Boletín Nº 124 del CEAM. Para verlo sigue el enlace más abajo.
Secciones: Editorial de la Comisión de Exiliados Argentinos en Madrid, Leyes Reparatorias, Argentina, Juicios, España, Internacional, Opinión, Cultura/Historia Popular. Ver más noticias e información en nuestra página. B124-boletin-del-ceam-no-124
Editorial: El terremoto de San Juan de 1944 Preludios de esperanza a partir de una catástrofe.
Pasado el terremoto de San Juan, provincia de un país en estado de desestructuración, quien escribe este apunte era un niño de seis años que retomaba el aprendizaje de las primeras letras, viviendo, como tantos sanjuaninos, entre supervivientes y escombros. Porque junto a la vivencia de aquellos horrores reconoce que, al aprender a leer, fue contando con un cierto medio de “esperanza”.
Sobre una población urbana de cerca de cien mil personas hubo diez mil muertos. De las veinte mil casas que había, ninguna quedó intacta.
Abatida y vacilante la provincia quedó a merced de tres poderes irresolutos: un gobierno local que había tomado el poder cinco días antes del terremoto; la perfidia inepta de la clase social dominante y la dictadura militar inhábil que desde hacía medio año gobernaba al país.
Providencialmente un coronel, Juan Perón -reciente Secretario de Trabajo- anuncia por radio nacional una gran colecta para ayudar a las víctimas. Esos fondos, declara, serán “índice de nuestra solidaridad”.
Y fue así como con esta gesta solidaria quedó instaurado un proceso de transformación en Argentina gracias a la leal participación de todo el pueblo.
El 22 de enero de 1944, la orquesta de Canaro, las voces de Libertad Lamarque, Hugo del Carril y la típica de Juan D’Arienzo, se hicieron oír en el Luna Park en beneficio de las víctimas del terremoto en San Juan. Un monumental termómetro construido al efecto iría registrando el nivel de los aportes.
La colecta, como otra forma de “esperanza”, fue la presentación de Perón ante los argentinos, la primera señal de lo que debía ser un programa social solidario, el gran proyecto en donde coincidirían Perón y Evita. Evita, Eva Duarte, la persona que desde aquel festival de beneficencia compartiría su vida y se convertiría en la figura clave de su proyecto político.
Cinco años después, el 10 de abril de 1949, como corolario a esta nota se apunta que, el colegial aludido, ahora con once años, con guardapolvo blanco estuvo entre la multitud de colegiales junto a miles de almas del pueblo sanjuanino en el estadio del Parque de Mayo de San Juan, en donde se saludaba a Juan Perón, ya presidente argentino, junto a su esposa Eva Perón. “Era rubia como de oro, más que oro, era pura luz”, es una imagen que sigue brillando en la memoria.
Concluyendo, gracias a Perón San Juan pasó a ser un escenario nacional. Sin embargo, paradójicamente, uno de los cánticos de la oposición diría: “¿Dónde están, dónde están, los dineros de San Juan?” ¿Se lo culpó a Perón?. Fue la calumnia que se urdió para quitarle el prestigio político había ganado con San Juan. Lo constatado es que nada de ese dinero se robó. Está documentado que el presidente Ramírez, lo entrega personalmente en San Juan al Gobernador. Nadie tocó ese dinero. Una vez más los enfrentamientos políticos perturbaron ese alto compromiso.
Comisiñon Exiliados Argentinos de Madrid, 17 de Octubre 2016
Viendo a la tilinguería nacional –periodística y política– celebrar el viaje del Presidente y su familia al Vaticano, a la par que el inmoral gobernador de Salta, Juan Manuel Urtubey, utiliza a un joven con síndrome de Down para promocionar el voto electrónico que le patrocina una compañía privada de software, es obvio que el hato de depredadores que padece la Argentina no se detiene. Y si al cuadro le sumamos el penoso sainete de la claudicante dirigencia sindical cegetista –que es fácilmente presumible que traiciona a los trabajadores porque los tienen agarrados de las verijas– es evidente que de los verdaderos grandes temas nacionales es nada o muy poco lo que se habla. Y uno de ellos, fundamental e histórico, es la cuestión de la tierra.>