CRÓNICA DE LA EXCAVACION REALIZADA
EN OTERO DE HERREROS (SEGOVIA).
Por José Mª Pedreño
Julio 2003
Organización:
Por parte del Ayuntamiento de Otero de Herreros
(800 habitantes - gobierno PSOE) hubo una colaboración
extraordinaria. Nos alojaron en la escuela y nos proporcionaron
sacos de dormir y colchonetas. Para ducharnos, nos permitieron
usar la piscina municipal. Así mismo se hicieron
cargo de nuestra alimentación durante el tiempo que
duró la excavación.Los concejales trabajaron
codo con codo con los voluntarios del Foro por la Memoria.
Fueron extremadamente escrupulosos en facilitarnos los materiales
que necesitábamos. Contrataron una pequeña
pala excavadora que nos permitió realizar un buen
trabajo.
Primer día (27 de junio de 2003)
El punto de encuentro
fue la plaza del pueblo. Nos incorporamos paulatinamente,
tanto los compañeros de Madrid, como los compañeros
de Segovia y Burgos.
Pedimos al ayuntamiento
que llevase los materiales a la zona de trabajo. Se marcó
la zona indicada por el testigo la semana anterior. Se hicieron
dos sondeos sin resultado junto a la piedra en forma de
asiento indicada por el testigo. Nos retiramos al anochecer.
Marcamos con cinta de balizar la zona para impedir el acceso
de curiosos.
Segundo día (28 de junio)
Iniciamos los trabajos a la 8,45 de la mañana.
El resto de los compañeros de Madrid fueron incorporándose
poco a poco a lo largo del día. Se inició
el trabajo de la excavadora (el compañero maquinista
se comportó como un miembro más del equipo
implicándose a todos los niveles, le pedimos una
tarjeta por si algún otro ayuntamiento de la zona
reclama nuestra intervención). Se incorporan miembros
de Amnistía Internacional como observadores.
A las 10.30 de la mañana
aún no habíamos encontrado nada. El lugar
se llena de curiosos, familiares y medios de comunicación.
Se incorporan dos de los testigos y con sus indicaciones
nos ponemos a excavar en otro lugar (similar al anterior).
Pedimos al dueño permiso para derribar una encina
(en la época de los hechos no existían allí)
y excavamos alrededor. El resultado vuelve a ser negativo.
El calor y el cansancio comienzan a hacer efecto sobre el
colectivo, que está realizando tremendos esfuerzos.
Los familiares se impacientan. A las 14.30 comemos todos
juntos, varios compañeros se tienden bajo la poca
sombra de los árboles, hay algunos conatos de desmoralización.
A las 15,45 llega un tercer testigo, nos indica un nuevo
lugar de excavación, cavamos una zanja longitudinal
de varios metros y otra transversal en la zona que nos indica.
El resultado vuelve a ser infructuoso. El grupo está
desmoralizado pensando en abandonar y buscar nuevos testimonios.
Se abre la posibilidad de conseguir un detector de metales.
Sobre las 18.30 aparece un voluntario con el detector. Se
comienza a explorar con el mismo la primera zona de excavación.
En pocos minutos se detectan dos vainas de fusil máuser
de la época. La esperanza reaparece nuevamente. Poco
después aparecen vainas de pistola. A partir de ese
momento trabajamos con la hipótesis de que los cadáveres
pueden encontrarse alrededor de la localización de
las vainas de pistola. Hay un gran montón de tierra
amontonada del trabajo realizado por la mañana que
queda en línea recta entre el lugar donde han aparecido
las vainas de fusil y las de pistola. Se retira el montón
de tierra y se inicia la excavación. A las 20,15
aparecen los primeros huesos. Los momentos de tensión
dan lugar a los de alegría y emoción. Los
familiares que ya se habían retirado son avisados.
