¡Libre cultivo de la hoja de coca! ¡Libertad para los presos políticos! 

      
                 El APRA contrató a venezolano para difamar a Ollanta Humala

           

              Mitómanos. Mulder (izq.) tiene la misma habilidad de Boyer (der.) para mentir u olvidar lo dicho. ¿El APRA habrá ordenado la detención del venezolano para silenciarlo?

Moisés Boyer lo confesó todo y se disculpó con el líder nacionalista 

Revista Mariátegui
 20/04/07

El falso militar venezolano denunció al secretario general del APRA, Mauricio Mulder, por haberlo contratado para calumniar a Ollanta Humala de recibir 600 mil dólares de Hugo Chávez e intentar promover disturbios, durante las pasadas elecciones presidenciales. Y de haberlo dejado abandonado.


Moisés Boyer Ríobueno un ciudadano venezolano que durante los días previos a la segunda vuelta de las elecciones presidenciales peruanas en junio del 2006 se convirtió en un kamikaze de la democracia latinoamericana, porque "desbarató" una asonada, financiada por Hugo Chávez, -en caso de que Ollanta Humala Tasso perdiese- terminó confesando que todo había sido una puesta en escena, ordenada y pagada por el APRA.

Cuando las encuestas -que ya no se podían publicar- daban como ganador de las elecciones a Humala Tasso, el establishment neoliberal intentó estrategias inimaginables para evitar esta posibilidad. Uno de las más arriesgadas fue esta.

El 31 de mayo del 2006, Boyer Ríobueno realizó una conferencia de prensa en Lima, donde se presentó con uniforme de comando y mostrando un carné del ejército venezolano. Este falso militar confesó haber arribado a la capital peruana junto a diecinueve miembros de la Polcía Política de Caracas (DISIP) para fiscalizar el financiamiento de Hugo Chávez a la campaña del candidato nacionalista, que ascendía a 600 mil dólares y que había sido entregada a Angel Custodio Heredia Palomino, padre de Nadine Heredia, esposa de Ollanta.

Boyer quien se presentó como asesor del presidente venezolano, agregó que además estaría encargado junto a los otros militares de entrenar a grupos de choque para organizar disturbios durante la jornada electoral del domingo 4 de junio del 2006. Asimismo, aseguró sentirse arrepentido de haber obedecido las órdenes de Chávez y por eso desertaba y denunciaba estos hechos.

En esos tiempos, donde abundaban las denuncias contra Ollanta Humala y todo lo que le era cercano, todos -empezando por los medios de desinformación- dieron por cierta esta denuncia, sobre todo el APRA, rival de los nacionalistas en la contienda electoral.

Pero Moisés Boyer cargaba una turbulenta y delirante hoja de vida, que nadie quizo escarbar porque podía ser contraproducente para la democracia neoliberal. El 8 de agosto del 2003 en Colombia afirmó ser un ex piloto presidencial que recibió órdenes del vicepresidente venezolano José Vicente Rangel para sacar ilícitamente a un guerrillero de las FARC. Y en Venezuela afirmaba que los paramilitares colombianos iban a asesinarlo sino les daba información clasificada sobre Hugo Chávez y su gobierno.

Boyer no es militar, tampoco es asesor del presidente venezolano y no lo persigue nadie, sólo su paranoia o sus jefes del DAS y la CIA. Las autoridades de las Fuerzas Armadas de Venezuela desmintieron que Moisés haya pertenecido a la institución, lo que si realizó es, su servicio militar entre 1990 y 1992. Tampoco perteneció a los Circulos bolivarianos como êl afirmaba.

En días pasados Boyer Ríobueno desde la ciudad de Chiclayo, denunció mediante Radio Programas del Perú, que el congresista y secretario general del APRA, Mauricio Mulder, creó "un psicosocial" y le ofreció 40 mil dólares para acusar a Ollanta Humala de recibir 600 mil dólares del presidente de su país, Hugo Chávez, durante la pasada campaña presidencial. El falso militar afirmó que fue contactado en Panamá por Numa Pompilio, un dirigente del Partido Aprista, quien a su vez lo puso en comunicación con el secretario de dicha agrupación.

El venezolano fue traído al Perú junto a su esposa con quien fue llevada por diversos hoteles de Lima, para terminar residiendo en una hacienda de la ciudad de Chiclayo. Moisés Boyer contó que se comunicó varias veces con Mulder Bedoya, quien le colgó las llamadas. El APRA le había ofrecido -de llegar al gobierno- una recompensa de 40 mil dólares, asilo político y un puesto en el Ministerio del Interior. Cuando Boyer se dio cuenta que había sido engañado -como la mayoría de peruanos que votaron por el cambio responsable- por la palabra aprista, decidió decir la verdad. Por eso, le ofreció disculpas públicas a Ollanta Humala y responsabilizó al presidente Alan García de lo que pueda sucederle de ahora en adelante.

Ahora Mulder acusa a Moisés de farsante y mitómano, niega la acusación, pero acepta haberse reunido con êl, para escuchar su propuesta, que luego rechazaría. Sin embargo, cuando Boyer soltó la denuncia todo el APRA señalaba con el dedo a Ollanta por recibir dinero de Chávez, como lo siguen haciendo ahora que son gobierno. 

Y por esas casualidades que no existen en la política, Moisés Boyer concedió en junio del 2006 una entrevista exclusiva al diario limeño Del País, que es financiado por apristas y hoy es pro gobiernista, donde da los detalles de su misión, de sus entradas y salidas clandestinas del Perú e incluso le obsequia a este medio, una supuesta carta de puño y letra, que Chávez le había enviado a Humala.

Lo último que sabemos de Boyer es que fue detenido por las autoridades peruanas en la ciudad de Chiclayo, porque supuestamente le habían desbaratado los planes para atacar una televisora local y le encontraron los planos de esta, en el momento de su captura. 

Este es el APRA, que no sólo estafa al pueblo con demagogia sino también a sus sicarios. 

                                                            Mariátegui. La revista de las ideas.