Representantes de la Consejería de Obras Públicas y del Ministerio de Medio Ambiente mantuvieron ayer una reunión en Toledo para abordar de manera integral el problema de las aguas residuales del Parque Nacional de las Lagunas de Ruidera, que se extiende a los términos municipales de Ruidera y de Ossa de Montiel.

Al término del encuentro, y en representación de la Consejería de Obras Públicas, el director general del Agua, Enrique Calleja, ha manifestado su satisfacción porque, en su opinión, se han producido avances significativos. De hecho, hoy mismo, los representantes de la Secretaría de Estado de Aguas y Costas han presentado el estudio que solicitó la propia Consejería, y en el que se planteas diversas alternativas.

En lo que se refiere a las aguas residuales del municipio de Ruidera, el estudio preliminar esboza la posibilidad de construir un colector, que aglutinaría los vertidos desde la urbanización de Los Villares, hoteles y demás instalaciones, junto con los vertidos de la población, y el tratamiento en la estación depuradora propiamente dicha, cuya construcción sería posterior.

En cuanto al municipio de Ossa de Montiel, se considera como mejor solución unificar todos los vertidos procedentes de La Cañada, Urbanización La Colgada, Los Molinos, Camino de San Pedro, camping Los Batanes, Chorro de las Minas y Baño de Las Mulas y tratamiento posterior en la estación depuradora construida al efecto.

Asimismo, se considera la posibilidad de realizar un filtro verde que pueda servir de tratamiento complementario del agua depurada, así como elemento de seguridad y depuración en situaciones de bajo caudal de agua. De esta manera se dará solución definitiva a los problemas de vertidos y aguas residuales que, en los últimos años, ha padecido el Parque Nacional de las Lagunas de Ruidera.

En nota de prensa, la Junta destaca la buena sintonía que existe entre ambas administraciones sobre este importante asunto, lo que redundará en beneficio del medio ambiente de este paraje natural y del turismo, cada vez más creciente, que acaparan las Lagunas en época estival.

En otro orden de cosas, la reunión se ha centrado en buscar una solución definitiva a los conflictos que está planteando la depuradora de aguas residuales de Alcázar de San Juan. Los representantes de las administraciones afectadas, Ministerio de Medio Ambiente y Ayuntamiento, han llegado a un consenso en la fecha de finalización de las obras, fijada para el próximo mes de diciembre y en la puesta en marcha de un proyecto de adecuación de las antiguas líneas de tratamiento.

Respecto al problema de los malos olores que se perciben en la población, ambas partes han acordado la realización de estudios, por parte de empresas especializadas, sin perjuicio de adoptar otras medidas de tratamiento y desodorización.

Además, se ha convenido la creación de una comisión de seguimiento que se reunirá cada 15 días para llevar a cabo una evaluación pormenorizada de la situación.