Voz nº1997

Alguien le pregunts al polmtico y escritor chileno de visita en Bogota si escribma poesma. Y aunque lo habma hecho, respondis que +le dejaba hacer la poesma a los poetas;, quiza para abordar otro campo literario, donde ha enseqado csmo poder abrir la llave del recuerdo. A la
memoria del futuro.

Por Josi Luis Colegial.

El martes 24 de noviembre, quien desde muy temprana edad sintis el impulso de dos vocaciones paralelas y definitorias en su vida, la polmtica y la literatura -el chileno Volodia Teitelboim-, luego de muchos aqos de ausencia complets una nueva visita a Colombia, +vertiginosa y cordial;, y en todas las charlas latinoamericanistas masivamente concurridas que ofrecis y los encuentros, sus palabras se arroparon con el calor de la ternura, la nostalgia afectuosa de sus
compatriotas aqum residentes y las +pequeqas avalanchas cariqosas; de la juventud que tambiin lo quiere. Al dma siguiente, el miircoles 25, en alegre paradoja que nunca se podra olvidar y como despedida festiva del ilustre compaqero, el ex dictador Pinochet, inmovilizado, sollozaba secretamente frente a la reivindicacisn de la justicia para satisfaccisn del concierto planetario.

?Ajeno a la poesma?

En la lucidez de sus 82 aqos, Volodia conts a VOZ que +deji de escribir poesma pero nunca me sentm ajeno a ella. Ademas, en la cilula de la juventud comunista universitaria se repetma mucho que la poesma que yo escribma no era panfletaria,no insistma en los puqos en alto y yo creo
que isas no son categormas literarias porque la poesma tiene un lenguaje y la polmtica tambiin, aunque sean dos vertientes de una misma persona, pero no hay que confundirlas. +Siempre me persiguis este fantasma de la poesma y fue una de las razones para que en la madurez, ya en el exilio en Europa, acometiera la tarea de escribir sobre los poetas que conocm y me habman
impresionado mucho; Pero es que isa no fue la znica razsn para hablar sobre Pablo Neruda,
Gabriela Mistral y Vicente Huidobro. No. La otra razsn fue para +no establecer el olvido en tiempos de amnesia, decretada por la dictadura. Al fin y al cabo esos poetas no eran sslo grandes lmricos sino representantes de la conciencia democratica del pueblo y de la nacisn. Siempre habman soqado con una Amirica Latina distinta, libre, soberana, con respeto por el pueblo,por los trabajadores, tambiin por la belleza y la poesma; Bajo esa luz le llegs un encargo desde Madrid: +Me puse a escribir la biografma de Neruda. Todo mi archivo se habma quedado en Chile y gran
parte destrumdo por la dictadura. Fue un trabajo de la memoria, un abrir la llave del recuerdo que comenzs a fluir, a manar todos los episodios y las escenas que habma compartido con il. Esto se publics en Espaqa y entrs ilegalmente a Chile, pero luego aparecis en otros pamses y otras
lenguas: E.U., Francia, Alemania, Rusia, Bulgaria...

