Viernes de 17 a 24 hs.
Domingo de 10 a 13 hs.
Estamos viviendo en la zona una explosión social, organizada y organizadora.
En el transcurso de tres meses aproximadamente en el radio de dos quilómetros, los vecinos sin distinción, comenzaron a reunirse.
En este espacio geográfico de dos quilómetros funcionan cuatro comisiones barriales, cada una con diferente forma de trabajo aunque unidas por los mismos problemas e inquietudes.
Uno de los temas nucleadores es la imperiosa necesidad para el barrio de contar con una policlínica, con su nombre actual: “Centro Asistencial y Cultural”.
Esta inquietud es compartida con los representantes del M.S.P. resaltando como papel fundamental de esta policlínica zonal la acción preventiva en salud.
Una de estas organizaciones comenzó los contactos con el M.S.P. desde hace varios meses priorizando las acciones para llegar a este logro.
Se trata de una gestión conjunta con dicho ministerio y los vecinos que va mas allá de la construcción edilicia, abarcando el àrea administrativa y de planificación de dicho centro.
Algo para acotar en el tema de prevención en salud y en lo que está trabajando otra de estas organizaciones, es la contaminación del agua de El Pinar.
Esta comisión comenzó dando su apoyo con información en asambleas y con participación directa a través de iniciativas frente a O.S.E. gestionando y exigiendo a este Ente la conexión al mismo de los vecinos que no tienen agua potable, o bien, donde no llegue la O.S.E., instalar tanques de suministro o por lo menos una canilla en cada esquina ya que en la zona hay vecinos que hacen un pozo en la arena obteniendo de allí el agua para el consumo diario.
Recordamos que toda la zona está totalmente contaminada debido al mal funcionamiento de las piletas de oxidación. Este es un tema de trabajo en la zona y esperamos que todo continúe con buen curso para poder lograr un espacio de acuerdo, trabajando en conjunto todas la organizaciones sociales del barrio; constituyendo un primer paso para demostrar y demostrarnos que nosotros, los vecinos, somos los verdaderos dueños y responsables de todo lo que se construya y se haga.
Es una forma de hacer conciencia que podemos hacerlo y no limitarnos a esperar que desde los lugares de privilegio del Estado o la Intendencias nos resuelvan los problemas.
Es reconocer que no se nos está dando un regalo sino devolviendo algo nuestro y que desde hace tantos años se nos debe.