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XXIII Festival Latinoamericano de Teatro Manizales – Colombia

Red Nacional de Teatro en Comunidad

Manizales Tambien Cuenta

RUBEN DARIO HERRERA

Luz de Luna Bogotá.

"Si se le ve así, la vida de la calle es todo un espectáculo teatral. Los gestos del chofer, las palabras del pasajero, un ladrón defendiendo lo robado, un parroquiano rescatando lo suyo, el público rescatando al ladrón, un policía dando garrote, un accidente, un choque de cuerpos humanos, un devenir veloz de los carros, la frenada y los ruidos enloquecedores en las ciudades que hacen de los pobres nervios una víctima ecológica. Y entre los resquicios que dejan la velocidad, la violencia verbal o los golpes tras los golpes, un círculo de hombre, mujeres, niños, ancianos, sin trabajo muchas veces, con trabajo otro tanto, parados le dan a sus vidas un descanso al dejarse llevar por la imaginación del culebrero, la magia de la palabra, el encanto verbal, que entre cerrar la boca y abrir los ojos, usted, señor transeúnte, quedará de por vida curado de todo cáncer de las deudas. De pronto, ante oferta tan inusitada, ellos sacan el billetes del almuerzo del día y pagan con satisfacción por la pomada, por el cuento escuchados, por la palabra embrujada, por el gesto convincente, en fin, se produce el desdoblamiento, resultado de la necesidad que por magia o enajenación por un momento resuelve los problemas de esta vida que son los diarios. Y el espectáculo de la calle sigue con su bullicio, entre la oferta y la demanda, con sus gestos preconcebidos, aprendidos de memoria, que hacen de sus exponentes actores vitales, que enfrentan un teatro de real convencimiento: tienen que vivir de él.

En la calle hay un teatro callejero, con todos sus signos gestuales. Con todas sus voces narrativas. A la calle vuelve un teatro para la calle. Que difícilmente puede enjaularse en una sala para doscientos o máximo trescientos espectadores. No. Necesita de un ámbito en que la voz humana debe ser escuchada por una mayor y más grande audiencia. Y eso se puede dar, si se logra captar los elementos plásticos y semánticos que identifique el espectáculo, el reelaborado por artistas profesionales, y lo enfrenten a ese público con algo aparentemente conocido, pero con nuevas connotaciones, de forma y de lo que puede expresar subterráneamente. Es decir, es un golpe bajo con algo conocido, muy metido como imagen fija en la materia".

ARTURO ALAPE

LA CALLE UN ESPECTACULO TEATRAL

Hablar de teatro callejero es hacer referencia remota sobre el origen del teatro. Durante este periodo primigenio, el destino del teatro se desarrolló en abiertos horizontes y los vientos hacían de telones agitados. Con la carreta de Tespys, Los Juglares, Trovadores y mimos se irrumpió en un espacio de cuenta historias o cuenteria, la burla y la sátira.

Los célebres teatros, Anfiteatros griegos que condensan el grado de desarrollo escénico en una época que inicio la historia del teatro occidental. El teatro de la actualidad se ha alimentado de estos comediantes, y es muy común ver estatuas humanas reteniendo la energía y concentrando la presencia escénica, o a los juglares tratando de sobrevivir con su numero de lanza – fuegos o los más osados saltando sobre vidrios, otros enterrándose grandes agujas en el rostro. Pero es esto teatro?. Para el espectador desprevenido, ese que atrapamos con nuestros actos puede darnos la respuesta que lo que acaba de ver es teatro; respuesta que está supeditada a la publicidad cuando estos trabajos escénicos se desarrollan en el marco de algún festival de teatro. Las anteriores acciones o formas se convierten en acciones socioculturales, número de circo sacados de la carpa o actos de verdadero virtuosismo, acorde con las condiciones físicas de quienes lo ejecutan, algunas ocasiones pueden ser instalaciones plásticas que recrean y animan la sensibilidad de los espectadores. Para quienes hacemos teatro, definitivamente debemos tomar la forma, el icono referencial, pero para que sea teatro debe contar una historia, contenido en el drama escénico.

El teatro es uno solo, cambia el formato y el estilo, las reglas básicas: como tener una dramaturgia, una actuación, son las que nos deben acercar para clasificar como teatro. En la historia reciente podemos recordar la década de los años 80´s, en donde se manifestó una gran preocupación por contar historias escénicas en la calle y con grandes imágenes se le llegaba a un público que empezó la admiración y respeto por los comediantes, algunos agrupados otros salidos de escuelas de teatro, que investigaban en el pavimento, en las calles polvorientas de los barrios y en el parque, las formas de contar historias. En algún momento lo que fue fascinación desde la forma, se convirtió en cansancio visual, los seguidores del teatro callejero empezaron a sentir que los zancos y las grandes imágenes fatigaban ya, que su puesta en muchas ocasiones se hacia injustificada, a la par que nuevamente las historias quedaban en buenas intenciones porque no se sabían contar, además es muy poco lo que se escribe para la calle. En últimas una falta de rigor en la sistematización de las experiencias de teatro callejero o de espacios no convencionales.

