad para mantener este proceso?

La masificación de la lucha, eso es lo que más ha servido, porque si no se hubiera masificado la lucha nosotros habríamos avanzado más lento o estaríamos todos encarcelados y lo importante que se ha avanzado en ese aspecto, porque nuestro enemigo no puede darnos vuelta a todos. Si hubiéramos sido una comunidad sola el enemigo nos desarma, nos encarcela. Entonces eso es lo importante, cuando se masifica hay más fuerza.

¿Hacia dónde se dirige la lucha de las comunidades mapuche en conflicto?

Hacia nuestra autonomía, hacia la liberación de la opresión. Queremos que nuestro Pueblo no siga más oprimido. Primeramente nuestra autonomía en nuestras comunidades, que ningún político intervenga más, que no seamos mas humillados y que salgamos de la opresión.

¿Qué importancia le da a la CAM?

Yo creo que la Coordinadora ha sido realmente muy importante, porque nos hemos ido dando cuenta de varias cosas, de que por ejemplo no podíamos seguir esperando que en los tribunales se resolvieran los problemas que teníamos con el robo de nuestras tierras, porque así han pasado los años y las forestales se siguen enriqueciendo. Entonces ahora vemos que la Coordinadora va por la línea correcta, que es donde nosotros tenemos que trabajar por nosotros mismos, sin intervención de los políticos, de los partidos políticos, sin los winka porque nosotros sabemos trabajar y cuidar nuestras tierras y tenemos que trabajarla no más, dejar de estar dominados ... y eso ya lo han ido entendiendo muchas más comunidades.

KIMEL DUGU

(NOTICIAS)

Trawun en la provincia de Cautín:

Entre los días sábado 13 y domingo 14 de octubre de este año, se desarrolló un importante Trawun de comunidades mapuche en conflicto en el sector de Tres Cerros de la comuna de Padre las Casas. La comunidad Yeupeko, fue dueña de casa y fue, además, la encargada de organizar un juego de Palin que se desarrollo entre los equipos que representaron a estas comunidades.

Yeupeko, es una comunidad que declaró su conflicto a principios de año, haciendo ocupación del Fundo Santa Margarita, predio agrícola de 275 hectáreas ubicado en el sector Etinento, cerca de Vilcún, actualmente de propiedad de Jorge Luschinger Villigier. Si bien este predio actualmente sólo es reclamado por algunas familias, sostienen una demanda global de 7.000 hectáreas de tierra, de las cuales 5.000 hectáreas están en manos de la empresa Forestal Mininco S.A.

A partir de una reflexión por parte de las comunidades locales acerca del rol que han cumplido algunas organizaciones y dirigentes mapuche que no sostienen planteamientos propios que permitan salidas fuera del marco de la institucionalidad, se reafirma la idea de reforzar los procesos de recuperación de tierras, fortalecer las orgánicas de las comunidades mapuche que luchan y avanzar en el ejercicio del control territorial.

 

Se reúnen las comunidades en conflicto de Tirúa:

El viernes 9 de noviembre se desarrolló un nuevo fvta trawun entre las comunidades en conflicto de Tirúa y algunos representantes de otras comunidades de Arauco, Malleco y Cautín. Se hizo una evaluación sobre el proceso desarrollado por las comunidades mapuche de la zona, quienes hace alrededor de tres años han sostenido una permanente ocupación de los predios reivindicados, desarrollando en ellos una serie de trabajos productivos y ejerciendo el necesario control territorial.

Importante es destacar que tanto Tranicura, Puente de Tierra y Kumillawe se han transformado en importantes comunidades referentes, dada su capacidad para sostener un trabajo, pese a la fuerte represión que han debido enfrentar, con resultado de mapuche heridos, perseguidos e incluso baleados por la Policía de Investigaciones de Chile, al resistir dignamente la detención de uno de sus Lonko.

Las conversaciones y análisis desarrollados entre los integrantes de las comunidades que participaron en este fvta trawun, fueron un reflejo del avance cualitativo de la lucha mapuche en la zona. Surge le necesidad de seguir controlando los espacios territoriales y avanzar en el proceso de autonomización social, económica y política, plano en el cual se llegó a relevantes acuerdos que sin duda marcarán nuevos hitos en nuestra historia como Pueblo.


