El anarquismo en Brasil.

En Brasil con una fuerte inmigración, principalmente la italiana, que mucho gravitó en el desarrollo del pensamiento socialista y libertario, se realizaron diversas actividades y experiencias de orientación anarquista. Estas actividades van desde experiencias sociales comunitarias y educativas a la tarea de formación de sindicatos obreros.

Cierra fin de siglo con una cantidad de periódicos libertarios de difunden la ideología y que promueven acciones sociales.

Hay secciones de la Internacional desde 1975 que mantienen una fluida relación con Buenos Aires y Montevideo. Ya en 1894 con motivo de una reunión preparatoria para organizar la conmemoración del 1º de Mayo en San Pablo son encarcelados un grupo de actividades.

La Liga Operaria Internacional de Río Grande, de orientación anarquista, que nace en 1897 se moviliza en pos de la realización del Primer Congreso Obrero de Río Grande do Sul que tuvo su funcionamiento el 1º y 2 de enero de 1898. Sobre fin de siglo hay múltiples huelgas en las que hay fuerte participación libertaria: tejedores, ferrocarril, cocheros, etc.

Sociedades de Resistencia y grupos libertarios aparecieron en todo el país a comienzos del siglo. En 1903 se fundan centenares de agrupaciones, asociaciones y uniones obreras. En Río de Janeiro hace su aparición la Federación de Asociaciones de Clase que más adelante se denominaría Federación Obrera Regional Brasileña.

En 1904 aparece, con fines de represión al movimiento obrero, una ley que es la equivalente a la "Ley de Residencia" que funciona en Argentina desde 1902. Ella, junto a la expulsión de militantes extranjeros, contempla también la posibilidad de confinamiento de militantes brasileños en el territorio de Acre, similar a la Tierra del Fuego.

Pero la formación y desarrollo de los sindicatos no se detuvo y enfrentó persecuciones y represiones. Se formaron Sociedades de Resistencia y uniones clasistas en las siguientes localidades: San Pablo, Campiñas, Santos, Río Claro, Río de Janeiro. Es justamente en este último lugar donde es reprimida en 1903 la poderosa huelga de la industria textil que figura en la historia de las luchas obreras como uno de los más importantes movimientos huelguísticos del Brasil.

Muchas de las Sociedades de Resistencia abordaban simultáneamente temáticas culturales y educativas. Ejemplo de ello es en Santos es la Universidad Popular creada por el Centro de Pintores de orientación anarquista. Fue también en Santos, a fines de 1905, que se desarrolló una de las huelgas más importantes del momento que tuvo un carácter general.

Desde 1905 hay intentos de organizar una federación nacional de sindicatos. En 1906 la Federación Regional de Río de Janeiro convocó un Congreso Nacional, del cual surgió la Confederación Obrera Brasileña. En este evento los anarquistas impidieron se opusieron al intento de transformar el movimiento obrero en base de sustentación de un nuevo partido político. Mantuvieron la posición de la autonomía sindical sobre la base de una concepción de un sindicalismo revolucionario. Su órgano periodístico fue "La Voz del Trabajador". La COB tuvo, además, una intensa actividad contra la proyectada guerra contra Argentina y contra el fusilamiento de Francisco Ferrer en España.

En 1906 se produjo en San Pablo una gran huelga general ferroviaria impulsada y dinamizada por los anarquistas. Es en este año que se realiza aquí un importante evento sindical: la Primer Conferencia Obrera Estadual y en la que se reestructuró la Federación Obrera de San Pablo.

Como en otros lugares del Continente, los anarquistas organizaban en el marco de la actividad obrera, tareas sociales amplias. Por ejemplo, la Liga Obrera de Campiñas fundó en 1907 una Escuela Libre que tenía como modelo la Escuela Moderna de Ferrer.

También como en otros lugares, los anarquistas impulsaron la lucha por las 8 horas a través de los sindicatos o federaciones donde desarrollaban su accionar. El 1º de Mayo de 1907 estalló en varias ciudades, San Pablo entre ellas, una huelga general que tenía como punto el reclamo de una jornada de trabajo de 8 horas. Esta medida había sido discutida y decidida el año anterior en el Primer Congreso Obrero Nacional. En esta, como tantas veces, aparece la acusación de que "la huelga fue provocada por algunos anarquistas, agitadores de oficio".

En el marco de esta movilización en Río de Janeiro los carboneros lograron la reducción de su jornada de 16 horas a 11. Algo similar lograron los pintores y electricistas del Teatro Municipal, los tejedores lograron la reducción que reclamaban.

En San Pablo declararon huelga los metalúrgicos, mecánicos y obreros de las fundiciones en pos de las 8 horas. También fueron a la huelga las costureras en reclamo de un horario mas humano.

En 1911 hay una dura lucha de los obreros del puerto de Santos, orientados por los anarquistas, contra el trust Gaffrée y Guinle por la reducción de la jornada de trabajo. Nace aquí el periódico A Revolta, algunos de sus buenos artículos de combate fueron publicados también en el periódico mejicano de Flores Magón: Regeneración.

El movimiento obrero brasileño mantenía una relación estrecha con su similar de Perú, Uruguay, Argentina. La solidaridad, valor que resaltaban constantemente los anarquistas, era una práctica altamente estimada. Y tenía sus expresiones a nivel nacional e internacional. Ejemplo de ello es lo ocurrido en oportunidad en que en un barco anclado en el puerto fluminense venía, exiliado de la Argentina, el militante Máximo Suárez, integrante en Buenos Aires del grupo editor de La Protesta. Con la ayuda de los estibadores lograron liberarlo. Suárez se incorporó luego a la lucha obrera y libertaria de Brasil.

