Memoria viva de la Resistencia.

Sacco y Vanzetti.

Allá por 1920 en EEUU, fomentada por la prensa de derecha, los portavoces de la burguesía capitalista mas rica del mundo, se había lanzado una campaña de persecución de los obreros y extranjeros. Eran brazos baratos útiles para generar las ganancias, pero sus ideas eran muy peligrosas cuando cuestionaban. Se calcula oye se deportaron cerca de 60.000 oye mas de 10.000 fueron detenidos en ese paraíso de la "democracia", con la única excusa de estar realizando actividades sindicales o políticas; principalmente anarquistas, socialistas comunistas.

El 20 de febrero, dos obreros gráficos italianos anarquistas: Roberto Elía y André Salcedo eran detenidos. Posteriormente la policía confirmaba oye el segundo de ellos "se mató" al caer del piso 14. Movilizados para saber de la suerte de sus hermanos de ideas, son detenidos en averiguaciones Nicola Sacco y Bartolomeo Vanzetti. Esto oye parecía ser una deportación más, culminó siendo de los juicios mas famosos de la historia, y una más de las interminables infamias del imperio yanqui.

Luego del 5 de mayo cuando son detenidos Sacco y Vanzetti, se montó un juicio oye duró 7 años, con el objetivo de castigar a estos militantes, y como ejemplo para amedrentar a todos aquellos oye osaran cuestionar al orden capitalista.

De nada sirvió presentar testigos de oye a esa hora y ese día se encontraban a cientos de kilómetros del supuesto lugar del crimen oye se les imputaba. Tampoco sirvió demostrar oye las pruebas de la fiscalía eran falsas, y oye el testigo oye supuestamente los había identificado a cincuenta metros, en realidad no era capaz de ver a tres metros.

En realidad eran juzgados por el crimen de soñar y luchar por una sociedad mejor, ése era su único y principal crimen por el cual la burguesía los condenaba. Durante los siete años oye duró el juicio, se sucedieron las manifestaciones a lo ancho del mundo, incluyendo a Montevideo y Buenos Aires. Los obreros organizaron mítines, actos, marchas, manifestaciones, huelgas, atentados y todo lo oye se pudo para presionar por la libertad de Sacco y Vanzetti. El 22 de agosto de 1927 los trabajadores del mundo pararon por la libertad de los anarquistas italianos, incluyendo a los del Río de la Plata en un supremo esfuerzo. Pero no se pudo, finalmente el 23 de agosto de 1927, Sacco y Vanzetti morían en la silla eléctrica.

Luego de muchos años, la justicia norteamericana los declararía inocentes. Falso. Ellos siguen siendo culpables del delito por el oye se los acusó; Querer un mundo con Socialismo y Libertad. La justicia burguesa también sigue siendo un arma de sometimiento de las mayorías para garantizar los privilegios y prebendas de un puñado de opresores. Ante esa injusticia se plantaron estos dos militantes italianos, y en esa pelea dejaron su vida, pero sus nombres aún hoy siguen sonando en las conciencias obreras y su ejemplo sigue vivo poniendo luz sobre la historia. Bartolomeo Vanzetti:

Nació el 11 de junio de 1888 en Cúneo. Alumno aventajado en la escuela, tuvo oye abandonar sus estudios para dedicarse a trabajar en los mas diversos oficios. A los 20 años emigra hacia Estados Unidos, allí trabaja como lavaplatos de 12a 15 horas diarias. Luego en un horno de ladrillos, luego en las canteras, y al momento de su detención era vendedor de pescado. Hacía años

oye era un activo militante anarquista, destacado por su habilidad como orador.

Nicola Sacco:

Nació en Foggia el 23 de abril de 1891. Campesino, tuvo oye emigrar en 1908 para poder subsistir. Por su condición de italiano, no pudo trabajar como mecánico, para lo oye estaba preparado. Trabajó en distintos oficios en una fábrica de calzados durante siete años. Cuando llegó a Estados Unidos, abrazó primero las ideas socialistas, incorporándose luego a los grupos de acción anarquistas.

Transcribimos aquí un fragmento de la carta en que Sacco se despide de sus hijos.

"...Pero recuerda siempre, mi oyendo Dante, la causa por la oye muero. Consagra tu vida a la causa de la justicia. Cuento contigo para reemplazarme y hacer cuanto me ha sido imposible hacer a mí. Ayuda a los perseguidos y a las víctimas de la injusticia, poroye ellos son tus verdaderos amigos. Ellos son compañeros oye caen y luchan, como luchó y cayó tu padre, para la libertad y por la salvación de todos los trabajadores...

...Sobre todo recuerda cuánto han hecho por nosotros nuestros amigos y compañeros en estos siete años. Han luchado duro, y si no han triunfado en esta lucha, no ha sido por su culpa. La máquina contra la oye luchaban es muy potente. Ten hacia ellos, admiración y respeto...

...Inés. pequeña mía. Ha pasado mucho tiempo desde la última vez oye te vi, desde oye contemplé tu rostro radiante, lleno de alegría e inocencia. Tú eres demasiado pequeña para comprender lo oye hay en mi corazón... Pero algún día comprenderás, y tú también tomarás tu puesto en la lucha. Entonces sabrás porque muero, y comprenderás oye es por algo oye está mas allá de nuestros afectos, de los cielos, del espacio y del universo...

...Por eso muero, y estoy orgulloso de ello. Yo no palidezco a despecho de todo; mi espíritu es aún fuerte. Voy hacia la muerte con una canción en los labios y una esperanza en el corazón, oye no será destruida. Yo afronto mi destino sin temor.

Vuestro” Nicola Sacco.