De las biografmas

En 1935, en Santiago de Chile, +atrapado por las redes fascinantes de la llamada Vanguardia Literaria, bajo la influencia de Huidobro, que habma regresado de Francia;, la juventud de 17 aqos de Volodia junto a la del tambiin joven poeta Anguita fueron reclutadas para la novedad y el
escandalo de la ipoca. +Quermamos enterrar a los elefantes blancos, a las vacas sagradas. Era la rebeldma misma, con unas querellas literarias ruidosas y estridentes;. Ese mismo aqo surge la +Antologma de la poesma chilena; que para il tuvo +el peso de haber cometido una injusticia mayor, como excluir arbitrariamente a Gabriela Mistral, por quien descubrm en la infancia
mediante sus rondas infantiles de los textos escolares, la sensacisn que en la primera edad tambiin se puede ser un gran poeta;. Posteriormente a la aparicisn de su primera biografma, alguien le pregunts a Volodia por qui solamente Neruda y por qui no sobre el primer Nobel de literatura latinoamericana. +Sentm que era la ocasisn de pagar una deuda y expiar una falta. Pero
tambiin porque habma varias biografmas hechas con muy buena intencisn: Santa Gabriela Mistral y La divina Gabriela, que se publicaron en vida de ella y por las cuales enferms de indignacisn. Allm intenti recuperar de la oscuridad por lo menos la mitad de la obra y de su
personalidad oculta, que es la prosa donde formula los pronunciamientos cmvicos mas importantes. + Asumis todas las causas de Amirica como si fueran propias. En ese sentido, declaradamente es una discmpula de Josi Martm y por lo tanto asume la defensa del pueblo originario, de la justicia social, habla de los derechos de la mujer -fue una gran protestataria en esa materia-, de la proteccisn al niqo, de la juventud, del estudiante, de la campesinerma, una de sus palabras porque se sentma labriega; fue benemirita del sandinismo junto a Baldomero Sanmn Cano, proclamada por el propio Sandino, y tambiin alertando contra las dictaduras militares a las que consideraba absolutamente fatales;. Volodia es polmtico, pues en una etapa de su extensa vida militante, entre 1989 y 1994, fue secretario general del Partido Comunista de Chile. Y es escritor -las cilebres biografmas de los dos Nobeles chilenos del siglo XX-, mas la del poeta Vicente Huidobro, cuya relacisn fue un capmtulo importante de su juventud. +El nunca habma tenido una biografma y fue una persona de gran importancia que de algzn modo esta sumido en el silencio. Fue el mas significativo participante latinoamericano en la revolucisn
estitica, con Apollinaire, Picasso y todos los grandes en el cambio. Entonces el libro tiende a restablecer no su memoria, porque no es un simple homenaje, sino un enfrentamiento total al personaje en su grandeza y su pobreza. No es una idolatrma, por el contrario, es una mirada
mzltiple para tratar de configurar y explicar su individualidad;. Y +finalmente enfrenti una tarea temeraria: escribir una biografma del poeta argentino Jorge Luis Borges. El aparecma como un
derechista, un hombre relacionado con los militares en Chile. A esto me llevs la necesidad de explicar un misterio: ?csmo una persona que resulta un gran escritor, cae en tal incoherencia desde el punto de vista cmvico, humano? +Habma que buscar en su obra, en su vida, en montaqas de materiales. Asm salis +Borges: vida,sueqos y libros;, que es como una labor de un
detective que se interna en su aspecto familiar, su vida mntima, su infancia, los traumas de un muchachito que nacis condenado a ser ciego y cuya madre lo recluys detras de las lanzas de un castillo para que no saliera a la calle. Entonces se encerrs en lo que llams la biblioteca de
Babel. En vista de que el mundo le resultaba ingrato, decidis crear el mundo borgiano;.

Dos panoramas distintos, un nuevo siglo XXI

Con Volodia Teitelboim se pueden abordar mzltiples e inacabables aspectos de la literatura y los personajes que conocis de primera mano, con la ventaja que el tiempo gustosa-mente nunca pasa y la desventaja cruel del espacio material. Por lo anterior, y porque como il afirma +pese a la divisisn en tantas repzblicas lo nuestro es un solo gran pams;, Chile y Colombia y sus
panoramas sobre su poesma se deben juntar bajo la mirada del escritor. +La poesma es una corriente continua. Menindez Pidal dijo a fines del siglo XIX que Chile no era un pams de poetas sino de estudiantes, y Unamuno manifests que si era asm, yo espero que en el siglo XX deba
haber en Chile grandes poetas. Fue asm. +La poesma no se rige por criterios polmticos. Y despuis de estas grandes figuras que parecen ser bosques que quitan el sol a los demas,
la poesma no se detiene: la generacisn posterior a Neruda tiene a poetas notables como Nicanor Parra. Y en las generaciones de las dicadas de la segunda mitad del siglo XX aparecen poetas muy apreciados. De tal manera que no hay que guardar luto por la poesma porque murieron los
maestros, pues quienes siguen no imitan sino que buscan otra dimensisn. +Hay otro fensmeno que para mm es elocuente: frecuentemente voy a reuniones de escritores de la capital programados para leer versos y suelo viajar a puntos muy lejanos. Pero se produce una especie
de asalto al micrsfono. Por ejemplo los poetas en un pueblo abandonado como Lota, 40 s 50 muchachos, se apoderaron del micrsfono y empezaron a leer. No quiero hacer una crmtica literaria de los versos, habma buenos y otros de menor calidad. Eso no es lo importante. Lo importante es que para multitud de jsvenes la poesma en estos momentos, que son grises para
Chile y muy difmciles para esa juventud, es como decir yo tambiin soy un ser humano y isa es la grandeza: se esta presentando un fensmeno de esperanza. +En Colombia yo conocm a poetas de otras generaciones y hoy tengo muchos poetas amigos. Y una de las cosas que hice ahora en Bogota es conseguir libros de poetas jsvenes y tambiin antologmas, de tal manera que yo dejo
esta respuesta para el prsximo viaje. +Pero es evidente que la poesma esta viva. Me parece que la
poesma colombiana es de mucha fuerza, de mucho vigor. Tiene una gran tradicisn y iso quiere decir que hay profundas ramces y istas no se secan. Siempre echan sus verdores y estoy absolutamente convencido de que en la poesma colombiana tambiin se expresaran grandes cosas en el siglo prsximo;..