VACACIONES EN ALEMANIA DEL ESTE.
¿VIAJE DE RECREO O DE SUPERVIVENCIA?
Sanem K., profesora, vive en Berlín desde 1980:
"Tuve que ir al este un par de veces por asuntos de trabajo. Debido a algunas malas experiencias yo no pasaría allí mis vacaciones. Mucha gente me demostró que no querían verme por allí. Un intento de vacaciones en la isla de Rügen, terminó cuando 20 jóvenes rodearon con sus motos. Afortunadamente yo estaba allí con un hombre rubio y de ojos azules."
Fernando P., desempleado, vive en Alemmmania desde 1983:
"Años atrás a veces conducía a través del este. Nunca paraba mi coche porque estaba asustado. Pero ahora evito también pequeños viajes al este porque la violencia racista que antes afectaba mayoritariamente a negro y asiático, ahora también nos afecta a los italianos. A finales de Mayo iré a Mecklemburgo con mi curso de fotografía (con un mal sentimiento y manos sudorosas)."
Emine D., responsable municipal de extranjeros, vive en Alemania desde 1968:
"Me gusta visitar el este, aunque evito salir a caminar en zonas con poca gente como hago en el oeste. Las miradas y las reacciones son distintas. En Pascua fui con mi familia a Potsdam. Tras nosotros la gente gritaba '¡extranjeros iros a vuestra casa!'."
Indice revista
Pag. principal