Ante un acontecimiento tan importante para la provincia de Ávila y para los pueblos por donde transcurre la CL-501 como el fallo, firme y no recurrible, del Tribunal Supremo que avala la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Madrid (que, recordémoslo, declaró nulo el acuerdo de desdoblamiento y pedía la restitución a su estado anterior de la zona afectada por el proyecto), ante este hecho, decimos, sorprende el silencio de los responsables políticos abulenses; se diría que contienen la respiración ante esta sentencia y las consecuencias que podrían derivarse de ella.