Los
Derechos Humanos en el Uruguay.
Encuentro de
organizaciones sociales.
Organizado por el Espacio de
Solidaridad, teniendo como adherentes en la convocatoria a: Ateneo del Cerro,
Asociación de Estudiantes de Agronomía, Radios comunitarias: Germinal, Emisora
de la Villa y La Esquina, el 23 de agosto se realizó una Mesa Redonda con
debate sobre los Derechos Humanos en el Uruguay.
Todo el
evento, exposiciones de la Mesa y debate posterior, fue transmito en directo
por Emisora de la Villa FM.
La Mesa
estuvo compuesta por: Irma Leytes por Plenaria por Memoria y justicia;
integrantes de Amnistía, H.I.J.O.S. y el periodista Alberto Silva. Un
integrante del Espacio, Juan Pilo, ordenó el debate.
El frío
cortaba. Poca gente por la calle. Había estado lloviznando un par de horas
antes de la prevista para la actividad. ¿Vendría gente a conversar sobre esta
nuestra acuciante y por momentos dramática problemática que viven los de abajo
hoy y aquí?. Por momentos la duda estuvo planteada no obstante que la
propaganda había sido la adecuada.
Pero
no, pese a la crudeza helada de la noche la gente fue llegando al local del
Ateneo del Cerro y finalmente quedó repleto. Militantes de diferentes
organizaciones sociales y vecinos del barrio estaban presentes y con interés de
participar. De participar en un temática que la mayoría entendía abar-cativa,
amplia en su contenido.
Abrió
la actividad por el Espacio de Solidaridad la compañera Cecilia. Va a
continuación un extracto de su intervención.
“Como
Espacio de solidaridad y apoyo mutuo, convocamos a esta actividad con el fin de
realizar un intercambio activo de nuestras experiencias, en torno a la temática
de los derechos humanos. Consideramos
valiosos, los aportes de las instituciones y personas todas, que se encuentran
aquí presentes. Antes de pasar a las exposiciones de los invitados, queremos
plantear en forma breve, algunos ejes de esta extensa y rica temática.
Estamos
a 76 años del asesinato de los militantes obreros libertarios Sacco y Vanzetti,
por parte del mismo sistema que mató a tantos compañeros, y que hoy sigue aniquilando
a miles de personas diariamente. Mañana se cumplen 9 años del asesinato de
Fernando Morroni y Roberto Facal, crímenes que aún hoy, siguen impunes.
Esta
impunidad que se manifiesta de diversas maneras y formas. Una de las más
crudas, es el pisoteo de los derechos humanos que se da en las cárceles. Con
sus más de 4000 presos, de los cuales el 85% son jóvenes de barrios pobres.
Todos los días entran 30 nuevos presos a engrosar ese andamiaje siniestro.
Recientes hechos, como los ocurridos en Canelones, en Cárcel de Mujeres, Penal
de Libertad, etc. nos muestran un brutal cinismo por parte de todo el aparato
del Estado, de las autoridades, y de los inefables cómplices, los medios de
comunicación. Capaces de montar las mentiras mas atroces y absurdas, con tal de
llevar adelante esa campaña donde el pobre es el enemigo.
La
creciente criminalización de la pobreza nos toca a todos. En nuestros barrios
se montan operativos y campañas, en las que somos los delincuentes potenciales.
Fomentar la desconfianza entre iguales, la guerra entre pobres, el sentimiento
de estar vigilado constantemente, es su objetivo. El proceso de fragmentación
social, en el campo de los oprimidos, es la garantía mayor para asegurar y
perpetuar la impunidad de los poderosos.
Todo
comportamiento que se desmarque de lo que se dicta como aceptable, merece la represión inmediata, tanto de las
fuerzas del orden, como de los aparatos ideológicos... Se intentan pisotear nuestros derechos,
hasta en sus aspectos mas básicos. El simple hecho de comer todos los días se
torna casi un trágico acto de magia. Mientras la voracidad de las
trasnacionales sigue su marcha y los grandes productores exportan alimentos,
con ganancias millonarias, aquí se mueren niños de hambre, o por enfermedades
derivadas de la mala alimentación.
La
salud y su crisis endémica, no trabaja la prevención ni cura al enfermo. Un 69%
de la población es atendida por Salud Pública, que no maneja ni los recursos
más básicos. Ni medicamentos para el usuario, ni insumos mínimos para el
personal, que encima percibe salarios de hambre. El terrorismo asistencial que
pretendía denunciar el Ministro Bonilla es responsabilidad de las autoridades
del MSP, y del equipo económico del gobierno. Terrorismo asistencial, es dejar
a la gente sin acceso a la atención de salud...