Se inicia la década de los años 90´s y aun quedan rescoldos de no dejar morir el teatro en el origen y es muy común que el Festival Latinoamericano de Teatro de Manizales invite a los grupos a animar la fiesta teatral, a proyectar el encuentro. El Festival Iberoamericano de Teatro abre un lugar importante con grupos de todo el mundo, cuando ya se ganaba un lugar de respeto por el teatro callejero, era muy poco el que se realizaba en el país, los grupos que tradicionalmente hacian de la calle la escena disminuían su producción. A mediados de la última década del siglo en los barrios de las grandes ciudades y la margen de la gran cultura céntrica, los actores con experiencia inician investigaciones con grupos esencialmente de jóvenes y con las historias que quieren contar en las calles.

El Teatro Experimental de Fontibón, un grupo que marcó la pauta callejera en los barrios bogotanos en los 80´s resurge como de entre las cenizas, iniciando toda una preparación física con jóvenes de su localidad, aprestamiento para el teatro, agrupación para la comparsa, efemérides de la ciudad. En Medellí Nuestra Gente canaliza la fortaleza de los jóvenes con la obra Circo Teatro, Mujeres entre angeles demonios, Barrio Comparsa pasa de la comparsa a realizar una historia con el muro, Kerigma y Chiminigagua en Bosa con Pies Hinchados y las Guerras del Fuego respectivamente.

En el centro oriente de Bogotá, el colectivo teatral Luz de Luna durante cinco años realiza una investigación acerca de la violación de los derechos humanos en Colombia y realmente no han pasado del fundamental "el derecho a la vida" es asi como el dos de abril de 1995 estrenan la pieza teatral "Donde esta?" un hecho basado en la desaparición forzada. Es una creación colectiva dirigida por Ruben Dario Herrera que transformó la vida interior del grupo, los jóvenes que desde hacía tres años atrás aprendian las técnicas teatrales se vieron involucrados en las vidas de los protagonistas de la historia.

A la par que se estudiaba a cerca de las luchas emprendidas por Leonardo Gómez se reflejaba el sentido de la solidaridad y el compromiso. En su comunidad, pronto el color, los cantos, la música y la actuación enriquecieron la historia dolorosa, desgarradora y con humor mordaz. Así siguieron Ventitas y Ventarrones en el año 1997 y Aterra en 1998.

Basados en la creación colectiva se realiza una investigación del tema, se socializa, se dejan tareas, se regresa a la fuente, nuevamente se socializa, son largas jornadas de enriquecer el hacer teatral. Hay una aproximación a la fábula o a la relatoría por intermedio de improvisaciones, algunas se convierten en material baldío, en otras ocaciones aportan inmediatamente a la historia.

Todo este trabajo se realiza en un sitio cerrado alejado de cualquier tipo de distracción, en ese sitio es necesario concentrar energías para desafiar la calle, escenario sin tapujos, donde un público asiste y no tiene la obligación de quedarse en la cita, por esto se hace necesario ubicarla con respeto.

Cuando se tiene una forma de la dramaturgia se hace necesario ubicar ensayos en sitios amplios ojalá alejados de espectadores, aun es necesario trabajar la concentración; después que hay un acercamiento en la forma y el contenido se hace necesaria la investigación del personaje, características físicas y psíquicas que le dan la individualidad, así estén en relación colectiva por que técnicamente y para que el texto no se pierda, se hecha mano de los coros personificados. En ¿Dónde Está?, una madre es representada por tres mujeres, en Ventitas y Ventarrones , las pobladoras son una mujer, en Aterra, el poblador son varios actores, luego de poner el desarrollo técnico de la obra se procede a vestirla, a poner la escografía, todo con el aporte de la investigación y la convivencia del lector, director o coordinador escénico. La labor de la proxemia tiene que tener un sentido y un valor tanto estético como sensorial.

Los resultados en "Luz de Luna" son trascendentes, al menos lo es para una comuna de barrios sub – normales que a fuerza de ver a los locos se acercan a un lenguaje que antes era desconocido para ellos, hoy LUZ DE LUNA puede hacer temporadas en los parques los fines de semana, durante dos meses y la comunidad asiste y vuelve y asiste pero es lógico porque los trabajos teatrales que desarrollan el rigor de la técnica combinada con el ethos que da la vida y la creencia transcienden para que las historias de los barrios se vuelvan universales, a LUZ DE LUNA lo pueden enorgullecer el que sean necesarios en los festivales de teatro, pero más lo enorgullece el que la comunidad del centro – oriente Bogotano sea público digno de ver sus primeras creaciones. Es por esto, que el pasado mes de agosto se realizó el llamado a la red de teatro en comunidad para que asistiera al primer encuentro de Teatro Comunitario en la Barriada del centro – oriente. Durante días (10) días los dueños del gesto y la palabra fueron los héroes de la comuna quienes los admiraron, respetaron e intercambiaron ideas y locuras.

Es de anotar que más que hablar de la estética teatral, tenemos que contarles el placer que nos causa el abordaje de la pedagogía teatral, el placer que nos causa el hacer una política desde lo comunitario, la estética de lo vivencial es lo que fortalece hoy el hacer teatro en Red.

 

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