El 57% de los vascos quiere una reforma de la Constitución que recoja la
autodeterminación

 
La mitad de los españoles son partidarios de que el
Gobierno tome en  serio la posibilidad de acabar con el terrorismo a partir
de la tregua existente en este momento. Hasta ahora, la actuación del
Ejecutivo está  resultando adecuada y, en términos generales, positiva
para alcanzar una solución. La concesión que menos rechazo suscita es el
acercamiento a Euskadi de los presos de ETA. El 57% de los vascos apoya
una reforma de la Constitución que reconozca su derecho a la
autodeterminación.

Dos semanas después del comienzo de la tregua
terrorista, disminuyen los partidarios de no conceder
 trascendencia a la iniciativa de ETA mientras no
abandone definitivamente las armas y aumentan los
partidarios de aprovechar la oportunidad para intentar
 acabar con la violencia.

El comportamiento del Gobierno es juzgado de manera
positiva en el conjunto de España, mientras que en el País
Vasco el juicio es más  crítico. El 64% de los españoles consideran que su actitud
es prudente y  conciliadora, y más de la mitad comparte la impresión de
que su posición no es intransigente. En el País Vasco, el 51% cree que el
Gobierno está siendo demasiado inmovilista, y el 48% estima que su respuesta no
está siendo la adecuada.

También existe una opinión contrapuesta sobre los posibles
gestos de respuesta  que el Gobierno de la nación podría adoptar. La mayoría de
la población, en  porcentajes que fluctúan entre el 40% y el 73%, se muestra
contraria a que el Ejecutivo realice cualquier tipo de gesto. El que menos
rechazo concita es el  acercamiento a Euskadi de los terroristas presos, y aún
así no es aceptado por el  40%. Uno de cada tres españoles estaría dispuesto a
aceptarlo a condición de  que los beneficiados renuncien definitivamente a la
violencia.

La puesta en libertad de los presos enfermos o que hayan
cumplido dos tercios de  su condena es rechazada por más de la mitad de los
entrevistados (52% y 68%, respectivamente). Asimismo, no es aceptado por un 62% un
indulto para los etarras que decidiesen reinsertarse.

Por el contrario, en el País Vasco el 66% de los
ciudadanos es partidario de que  el Gobierno acerque a los miembros de ETA que cumplen
condenas fuera de  Euskadi, y el 59% cree que deberían ser puestos en
libertad los encarcelados que  se hallan enfermos. Un porcentaje inferior, pero
mayoritario en términos relativos   (44%), está a favor de que sean indultados los presos que
decidan abandonar la  violencia y reinsertarse en la sociedad.

En términos generales, las opiniones expresadas por el
conjunto de la ciudadanía  no reflejan posiciones tajantes, sino su predisposición en
este momento.

La posibilidad de una reforma del Estatuto de Autonomía,
al hilo del proceso de paz, es apoyada por el 58% de los vascos, si bien sólo un
8% sostiene que el  Estatuto es una vía agotada. El 57% de la sociedad vasca
es partidaria de cambiar la Constitución para que reconozca el derecho del
País Vasco a la  autodeterminación. El 36% se declara partidario de la
independencia total.

No obstante, son más (44%) quienes se opondrían a una
independencia planteada como contrapartida al cese definitivo del terrorismo. Para
la ciudadanía española ha sido más determinante del inicio de la tregua el
encarcelamiento de la Mesa Nacional de HB y el cierra de Egin que el denominado Pacto
de Lizarra.