En Ercilla otra comunidad declara su conflicto:

La comunidad "José Guiñón" del sector San Ramón de la comuna de Ercilla, hizo ingreso a un predio forestal para dar inicio al proceso de recuperación de tierras el día Lunes 12 de noviembre. Esta comunidad mantiene una demanda global de 800 hectáreas, aproximadamente, que incluye seis parcelas que actualmente están manos de las empresas forestales Mininco S.A. y Cautín, que en total suman 300 hectáreas; y el Fundo Pidenco, de un total de 500 hectáreas, actualmente de propiedad de la empresa Forestal Cautín.

Antiguamente esta comunidad contaba con alrededor de 1.260 y por ello su acción es considerada por la comunidad como legítima y justa, sumándose al proceso desarrollado por más de cuarenta comunidades en conflicto.

Durante ese mismo día, efectivos policiales intentaron realizar el desalojo del predio lo que fue decididamente resistido por la comunidad, apoyados por comunidades vecinas. Como es ya habitual, carabineros, subordinados a los intereses de los grupos económicos y políticos imperantes en el país, actuó utilizando todos sus elementos disuasivos en forma indiscriminada, entre ellos balines y bombas lacrimógenas, lo que afectó a varios comuneros, especialmente a mujeres y niños que se encontraban en sus casas; además de afectar las aves y animales de los comuneros.

Resultó detenido un mapuche menor de edad, que posteriormente fue liberado. Pese a ello la comunidad continúa al interior del predio, para dar continuidad a un proceso de recuperación de carácter productivo e indefinido.

 

Las acciones del Estado chileno:

Tal como lo hemos planteado en uno de nuestros documentos "Sería ingenuo pensar que al plantear ocupaciones productivas de tipo confrontacional y al disputar el territorio con los poderosos no habrá represión y persecución y ésta será principalmente en el terreno...". En este marco, no ha resultado una sorpresa las respuestas que el Estado chileno ha dado a las justas demandas mapuche: represión, encarcelamiento y persecución a los mapuche, adornado con proyectos, subsidios, bonos y todo tipo de migajas que el Estado reparte, sobre todo en el último tiempo, para contener la lucha de los comunidades mapuche en conflicto.

Aníbal Salazar Huichacura, es actualmente un preso político mapuche de la C.A.M., quien cumple una condena de tres años y días en la Cárcel de Temuco. Fue condenado por Ley de Seguridad Interior del Estado a raíz de la quema de camiones forestales a fines del año 1997.

Sin embargo, por las cárceles de la octava y novena región ya han pasado más de un centenar de mapuche procesados o imputados por diversas causas relacionadas con las luchas de las comunidades en conflicto, en muchos casos experimentando las pruebas de un Nuevo Sistema Procesal Penal que se está llevando a cabo en la novena región. Del antiguo y nuevo sistema procesal aún se mantiene una importante cantidad de procesos pendientes sobre los cuales emanarán sentencias sin ningún sustento jurídico; resultado de una fuerte presión política represiva que ejercen las forestales y empresariado.

Entre los últimos casos se encuentra la situación del Lonko y el Werken de la comunidad Juan Ailla Varela del sector Caillin de Collipulli, quienes estuvieron recluidos en la Cárcel de Angol desde el 25 de junio del 2001, acusados de tres graves cargos. El 10 de octubre se cambió esta medida por arresto domiciliario, medida que luego fue revocada y que les obligaba a estar nuevamente en prisión carcelaria, lo que sin embargo no se ha concretado. Evadir las órdenes de detención y exigir la libertad de todos los presos políticos mapuche es un planteamiento sostenido por las comunidades mapuche, ante la injusticia que representa el encarcelamiento de quienes legítima y dignamente luchan por la restitución de nuestros derechos como Pueblo.

Bajo el pretexto de cumplir las órdenes de detención pendientes en el sector de Collipulli, fuerzas policiales realizaron un operativo en la zona el día jueves 8 de noviembre, producto del cual resultó detenido un integrante de la comunidad quien posteriormente fue dejado en libertad al confirmarse la inexistencia de cargos en su contra.

La condición en la que se encuentran ahora el Lonko y el Werken de la comunidad Ailla Varela, se suma a la de otros mapuche que actualmente continúan con órdenes de detención pendientes, entre ellos mencionamos a: un tercer integrante de Caillin, Werken de la comunidad; dos Lonko de Tirúa; tres comuneros de la zona de Arauco; el Lonko de Chequenco y cuatro personas más de la misma comunidad.