El esfuerzo realizado ha dado una tremenda unidad a todo
el colectivo, la localización de los cuerpos como
premio al esfuerzo y el agradecimiento de los familiares
ha fortalecido la cohesión al máximo. Se organiza
la excavación técnicamente y se comienza a
rebajar la primera capa de tierra donde han aparecido los
huesos. A pesar del cansancio se trabaja hasta el anochecer.
Nos retiramos a asearnos, cenar y dormir. Tras hablar con
los familiares izamos la bandera tricolor junto a la fosa.
Algunos compañeros sufren pequeñas heridas
y quemaduras como consecuencia del sol.
Tercer día (29 de junio)
Iniciamos el trabajo a las 7 de la mañana
aproximadamente. Se marca con cinta de balizar todo el perímetro.
Esto no impide que los curiosos afluyan y se arremolinen
alrededor de la fosa. Se incorporan a los trabajos voluntarios
de la zona.. Los trabajos prosiguen incansablemente. A lo
largo del día se dejan totalmente al descubierto
dos cadáveres. Por la tarde se incorpora la antropóloga
forense. Nuestra abogada se desplaza a Segovia para avisar
al juez de guardia, al no localizarle se reclama al juez
de paz de la Losa (termino municipal donde se encuentran
los cadáveres) y se solicita vigilancia de la Guardia
Civil. Se protege la fosa con geotextil, arena fina y malla
en todo su perímetro. Quedamos en continuar los trabajos
el viernes siguiente.
Cuarto día (4 de julio)
Nos citamos, nuevamente, a las 18,00 de la
tarde en la Plaza Mayor de Otero de Herreros. En esta ocasión
el camión de los materiales ya estaba en marcha cuando
nos dirigimos hacía la excavación. Retiramos
las protecciones que habíamos puesto la semana anterior.
Comenzamos a excavar alrededor de las 19,00 horas a la izquierda
de la piedra, buscando los tres cuerpos que nos faltan por
localizar. Empezamos a pensar en la necesidad de usar nuevamente
la pala excavadora para excavar en la zona derecha ya que
las raíces de la gran encina que hay en esa parte
nos impiden avanzar más rápidamente con los
medios manuales (pico, azadón y pala). Solicitamos
al ayuntamiento la presencia de la excavadora al día
siguiente. Se nos informa que no tendremos posibilidad de
disponer de ella al menos hasta el domingo. No retiramos
al anochecer.
Quinto día (5 de julio)
Nos levantamos alrededor de las 07.00 horas,
desayunamos y nos dirigimos a la excavación. Iniciamos
el trabajo a las 7,45 horas. Comenzamos a excavar con medios
manuales hacia la derecha de la piedra rompiendo las raíces
de la encina a golpes de azadón. A lo largo de la
mañana descubrimos el tercer y el cuarto cuerpo.
El tercero está bajo las raíces de la encina
y muchos de sus restos están adheridos a ellas. El
cuarto cuerpo es el que mejor está conservado. Seguimos
intentando localizar al quinto mediante medios manuales
(pico y pala). Vemos la necesidad de usar la pala excavadora.
Suspendemos el trabajo a las 20.30 horas. El equipo muestra
señas de cansancio, el calor ha sido la tónica
cotidiana del día. Hemos creado dos perímetros
de seguridad con cinta de balizar. Aunque es muy difícil
mantener, debido a la expectación, a los curiosos
y a las familias alejados del trabajo de los profesionales
esto nos ha proporcionado una mayor eficacia en cuanto a
seguridad. El objetivo es mantener a las familias alrededor
del primer perímetro de seguridad para que puedan
seguir la excavación de cerca y el perímetro
exterior para mantener alejados a los curiosos. Nos marchamos
con cierta desazón por no haber localizado el quinto
cuerpo, pero con la esperanza de hallarlo al día
siguiente con la ayuda de la excavadora.
Sexto día (6 de julio) Finalización
del trabajo de campo.
Nos levantamos alrededor de las 07.30 horas,
desayunamos y nos dirigimos a la excavación. Iniciamos
el trabajo a las 8,15 horas. Comenzamos a excavar con medios
manuales hacia la derecha de la piedra junto al cuarto cuerpo.
