CARTA A LA FEDERACIÓN INTERNACIONAL DE HELSINKI PARA LOS DDHH.

Queridos amigos y estimados colegas:
Esta carta es una respuesta a la "petición" formulada por nuestros asociados y amigos con quienes hemos cooperado durante años en el largo y ambicioso proyecto de construir una sociedad civil en la Repdblica Federal de Yugoslavia.

La demanda, que recibimos en medio de la guerra, la "intervenci\n humanitaria@ y de la agresión de la OTAN, en otras palabras, en medio del colapso de las esferas de legitimidad de la vida pdblica y polRtica, en un momento de legislación de emergencia, ley marcial y juicios sumarísimos, esta demanda nos pide que levantemos nuestras voces críticas y que acentuemos la crítica política y la condena moral del rJgimen de Belgrado. Adem Permitidnos aclarar que desde el comienzo de la desintegraci\n de la antigua Yugoslavia, nuestra "posición cívica" siempre ha sido clara y di En este contexto no se nos puede pedir que denunciemos unilateralmente el totalitarismo local y que a la vez nos solidaricemos con las pretensiones del hegemonismo global. Nuestra principal convicción reside en entender que la sociedad civil debe funcionar como correctivo permanente de la raz\n de estado y que las ONGs deben apoyar las opciones pacíficas de sus gobiernos, no las bélicas. Las expectativas de que la espiral de violencia y expansionismo militar permita una soluci\n política racional en Kosovo, la R.F. de Yugoslavia y los Balcanes, no se sostienen; por el contrario nos tememos que bajo el nombre de la mal llamada "intervenci\n humanitaria" se reavive la arcaica y rancia "figura de la guerra", que suponRamos desaparecida de nuestra cultura.

Para acabar, permitidnos recordaros que la brutal desintegraci\n de la antigua Yugoslavia y los conflictos nacionalistas adyacentes que culminaron en la cat