Esta
situación de deterioro progresivo de
los derechos de las mayorías, nos plantea varias interrogantes: ¿cómo nos
paramos las organizaciones sociales ante estas problemáticas?, ¿cómo
enfrentamos todos y cada uno de nosotros esta realidad tan jodida?.
Un buen
inicio nos parece, el debate, el intercambio, la discusión de estos temas que
nos son comunes, en la búsqueda de una acción conjunta. Temas sobre los cuales,
diversas organizaciones trabajan desde su óptica y en sus ámbitos
específicos...
Más radios comunitarias, más escraches a los
genocidas, más dignidad y fuerza para la pelea. Solidaridad con las luchas que
vienen llevando adelante los diversos gremios obreros. Y en este momento,
queremos destacar, la valiente lucha de los compañeros de Salud Pública, en
su reclamo de salarios dignos y de una
mejor atención para la gente.
Hoy más
que nunca, denunciar y resistir los atropellos es tarea de todos. Ante este
panorama, nos parece que el Espacio Solidario, puede aportar a la articulación
de las diversas formas de resistencia. La construcción de un proceso que
revierta la situación existente, necesita de todos...
Es un
camino difícil, una tarea ardua que requiere del esfuerzo cotidiano,
absolutamente necesario para derribar la impunidad y la injusticia social.
Hacia la defensa de los derechos humanos
en toda su extensión.
Arriba los que luchan!!!.
Continuó
el compañero integrante de H.I.J.O.S. Entre otras cosas dijo: “El tema
que nos convoca es muy amplio. Somos un grupo de hijos de desaparecidos con una
historia personal que tratamos de darle el sentido que realmente tiene. El
hecho de las desapariciones, el hecho de las torturas en su momento se vieron
venir. Fue una estrategia represiva que apeló a lo más terrible y hasta el día
de hoy no ha existido un quiebre de esa política. Sin embargo la política de
impunidad se hace de muchas cosas y ha sido amalgamada en la sociedad en
general en nuevas mentalidades y cambios de valores. Esta lucha de verdad y
justicia que muchas veces se ha visto como trasnochada, incluso de nuestros
propios ámbitos, nosotros la mantenemos junto con nuestro espacio porque las
causas, las razones para que surgiera el terrorismo de Estado siguen
existiendo. Toda organización tiene una finalidad específica, la nuestra es la
denunciar la política de impunidad. Cuando decimos verdad y justicia hay ahí
reivindicaciones de valores. Los antivalores que promovieron la desaparición de
nuestros seres queridos quieren que las veredas se desdibujen. Artigas y los
indios Charrúas forman hoy parte de la historia y actos oficiales. Quizás
también dentro de doscientos años a los desaparecidos los quieran hacer formar
parte de los actos oficiales.
La
política de impunidad, incluso la función desde el Estado está en la tarea de
distorsionar la historia, por ejemplo con la teoría de los dos demonios.
Ponerse de juez y desde allí criminalizar un escrache o simbólicamente dejar
expuestos a ciertos personajes cuando en realidad los está protegiendo. Los
principales actores nos quieren dejar sólo el rol de espectadores.
Nosotros
tenemos espacios para reivindicar y tenemos mucho para construir. La pregunta
es ¿Cómo?.
En
Chile este 18 de agosto los Hijos comenzaron una huelga de hambre en reacción a
la propuesta de Lagos de una solución al tema de los desaparecidos que no tiene
diferencia con la estrategia de impunidad imperante en Uruguay.
Acto
seguido habló por la Plenaria por Memoria y Justicia, Irma Leytes, dijo:
La Plenaria está haciendo los ajustes para la actividad de mañana a 9 años del
Filtro. “La Plenaria tuvo su origen en el año 2000 como continuidad de la
Asamblea Permanente por los DD.HH. y la Asamblea Autónoma. La memoria nos lleva
hoy a plantear actividades a 30 años del Golpe de Estado, a analizar los objetivos
del golpe ya sea el 7 de febrero del 1973 y también podríamos hablar de 1968.
En el marco de estos 30 años se hizo un escrache contra la Asociación de
Bancos, La Asociación Rural y la Cámara de Industrias, porque aquí hay dos
clases y hay que definir responsables. La Plenaria está integrada por
trabajadores, estudiantes, organizaciones sindicales, radios comunitarias, es
un espacio horizontal y abierto.
Como
estrategia del terrorismo de Estado está la consecuencia del olvido, sobre todo
el porqué se peleó. Los compañeros que recordamos querían un cambio profundo de
la sociedad. Por parte del Estado se reconoció que hubo torturas y
desapariciones pero también por parte del Estado se quiso poner un punto final.