Iniciamos el trabajo mediante medios manuales hasta que
llega la excavadora alrededor de las 10,30 horas. La excavadora
empieza a levantar tierra alrededor de las zonas excavadas
ampliando el perímetro en el que se encuentran los
cuatro cadáveres encontrados. Aparece el quinto cuerpo
alrededor de las 13,30 horas. Nuevamente vivimos momentos
emotivos. La alegría recorre toda la excavación,
los familiares se muestran muy agradecidos. La policía
judicial hace su aparición, realiza un plano de los
hallazgos y saca fotografías de los cuerpos. El juez
de orden para el levantamiento de los cadáveres.
El levantamiento es realizado por nuestra antropóloga
forense auxiliada por los arqueólogos. Los restos
mortales de cada uno de los cadáveres son introducidos
en cajas individualizadas con los efectos personales encontrados
junto a ellos introducidos en bolsas. La guardia civil precinta
las cajas y se formaliza la entrega mediante diligencia
recibo de los restos, quedando estos a disposición
judicial. Por orden del juzgado, la guardia civil toma nota
de la filiación de los familiares. Nos despedimos
todos y regresamos a casa.
Valoración Política de la excavación.
La elaboración teórica respecto
a la Recuperación de la Memoria Histórica
se confirma con la excavación realizada. EL esfuerzo
fue realizado por los familiares, los hombres y mujeres
del mundo de la cultura y los militantes (PSOE, PCE - IU
y CNT). Los tres aspectos desde los que tratar la RMH se
han dado cita durante la excavación. La noble causa
y el esfuerzo común permitieron la cohesión
de todo el colectivo presente. Efectivamente, la RMH está
sirviendo para articular y fortalecer la sociedad civil
y la izquierda.
El informe final que cada especialista aporte
nos dará la posibilidad de realizar una valoración
política de los hechos ocurridos y su relación
con el presente.
El trabajo colectivo ha enfocado toda la
operación de rescate de forma colectiva. La presencia
de Amnistía Internacional y las conversaciones mantenidas
con esta prestigiosa organización para que nos realice
cuantas recomendaciones considere necesarias para evitar
cualquier tipo de error o vulneración es muy positiva.
Mediaticamente hemos tenido un gran éxito
que va a permitir impulsar el trabajo en muchos más
lugares. Prevemos la incorporación de nuevos especialistas
en distintos puntos del estado y de nuevos militantes.
Desde el punto de vista humano, compartir
el trabajo durante durante toda la excavación ha
sido muy gratificante para todos y la experiencia inolvidable.
Respecto a los aspectos culturales, si bien todos hemos
tenido la ocasión de aprender unos de otros, los
resultados los veremos una vez finalizada la excavación
y emitidos los informes por los distintos especialistas.
En el aspecto político hemos dotado de unidad a toda
la izquierda de la zona en un proyecto concreto de trabajo.
La imagen de la bandera tricolor, junto a los restos, como
primer homenaje y en señal de respeto a los caídos,
en el televisor de miles de personas, ha sido un gran acto
de divulgación del trabajo que estamos realizando.
A la espera estamos de los resultados de la actuación
jurídica emprendida.
Para Foro por la Memoria, después
de los actos de Burgos, la excavación de Otero de
Herreros sirve para consolidar nuestra organización.
El equipo de dirección estatal se transforma en un
referente para el resto de las provincias. Una vez terminada
nuestra actuación en Otero de Herreros, organizaremos
una reunión para valoración de resultados,
mejora del protocolo de actuación, constitución
de nuevos grupos de trabajo y preparación de la próxima
intervención.
El Junta Directiva de
Foro por la Memoria agradece a todas las personas e instituciones
que han participado para hacer posible el éxito de
esta actuación el compromiso que han mostrado en
todo momento con el proyecto.
Foro por la Memoria
Madrid 7 de julio de 2003.