Internacionales:

La telaraña del ALCA.

 

 

Por la década del 80 se da lugar al surgimiento del GAAT, organismo internacional para la regulación de aranceles y normas comerciales entre distintos países del globo. Si algo lo caracterizó fue el hecho de mostrar la disparidad de intenciones de los distintos gobiernos a la hora de encarar la defensa de sus intereses, haciendo de este y por momentos, una verdadera bolsa de gatos. Comienza a plantearse una disparidad entre los interese de los países desarrollados y los países de menor desarrollo.

Por esta misma época surge una conjunción de inversores internacionales y la secciones financieras de grandes empresas industriales que se aglutinan en la Asociación Mundial de Inversores (AMI). Allí se empieza a pergeñar una serie de ideas que llevaran a romper las limitaciones aduaneras existentes, que rompieran las fronteras dando lugar a una fácil penetración de productos y capitales a distintos países. Se maneja la compra de empresas para luego ser cerradas, instrumentar gobiernos afines e inclusive la compra liso y llana de políticos que les fueran leales. Esta falta de sensibilidad ante los efectos que pudiesen causar en distintos países y diferenciaciones internas, no mas altruistas pero mas realistas en cuanto a los efectos, la lleva a su extinción bajo esta forma.

En los 90 aparece la Organización Mundial de Comercio (OMC),  sustitutiva de AMI, tratando con el GAAT que representaba las formas normativas y arancelarias y que dan lugar a nacimiento  de lo que conocemos como el Tratado de Libre Comercio (TLC).

¿Y los G-7 y G-8 respectivamente que rol juegan?. Estos son los grandes patrones políticos, industriales y comerciales que se reúnen a repartirse el mundo:  América para USA, África los europeos, Japón que es un punto de débil incidencia en su zona pero con un gran desarrollo industrial, Rusia con un mercado propio y no sería de extrañar ver en un futuro también sentado en este organismo a los chinos.

En lo que respecta para Europa, este plan ha tenido poco andamiento dado de que el estado en que se encuentra África desde el punto de vista económico, social y estructural, hace que sea difícil llevarlo a la práctica.

Pero USA sigue su marcha con la elaboración del Área de Libre Comercio de las Américas  (ALCA), reuniendo para ello a todos los gobiernos de los países americanos.

En la reunión ministerial de Denver de 1995 se aprueba la matriz fundamental de este tratado cuyos puntos fundamentales dice así:

· Eliminación de las barreras de comercio e inversión.

· Esto se haría sobre la base de acuerdos subregionales y bilaterales existentes.

· Se contemplaría a los países con economía pequeña y con dificultades en el desarrollo industrial.

· Todo este proceso sería ejecutado hasta el 2005 durante el cual se haría una evaluación.

Este tratado es aprobado por todos los países americanos a pesar de la resistencia que generó a lo largo y ancho de América y por si alguien pudiese tener alguna duda, fue ratificado en el 2003.

USA comienza a desarrollar su plan de ejecución del TCL con sus dos vecinos formando el NAFTA, dos países culturalmente, socialmente y económicamente distintos con los cuales se logra eliminar los obstáculos al comercio y facilitar la circulación fronteriza de bienes y servicios.

Ha Comenzado ahora la segunda etapa de este proceso con la puesta en funcionamiento del CAFTA (Tratado de Libre Comercio de América Central) integrado por Guatemala, el Salvador, Honduras, Costa Rica, Nicaragua y República Dominicana. Este tratado se aprueba sin conocimiento de los respectivos pueblos, hasta tal punto es así que solo se llega a conocer cuando es tratado por el senado de USA.

En aquellos países donde el pueblo mostró una oposición fuerte al ALCA el problema ha sido tratado bajo el eufemístico nombre de “tratado bilateral” que es lo que conocemos que ha sucedido con algunos países andinos.

Acá, un buen día aparece un señor embajador de USA reclamando la aprobación de un acuerdo bilateral entre Uruguay y su país. Parecía un despropósito desubicado, pero este señor en definitiva estaba reclamando el cumplimiento de la fase final del ALCA que es lograr la aprobación por parte de los parlamentos del acuerdo que había sido aprobado en el 95 y ratificado en el 03.

Nosotros somos trabajadores que tratamos de verter nuestras opiniones en este modesto diarito, no obstante tenemos conocimiento de este problema, entonces cabe la pregunta: ¿ Diputados, senadores, ministros y presidentes no conocen este proceso que se ha dado con  el ALCA?

No hemos visto a ninguno de ellos saliendo a explicar esta situación, mucho menos a denunciarla, mas bien todo parece estar todo encubierto con la complicidad.

El MERCOSUR no va a rechazar este acuerdo, todos y cada uno de sus integrantes lo firmaron teniendo como testigos a la OEA, CEPAL y BID. Esta maña de ocultamiento que está mostrando alguna “izquierdita” para no redefinir su posición frente al ALCA, están actuando con las mismas condiciones que la derecha: jugando con el furuto de la población de este país.

Dejarlo pasar va significar una destrucción de la agricultura y la ganadería por la entrada de los grandes consorcios agroindustriales. Va a significar un destrozo industrial con desocupación y emigración. Va a significar un retroceso cultural  por la avalancha en el control de los medios educacionales.

El pueblo uruguayo, los mismo que los de los otros países del MERCOSUR han sido vendidos como chancho en una bolsa y es banal e irresponsable que gobiernos sigan poniendo cara de independientes. Este “acuerdo bilateral” no es tal, sino solo la concreción del ALCA por otros medios, en una telaraña muy bien tejida.

O se rompe con el ALCA o los trabajadores seremos excluidos de la vida productiva primero y en el mejor de los casos emigrantes en alguna parte del mundo, repitiendo así nuevamente la crisis del 2002.

 

 

NO A LA IMPOSICIÓN DEL ALCA!!!!!.