A partir del año que viene el informe de la Comisión de la Paz va a formar
parte de la historia oficial. Inclusive sobre hechos más recientes como la
actuación de la demodura en los hechos del Filtro. Hecho del Filtro que hay que
recordarlo también en relación a algo muy sentido por la gente como es el
derecho de asilo. La represión que ahí se dio fue en función de contener la
lucha popular.
La
impunidad debe ser enfrentada en todos sus términos. Desde los cenáculos Millor
elabora leyes antiescrache y se intenta extender la ley de caducidad a civiles
cómplices. Si acá se prohiben los escraches hay que responder con más
escraches. Si se criminaliza la lucha y la pobreza seguir teniendo una
respuesta acorde, proponer un lugar que los recursos nazcan desde abajo.
Continuar con los escraches y el rescate de la memoria de nuestros compañeros.
A su
vez la representante de Amnistía Internacional manifestó: “La memoria es
fundamental, una de las características de los últimos tiempos es pretender que
se olvide. Suceden guerras como la de Irak y atropellos a los DD.HH. Uruguay en
ese aspecto no está desvinculado del mundo. El tema de la memoria y la
impunidad son temas que se están dando en la región. La Comisión de la Paz no
tuvo asidero en la gente no tuvo una respuesta real. Es importante vincularse con
la gente, es importante vincularse hacia fuera como por ejemplo el Foro Social.
Sobre los DD.HH. en el Uruguay hoy estamos construyendo el concepto, se violan
los DD.HH. cuando se está prohibiendo a una persona acercarse a un lugar o a un
niño a acceder al sistema de educación o de salud. Derechos sociales,
culturales o económicos que estamos tratando de escuchar sobre ellos y ver la
realidad de cada país. En el Uruguay ver que está pasando en las
organizaciones, que está pasando en los barrios, que está pasando en nuestro
país. Los DD.HH. que se están violando en cada lugar.
El
Periodista Alberto Silva dijo: “Derechos Humanos es algo más amplio que
lo que tiene que ver con la violación sistemática... Estamos hablando que no
nos choreen cuando estamos parados en una esquina ni que nadie nos choree para
parar la ella. Tiene que ver con la cultura, tiene que ver con la actividad
hasta lúrica. Tiene que ver con tantísimas cosas... En este país cuando
hablamos de DD.HH. Todo el mundo entiende 27 de junio, estamos hablando a 30
años de la dictadura, estamos hablando a 30 años de la resistencia, estamos
hablando que en este país hubo más presos proporcionalmente que en la Alemania
nazi. Estamos hablando de las bestias que están impunes, estamos hablando de
Bordaberry que momentáneamente está libre pero que debiera estar preso... Los
parlamentarios no lograron que los familiares fueran el día de los DD.HH. al
Parlamento. En una patética triste tertulia estuvo presente Bordaberry a través
de su familia y como expositores Lacalle y Sanguinetti. Ahora el Departamento
de Estado norteamericano desclasifica información y señala la participación de
algunos de estos personeros en los escuadrones de la muerte. Yo me permito
recordar que hace un tiempo hemos denunciado a Sanguinetti como participando en
formaciones irregulares dedicada a la caza de nuestros héroes... Recién
escuchaba al compañero de H.I.J.O.S. de cómo nos cambian la historia, si de
aquí a unos años nos van a cambiar la historia de los desaparecidos y ahí está
la responsabilidad de todos nosotros. Ahí está la responsabilidad de la
memoria. De la memoria que pertenece a la construcción cuando rescatamos el
color y el calor de la lucha de la década del ´70, lo que era el Pantanoso y el
Paralelo 38, lo que era el Cerro como fortaleza, lo que era La Teja como
aguante y resistencia.
En esta
construcción estamos transmitiendo a otras generaciones lo que es la defensa de
los DD.HH. lo que es importante es que la gente ofrecía lo mejor de su vida, la
vida misma por los demás.
A estas
intervenciones siguió un debate que duró dos horas con planteos que expresaban
distintas realidades vinculadas al tema en cuestión. Por ejemplo, planteos
sobre el envenenamiento por efectos del plomo expuesto por Carlos Pilo
que integra una Comisión que viene denunciando y luchando desde hace años en
pos de soluciones. “Queremos denunciar la contaminación de los niños en La Teja
y en Canelones y los que se siguen contaminando. Los botijas no tienen comida y
ahora les dan una como limosna y los pobres no hemos perdido la dignidad. En
esta soledad estamos peleando por lo que podemos lograr. Hay que pelear por la memoria en relación a
todos los caídos que tenemos y por los problemas presentes como éste de
envenenamiento de niños”.