También en 1911 los albañiles y tejedores de Sorocabana luchan por la reducción de la jornada.

Los carpinteros de Jaú (San Pablo) declaran la huelga reclamando las ocho horas y los textiles de Sao Bento reclaman la reducción de 14 a 10 horas de trabajo.

La represión en ese momento era violenta. Tenemos ejemplos como el de los ferroviarios de Jataí (Goias) que declaran la huelga y en el transcurso de ella muchos obreros son brutalmente torturados o asesinados.

En 1912, la lucha de los zapateros en San Pablo, una huelga que duró cinco meses y medio, se coronó con éxito logrando una jornada de 8 horas y media.

Durante las festividades del centenario de la independencia en Argentina muchos compañeros fueron perseguidos, desterrados, encarcelado o muertos. Como ocurrió en Uruguay, crearon los anarquistas en Brasil en 1910 un Comité Revolucionario de solidaridad y apoyo. Entre otras cosas este Comité organizó mítines y conferencias, publicó folletos y manifiestos, denunció con vigor los episodios brutales que ocurrían en la Argentina.

Como ocurre en Argentina, Chile, Méjico y Uruguay, los anarquistas inician en Río de Janeiro, en 1907, la lucha por la rebaja de los alquileres. Fundaron la Liga del Inquilino y difundieron la propuesta de una "Huelga de locatarios".

Poco más adelante, la organización obrera y los periódicos anarquistas llevan adelante con gran firmeza una campaña contra el servicio militar que el gobierno quería imponer. Se agitaba por parte de la reacción el fantasma de la amenaza fronteriza de Argentina. Los anarquistas, junto a otras fuerzas, fundaron la Liga Antimilitarista que tuvo como órgano periodístico a "Nao Matarás" dirigido por libertarios.

En 1913 tendría lugar el Segundo Congreso Obrero Brasileño. En el participarán dos federaciones estaduales, cinco federaciones locales, cincuenta y dos sindicatos y cuatro periódicos. Predominó claramente la ideología libertaria.

La COB en ese mismo año llevó adelante una tenaz y amplia campaña contra la "Ley Gordo" (Ley de Residencia). Hubo manifestaciones y mítines de protesta en San Pablo, Río de Janeiro, Campiñas, Santos, Ribeirao Preto y Río Claro.

Estalla la Primera Guerra Mundial y en relación a ella se desplegará una intensa labor. En Porto Alegre los anarquistas fundaron una "Liga Antimilitarista", que fue asaltada por los cadetes de la Escuela Militar, quienes quemaron libros y mesas del local donde funcionaba. Como efecto la guerra trajo un aumento del precio de los alimentos muy por encima de los salarios. Los anarquistas organizaron una campaña contra la carestía.

La lucha contra la guerra y la carestía se hizo una. El 1º de Mayo de 1914 se realizaron actos públicos, promovidos por los anarquistas, en: San Pablo, Belo Horizonte, Petrópolis, Río de Janeiro, Santos.

Se creó el Comité Proletario de Defensa Popular quien organizó en Río de Janeiro un gran mitin contra la carestía, que acabó con un asalto a los comercios y depósitos de comestibles. Un hecho de similar características fue el ocurrido en Santos un mes después.

En 1915 la "Comisión de Agitación contra la Guerra" fundada por anarquistas, organizó junto con la COB un gran mitin antibélico en Río de Janeiro, donde hablaron conocidos militantes libertarios. Un actividad semejante se realizó en San Pablo en el mismo momento. La campaña contra la guerra realizada en Brasil fue la más intensa y abarcativa que se realizara a nivel de Latinoamérica.

En 1917 tanto el movimiento obrero organizado como los anarquistas suman a la sostenida campaña antibélica su apoyo a la revolución rusa. Reivindicaban en relación a este evento la acción del pueblo y la aspiración a una sociedad sin clases.

En este año las huelgas se multiplicaron. Los obreros respondían ante la desocupación, los bajos salarios y la gran carestía. En San Pablo hubo una huelga general, que arrojó despidos, encarcelamientos, expulsión de extranjeros y asesinatos.

En varios lugares de San Pablo y del interior del estado hubo enfrentamientos entre las tropas del ejército, traídas para reprimirlos. Los anarquistas de la Federación Obrera de Río de Janeiro declararon enseguida la huelga general solidaria.

Poco después, la situación de miseria entre los trabajadores habilitó una tentativa revolucionaria. Ella surgía de Río de Janeiro y tenía como firmes sostenedores ideológicos a Manuel Campos y Joao Perdigao que contaban con el apoyo vigoroso de los anarquistas de Santos. Se declaran en huelga los obreros textiles de Río de Janeiro, Niteroi y Petrópolis, y esta era la señal para iniciar el movimiento, que debía consistir en la ocupación de todas las fábricas y talleres. Un militar infiltrado denunció el plan y el ejército comenzó de inmediato la represión. Los locales obreros y anarquistas fueron clausurados, centenares de trabajadores detenidos. Cayeron varios dirigentes presos. Hubo obreros heridos y muertos. Varios sindicatos fueron puestos fuera de la ley. Se cerraron periódicos anarquistas

Teniendo como impulsora a la corriente libertaria: idealismo, convicciones, sacrificios y sangre regaron el Brasil de estas primeras décadas.