SUDANESAS PROTESTAN CONTRA LA MUTILACIÓN GENITAL FEMENINA

Jartum, 22 de abril de 1999 (PANA/Tertulia). La mutilación genital femenina (MGF), comúnmente conocida como "circuncisión femenina", fue sometida a fuego el 21 de abril durante una conferencia de mujeres realizada en Jartum.

Expositoras en la conferencia del Foro Internacional de Mujeres, una organización mundial de mujeres musulmanas, describieron la MGF como dañina para el bienestar femenino fisiológico, psicológico, económico y social de las mujeres.

La psiquiatra Ibtisam Mahmoud aseguró que la mutilación de las partes externas de los órganos sexuales femeninos es "alarmantemente dañina para el deseo sexual de la víctima". Refirió que una encuesta que ella realizó con una muestra de cien mujeres mutiladas reveló que el 76 por ciento tenía "experiencias dolorosas con su esposo como resultado del bajo nivel de excitación sexual".

Amna Abdulrahman, secretaria de la Sociedad Sudanesa contra los Hábitos Dañinos, dijo que la MGF es nociva para la economía de la familia y del país, "ya que las mujeres deben gastar grandes cantidades de dinero en medicamentos y operaciones quirúrgicas para enfrentar las complicaciones
de salud derivadas de esta práctica".

La doctora Raja el Teraifi se refirió al problema que enfrentan las mujeres mutiladas en los hospitales europeos. "Los médicos en esos países -dijo- no saben cómo ayudar a estas mujeres a parir sus bebés, lo que a menudo provoca severas inflamaciones y otras complicaciones de salud después del parto". Agregó que ha observado que las mujeres no mutiladas "son más activas, más inteligentes y sexualmente más receptivas hacia sus maridos". Este asunto -dijo- debe ser incorporado al currículo escolar y exhortó a los hombres a asumir un papel activo en la lucha contra esta práctica.

La perpetración de la MGF fue atribuida a las personas sudanesas de mayor edad. "Las mujeres mayores deberían ser responsabilizadas por imponerles este procedimiento a las nuevas generaciones", sentenció Abdulrahman Saeed, un alto funcionario del Ministerio del Exterior de
Sudán. A la vez, el ginecólogo Mamoun Haj Ali dijo que la MGF "es nociva para la salud y la felicidad de las mujeres, es injustificable y no tiene nada que ver con la religión". Agregó que todos los miembros de la sociedad "deberían cuestionar seriamente este dañino hábito".
(Traducción de Laura E. Asturias)