Washington
"Perro" Pérez.
Estuvo en el grupo de FUNSA que se integró al anarquismo previo a la
organización de FAU. Hizo sus primeros contactos con militantes de las JJLL.
Cayó un día del año 1955, junto con varios compañeros, al viejo local de
panaderos de la calle Arequita. Lugar adonde concurriría, de ahí en más, a
conversar y coordinar con los compañeros sobre problemas sindicales en FUNSA.
Poco después haría lo mismo, acompañado por Duarte, con el Ateneo del Cerro.
De ahí en adelante su militancia en FAU fue regular. Muchas tareas internas
contaban con su presencia, especialmente la propaganda callejera. Difícil no
verlo, junto a 10 ó 15 compañeros del gremio y también de la Organización, en
las pegatinas o actividades callejeras.
Fue un puntal, en los primeros pasos del sindicato, se destacaba en las tareas
agitativas. Pronto comenzó a ser el orador regular de los actos, ya en la
puerta de la fábrica o en el local sindical o en la calle. Le alcanzaba con un
cajón donde subirse y su vozarrón, su voz firme, desgranaba denuncias y
convocaba a la lucha. En alguna huelga formó piquetes para parar carneros. En
oportunidades subía a los ómnibus y conversaba con los obreros descarriados,
incitándolos a plegarse a la huelga. A muchos convenció y a otros...
Con Duarte constituyeron un dúo militante inseparable. Los unía una misma
convicción ideológica y la firmeza que ponían en cada lucha. Juntos fueron
presos en más de una oportunidad.
Representando a su gremio estuvo en la formación de la CNT e integró la
delegación al Congreso del Pueblo.
Fue activo militante de la ROE y estuvo en el apoyo a diferentes conflictos.
Tomó la responsabilidad de ir directamente a organizar el gremio de Seral a
Santa Lucía. Allí pasó muchos días y su labor resultó fecunda. Su experiencia y
su energía fueron un aporte más que importante. Fue un impulsor de esa digna
lucha de los obreros de Seral.
Murió en militancia. Apenas unos minutos después de un acto en FUNSA, en el que
se recordaba a su compañero Duarte, acto en el que fuera orador, su corazón
falló. Allí quedó en ese lugar donde desplegara tantas luchas y lo acompañaran
tantas esperanzas de justicia y libertad.