IZQUIERDA  Y  ESPERANTO
SATeH
MALDEKSTRO  KAJ  ESPERANTO

EL  ESPERANTO

LENGUAJE  AUXILIAR  INTERNACIONAL

Eduardo Vivancos

Este texto forma parte del libro editado para acompañar la exposición "La Memoria Libertaria", que durante los años 2006 y 2007 visitó diversas ciudades españolas.

El día 26 de julio del año 1887 apareció en Varsovia un librito en idioma ruso titulado "Mezjdunarodnyj Jazik" (Idioma Internacional) del Dr. Esperanto (que tiene esperanza). El autor fue un oftalmólogo polonés llamado Luis Lázaro Zamenhof que, movido por nobles principios humanistas, dedicó muchos años de su vida a la elaboración de un idioma que pudiera unir a los hombres. En su niñez Zamenhof residía en la ciudad de Białystok. Su población era una mezcla de razas y nacionalidades: lituanos, polacos, alemanes, judíos y rusos. Cada uno de estos grupos se mantenía estrictamente dentro de sus estrechos límites y despreciaba a los demás, siendo motivo de constantes querellas. A Zamenhof le habían enseñado en su casa que todos los seres humanos eran hermanos pero el espectáculo que presenciaba a diario en las calles de su ciudad natal contradecía los principios que le habían enseñado. El joven Luis se decía "si los hombres se odian es porque no se comprenden; la solución sería un idioma común para todos". Más tarde él mismo comprendió que el problema era mucho más complejo. Los hombres no se odiaban solamente a causa de la diversidad de idiomas; existían muchos prejuicios de raza, nacionalidad y religión que separaba a los hombres.

La idea de un idioma universal no es nueva. Ya desde épocas remotas los hombres sintieron la necesidad de hallar un medio de comunicación común. El humanista y filósofo Juan Luis Vives (1492-1540) escribió en De disciplinis (1532) "Sería una dicha si existiera un idioma común a todos los pueblos; el latín desaparecerá y los pueblos quedarán aislados".

León Tolstoi

En 1888 se crearon grupos esperantistas en Núremberg, Sofía y Moscú. En el mismo año se fundó el primer periódico en Esperanto, La Esperantisto, que aparecía mensualmente y servía de conexión entre los esperantistas esparcidos por todo el mundo. El escritor ruso León Tolstoi, que enviaba colaboración a dicho periódico, declaró: "Son tan pequeños los sacrificios que todo hombre de nuestro mundo moderno tendrá que imponerse para aprender el Esperanto, y tan grandes los beneficios que puede alcanzar, que nadie se debe sustraer a hacer este estudio".

La primera gramática de Esperanto en español apareció en el año 1890 y fue obra del escritor y gramático J. Rodríguez Huertas. El primer grupo esperantista en España se creó en Málaga el año 1892. En 1903 se fundó la Sociedad Española para la Propaganda del Esperanto. A partir de entonces el número de grupos esperantistas creció considerablemente. La idea de un idioma universal fue muy bien acogida en medios liberales y progresistas. Citemos la opinión formulada por el famoso federalista español Francisco Pi y Margall en el año 1898: "Nosotros que tanto quisiéramos ver abatidas las fronteras de los pueblos, no vacilamos en recomendar el estudio del Esperanto a todos los hombres de inteligencia y de corazón, que de veras amen el progreso intelectual y moral de los pueblos".

En el año 1905 el movimiento esperantista era ya lo suficiente fuerte para poder organizar un congreso internacional que tuvo lugar en Boulogne-sur-Mer, Francia. Fue un éxito. Participaron 688 esperantistas de 20 países. Durante todas las actividades del congreso el único idioma empleado fue el Esperanto evidenciando la utilidad del mismo. En un discurso muy emotivo Zamenhof dijo: "Reconozcamos la importancia del acto de hoy en la ciudad hospitalaria de Boulogne. No se trata de una reunión de ingleses con franceses, de rusos con polacos; es una reunión de hombres con hombres". Palabras de oro que merecen ser retenidas por todos los que aspiran a una sociedad fraterna, sin odios ni prejuicios. Desde entonces todos los años se han celebrado congresos internacionales a excepción de los años afectados por las dos guerras mundiales.

En 1909 el 5º Congreso Universal tuvo lugar en Barcelona con la participación de 1287 esperantistas de 52 países. Uno de los actos de los congresistas fue rendir homenaje al gran poeta del Renacimiento Catalán Bonaventura Carles Aribau que, a principios del siglo XIX, había profetizado que un idioma universal uniría a la familia humana. Si bien el congreso había sido un éxito, había habido dudas si se podría celebrar. La atmósfera en Barcelona estaba cargada debido a los acontecimientos que habían tenido lugar dos meses antes, la llamada "Semana Trágica", y a la feroz represión a que dio lugar. Como dato interesante señalemos que en una película filmada en 1976 relativa a dichos acontecimientos –La Ciutat Cremada– aparecen militantes revolucionarios empleando el Esperanto, lo que denota la influencia que dicho idioma tenía ya en los medios obreros, especialmente en los anarquistas.

Bonaventura Carles Aribau

En 1936 a raíz de la Revolución Española el movimiento esperantista resurgió notablemente y el Esperanto se empleó extensamente para información internacional. Una de las causas del entusiasmo por el Esperanto fue la revolución misma. Existía el convencimiento de que nos hallábamos en el umbral de un nuevo mundo, más justo, más racional, más humano, y que en este nuevo mundo el Esperanto tenía un lugar preferente y lógico. En muchos sindicatos, ateneos y centros culturales se organizaron cursos. Apenas unos días después de iniciarse la revolución apareció en Barcelona el boletín Informa Bulteno de la CNT-FAI redactado por ILES "Ibera Ligo de Esperantistaj Senŝtatanoj" (Liga Ibérica de Esperantistas Antiestatales).

Durante la misma época la Radio CNT-FAI daba emisiones en Esperanto tres veces por semana. También se publicaba en Barcelona el boletín Proleta Voĉo órgano de PUIL, Prolet-Unio de Iberamerikaj Landoj (Unión Proletaria de Países Ibero-americanos). En Valencia se publicaba Popola Fronto, boletín antifascista de información internacional.

Entre los miembros de las Brigadas Internacionales había algunos esperantistas y en algunos batallones existían grupos de dicho idioma. Por su parte el Comisariado de propaganda de la Generalitat de Catalunya empleaba el Esperanto y editaba boletines en dicho idioma para su información internacional. Es digno de señalar el hecho de que algunas colectividades obreras como, por ejemplo la de la industria lechera, empleaba el Esperanto para anunciar sus productos.

Con el final de la guerra toda actividad esperantista desapareció completamente en todo el país como había ocurrido en la zona ocupada por los franquistas. Muchos esperantistas fueron encarcelados y algunos, ejecutados. No fue hasta 1947 que el movimiento esperantista en España empezó a dar señales de vida, pero muy tímidamente y con muchas restricciones impuestas por el régimen.

Resumiendo, notemos que el movimiento esperantista ha tenido momentos buenos y momentos difíciles, pero es indudable que si el Esperanto ha sobrevivido más de 100 años a pesar de persecuciones, prohibiciones, dos guerras mundiales, apatía y escepticismo, es porque el idioma de Zamenhof reúne las condiciones necesarias para ser, efectivamente, el idioma internacional del futuro. El instrumento está ahí, presto, útil, conveniente y ha dado sus pruebas. ¿Sabrán los hombres aprovecharlo?