Por el militante
sindical Charamelo que analizó el papel del movimiento obrero organizado
en torno a distintas expresiones de DD.HH., a su integración a la Comisión de
la Paz y el no haberse retirado cuando correspondía, a la negativa actual del
PIT-CNT de adherir a la marcha de mañana 24 de agosto en recuerdo a los sucesos
brutales ocurridos en el Hospital Filtro. “Como militante sindical que
pertenezco al PIT-CNT siento vergüenza ajena por todas estas posturas... por
otro lado a la represión le conviene darle a los milicos más quemados en el
pasado, como a Pinochet en Chile, de última quienes se van a encargar de
reprimirnos en el futuro no son estos, son los nuevos aparatos represivos en la
modalidad que al sistema le conviene... tenemos que, desde las organizaciones
sociales apuntar a la lucha”.
Intervino
finalmente una compañera militante de la Olla popular del Tobogán:
“Nosotros pertenecemos a un asentamiento y somos de una olla popular que hace
un año y dos meses está en pie sin ayuda gubernamental, sostenida sólo por la
solidaridad de la gente. Es grave lo que les voy a comentar, nosotros estamos
soportando hace casi un año una represión policial tremenda en el asentamiento.
Sabemos que estamos trabajando con chicos con antecedentes, con problemas de
alcohol, jóvenes con problemas de drogadicción, somos simplemente vecinos,
militantes sociales, hoy la olla abarca
a 130 personas, hemos recibido una represión brutal, amenazas, entrada
policial al local de la olla a la una, dos y tres de la mañana, cualquier atropello,
allanaron mi casa también, persiguieron y acosaron brutalmente a jóvenes, a mi
hijo entre ellos. Quiero denunciar esto por una cosa, porque esto se hace
porque hay jóvenes pensando, hay jóvenes juntos. Somos conscientes que es por
esto y seguiremos adelante. Son jóvenes de asentamiento que no tienen un futuro
fácil por delante. Sentimos que el fuerte son los jóvenes, que tenemos que
hablar con ellos, trasladarles toda la memoria que podamos. Pensamos que en
determinadas cosas estamos en un retroceso grande, la dictadura a logrado sus
objetivos hemos perdido mucha dignidad y hay que procurar que los jóvenes no la
pierdan, que luchen por ella”.
El
compañero del Espacio Solidario, Juan Pilo, expresó: “Hay una realidad
que quizás sea necesario profundizar, que cuando se habla de revolución es como
si se hablara de un tabú, lo mismo cuando se habla de violencia revolucionaria
y también cuando se habla de acción directa se habla de un tabú. Entonces es
que hay cosas que no se quieren tocar y se quiere tapar el sol con un dedo. Y
claro, esto es caro a algunas ideologías y alguna gente que no ha participado
en los procesos revolucionarios ni van a participar nunca. Una cosa que nos
pasa a nosotros en esta zona desde hace años es que no nos sentimos representados
por militantes que dicen cosas que no son lo que la gente piensa. Tanto es así
que en la última marcha del 1º de Mayo, que aquí hay compañeros que
participaron hicimos un acto previo en la Plaza Laffone donde la gente planteó
sus reivindicaciones. Porque uno de los temas es que nosotros en tanto
dirigentes sindicales estudiantiles, el divorcio que hay con las bases es cada
vez más grande. O sea se habla de los DD.HH. pero no están en ninguna comisión
y hablan del movimiento obrero y hace 30 años que no trabajan. Ese tipo de
cosas es que hay que rechazar, hay que recoger es la tradición que tiene el
movimiento obrero, que tienen nuestros barrios, aquellas tradiciones que
legaron los trabajadores de los frigoríficos y esa impronta que estas luchas
dejaron de pelear por una sociedad nueva. Para lograr una sociedad nueva, sí
que tenemos que educar a nuestros hijos, pero también tenemos nosotros hoy que
luchar denodadamente al tiempo que desenmascarar a todos aquellos que están
para la pose y después no se ven en ningún lado... Quedar para arriba en esta
charla se decía, eso significa, entre otras cosas, que los jóvenes tengan
participación, que nosotros les demos la oportunidad de la participación como
corresponde, porque hay militantes que parece que como hicieron determinadas
cuestiones y no anduvieron muy bien, después de ellos más nadie puede hacer
nada, si aquí hay un nuevo intento de proceso revolucionario vamo´sarriba.
Lamentamos
no poder, por razones de espacio, hacer aunque fuera una síntesis de las
intervenciones de los presentes.
Hubo un
real intercambio, el debate fue rico, de buen nivel y dejó un saldo favorable y
las ganas de seguirlo. Las ganas de comenzar a incursionar en encares que son
comunes para fortalecer una acción conjunta.
La
fragmentación nos debilita, la solidaridad nos fortalece.